Ensayo De Globalizacion

Introducción

Desde hace un tiempo atrás se ha estado escuchando, de forma más persistente, el término de globalización. Los promotores de dicha difusión han sido tanto empresarios privados como gobiernos e instituciones financieras internacionales dentro de las que se destacan el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Pero entonces qué es la globalización, qué implicaciones tiene, podrá el país hacerle frente a esa ola o estamos al margen de la misma, qué costos tiene y principalmente en qué beneficiará al asalariado o campesino del país.

Antes de analizar sus implicaciones es necesario conocer su significado, para lo cual se cita la definición hecha por el FMI "La globalización es una interdependencia económica creciente del conjunto de países del mundo, provocada por el aumento del volumen y la variedad de las transacciones transfronterizas de bienes y servicios, así como de los flujos internacionales de capitales y la difusión acelerada de la tecnología".

Marco Conceptual

La globalización es la internacionalización de un país desde un punto de vista global en donde se involucra su economía, producción, sociedad, cultura y medio ambiente en pro de satisfacer la demanda global y de compensar la creciente necesidad de interrelacionarse con el mundo como mecanismo de subsistencia. Es la posibilidad que tienen los países para intercambiar información, riquezas y producción casi instantáneamente a una escala mundial. La médula de la globalización se puede expresar con la siguiente frase: “no estamos solos” y por ende es necesario relacionarnos más y mejor.

Realmente este concepto no es una invención que se le puede adjudicar al siglo XX sino que, en alguna medida, se ha manifestado desde tiempos remotos. Hechos como las conquistas del imperio romano, el descubrimiento de América, la expansión de la religión católica y la traída (migración) de esclavos al continente americano pone en evidencia que la interrelación se ha venido practicando desde que el hombre se vio en la necesidad de explorar nuevos y mejores horizontes.

Este proceso sigue avanzando y en la actualidad continuamos experimentando cambios y adoptando tendencias que conllevan aún más a globalizarnos. El manejo de una misma fecha para estrenar una película a nivel mundial es un indicio de una política de mercado común, televisión por cable o satelital, la acelerada innovación tecnológica que permite una mejor comunicación tales como Internet , celulares, GPS y los tratados de libre comercio; se pueden tomar como algunos ejemplos que permiten visualizar la magnitud del proceso y lo irreversible que es.

Es de conocimiento de todos que la implementación de cualquier estrategia o tendencia tiene sus pro y sus contra. Unos la alaban y otros se oponen, por eso es que se dice que “cada cabeza es un mundo”. Se tendría un gran éxito si viviéramos en un mundo idealista en donde todos los recursos estuvieran distribuidos equitativamente.

Partiendo de lo anterior se puede afirmar que el abrirnos al mundo puede no ser tan beneficioso para países en vías de desarrollo o en extrema pobreza y que por ende la globalización lograría acrecentar aún más la brecha entre pobres y ricos en vez de reducirla.

Pero si es algo irreversible qué puede hacer un país con una economía emergente. Puesto que no todos cuentan con iguales recursos es necesario formar alianzas con el propósito de aumentar las posibilidades de sobrevivir y sacar el mejor provecho posible. Se podría optar por varias tendencias. Una de ella sería la de crear bloques de países con similar situación económica basados en la frase de “unidos hacemos más”. Esto crearía un sector extremadamente industrializado (G7), otro con países semiindustrializados o con tendencia a ello tales como México, Brasil, China y por último un grupo en donde estaría el resto del mundo.

En el caso específico de Latinoamérica se podrían identificar dos grandes grupos: por un lado los semiindustrializados como el MERCOSUR y México y por otro el grupo de los países con miras al desarrollo. Dentro de este último se incluye a Centroamérica.

La idea anterior agudizaría la extensa brecha entre los que tienen más y los que no. El mundo estaría más dividido y tensionado, pero la mayor parte quedaría del lado de los miserables. Estos en algún momento, por motivos de supervivencia, arrebatarían el control a los ricos convirtiendo el mundo en un lugar caótico, lo cual conllevaría a una posible extinción de la civilización humana y/o del planeta Tierra.

Otra tendencia sería la de crear bloques por continentes, tal y como ya se esta viendo. En el viejo continente se encuentra la Unión Europea y en el nuevo el ALCA , todo esto con aras de hacer frente a la competencia que se avecina en lo que se podría llamar “la selva de cemento”, en donde permanecerán en pie las uniones que tenga bases sólidas, innovadoras y firmes.

