Evaluacion

La evaluación se ha convertido en los últimos tiempos en un tema recurrente, tanto el debate didáctico como en las preocupaciones de los distintos estamentos que integran la vida escolar.

Siendo la educación una práctica social y la evaluación uno de sus principales actos que se lleva a cabo en las aulas de clases, de ahí que como educadora sea un tema tan importante para mí, así como para todos los que están involucrados en esta.

En este sentido y tomando en cuenta los nuevos enfoques propuestos en el diseño curricular del Sistema Educativo Nacional Bolivariano sobre el papel del proceso de evaluación dentro del aprendizaje, se puede decir que ha llegado el momento de valorar este proceso, ya que este incide en la planificación del trabajo del docente, en las actividades en el aula y fundamentalmente en las actividades reflexivas posteriores.

La evaluación de los aprendizajes actualmente es un elemento central dentro del ámbito educativo, esto implica entender desde otra perspectiva, el significado del estudiante, dotado de potencialidades las cuales va desarrollando en la medida en que crece y evoluciona en convivencia con otras personas. Así, la evaluación de los aprendizajes se considera como un proceso sistemático, sistémico participativo y reflexivo que permite emitir una valoración sobre el desarrollo de las potencialidades del estudiante, tomando en cuenta los principios que esta contempla como reciprocidad, continuidad, constructivista y participativa. Con relación a esto en el marco de la propuesta del diseño curricular bolivariano está orientado por los principios del comprender qué y cómo aprende el estudiante, para que la evaluación se convierta en una herramienta al servicio de todos los actores del proceso educativo; transciende la manera de la obtención de información, da lugar a las reflexiones, interpretaciones y juicios basados en las cualidades que denotan las potencialidades del estudiante como ser social en permanente desarrollo; permite la comprensión y transformación de la práctica educativa mediante el análisis que se obtenga en el proceso. Desde este enfoque el estudiante participa activamente en la valoración de los procesos y los resultados de su evaluación, ya que las informaciones obtenidas son utilizadas para reflexionar, tomar conciencia, revisar y mejorar su propio aprendizaje.

En tal sentido, se considera la evaluación un proceso centrado en la formación del ser social (estudiante); razón por la cual se sugiere que se oriente hacia la integralidad, que tome en cuenta la construcción de los conocimientos como en un proceso natural, espontaneo e inherente al ser humano.

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