Una tercera tendencia es la combinación de las anteriores, la cual se nota al formar la Unión Europea por un lado y la centroamericana por otro. Esta última se perfila como la estrategia a seguir.

Este empuje de globalizar esta siendo impulsado principalmente por los países industrializados (con mayor énfasis Estados Unidos) por dos aspectos: uno para acaparar un mayor mercado y por ende mayores ganancias. Se pretende eliminar la competencia y/o absorberla mediante alianzas estratégicas. El otro aspecto, y no menos importante, es evitar que haya un caos entre pobres y ricos. La proporción de recursos utilizados por estos dos mundos es extremadamente desequilibrada. Esto puede producir un desajuste en el uso de las riquezas y que se empiece a consumir todo como plagas a cualquier costo y por tanto los que tienen más perderán sus riquezas, tal y como se expreso anteriormente. Esto demuestra que los que administran y gozan de los patrimonios no pretenden ayudar a los pobres por mero humanismo o generosidad, por el contrario buscan mantener su estatus y controlar sus pertenencias, en pocas palabras es un mecanismo de supervivencia.

Qué tan preparada se encuentra Nicaragua frente a tal reto. Se han dado algunos pasos, que si bien es cierto no han sido significativos, indicando que la nación esta dispuesta a dejarse llevar por la ola mundialista y no pretende aislarse o hacerse de oídos sordos ante tal situación. Dentro de estos hechos se pueden mencionar tratados de libre comercio con países de Latinoamérica como República Dominicana y Chile. Estos acuerdos hasta el momento no han dado su fruto puesto que se encuentran en la fase de ratificación y/o reglamentación.

Dada la condición del país con miras a un posible desarrollo, las ofertas que le puede proveer al mundo no son tan atractivas como la de otros estados. En situación similar se encuentra el resto del istmo. Por tal motivo surge la necesidad de ver a Centroamérica como un solo bloque con el objeto de ser más llamativo para los mercados internacionales. Este es un impulso que ha estado haciendo el gobierno actual para agilizar el proceso de unión centroamericana, destacándose hechos concretos como la unión aduanera que permitirá un transito fronterizo más ágil.

Con base en la estrategia de unidad del istmo, Estados unidos decide impulsar el CAFTA , con el cual tanto los norteamericanos como los centroamericanos gozarán de un mercado común en donde transitarán productos y servicios competitivos que favorecerán a los consumidores.

Este acuerdo ya fue firmado por las naciones involucradas y se encuentra en la fase de ratificación de los respectivos congresos, la cual por motivos electorales norteamericanos muy posiblemente no se concretará en el presente año.

Se ha vendido la idea que “el CAFTA es el puente al progreso” pero ¿Nicaragua tiene los materiales para construir ese puente?, adicionalmente ¿posee el capital humano necesario para diseñarlo y cimentarlo?

Aunque, como se ha explicado anteriormente, la idea de formar un mercado común no es nueva; para muchos empresarios nicaragüenses es un término poco conocido o ignorado el cual no les quita el sueño y mucho menos es tema de discusión dentro de las reuniones ejecutivas. Aún peor, este no llega a formar parte de sus planes estratégicos, si es que los tienen. Con lo anterior se quiere expresar que Nicaragua no esta preparada para hacer frente al mercado global y sus implicaciones. ¿A quién se le puede imputar tal situación basado en que somos expertos administradores de lo malo y que cualquier error es culpa de los otros y no de nosotros?

Lo anterior se puede analizar tomando en cuenta cada uno de los actores principales, iniciando por el gobierno. Existen tres pilares fundamentales que una nación debe formar y cultivar para que tenga poder competitivo frente a un mercado mundial: estabilidad política, economía sana y un alto índice de educación. Teniendo estos pilares sólidos los gobiernos garantizan una sana competencia y de “calidad clase mundial”.

Tomemos el primer pilar: una estructura política adecuada. Nicaragua tiene antecedentes políticos que han dificultado el accionar de la economía, plagado de guerras, huelgas, confrontaciones, politiquería caudillezca que han venido no solo a detener el avance de la nación, sino a retrocederlo por lo menos cincuenta años.

La historia democrática nicaragüense se remonta a inicios de la década pasada en donde se vivió en carne propia una de las

...