Fuente Ovejuna

Fuente Ovejuna

Autor: Félix Lope de Vega

Editorial: Anaya

Lugar de edición: Madrid

Fecha: 1985

Número de páginas: 107

Resumen personal

Primer acto:

El primer acto empieza con la llegada del Comendador a la casa del Maestre. El Maestre le recibe y empiezan a hablar de la conquista de Ciudad Real. Maestre: - Y si importa, como paso, a ciudad real mi intento, veréis que, como violento rayo, sus muros abraso. Más tarde Pascuala y Laurencia hablan sobre la posibilidad que tiene Laurencia de liarse con Fernán Gómez. Laurencia: - Porque todo su cuidado, después de darnos disgusto, es anochecer con gusto y amanecer con enfado, (…). Pues tales los hombres son: cuando nos han menester, somos su vida, su ser, su alma, su corazón; pero pasadas las ascuas, las tías somos judías, y de llamarnos en vez de llamarnos tías, anda el nombre de las Pascuas. Aparecen en ese momento Frondoso, Barrildo y Mengo los cuales discuten sobre si existe o no el amor. Mengo afirmaba que no existía nada más que el amor por uno mismo y los otros dos estaban en desacuerdo. Se establece un debate y llega Flores uno de los “ayudantes” del Comendador. Mengo: - De que nadie tiene amor más que a su misma persona. Más tarde habla el Comendador con los alcaldes de Fuente Ovejuna, dándoles las gracias por haberle recibido de tal manera después de la guerra. Después el Comendador se encuentra a Pascuala y a Laurencia y las intenta convencer de que entren con él en su casa. Pero ellas se niegan y el Comendador llama Ortuño y Flores para que las metan en casa, e intenta forzarlas. Al terminar el acto se da el encuentro entre Laurencia y Frondoso donde este le declara su amor. Frondoso al ver que viene el comendador se esconde, y el Comendador intenta aprovecharse de nuevo de Laurencia y Frondoso sale de su escondite empuñando la ballesta que el Comendador había dejado en el suelo. Frondoso sin hacerle nada le advierte de que no se vuelva a repetir y el agresor le amenaza. Comendador: - ¡Peligro extraño y notorio! Mas yo tomaré venganza del agravio y del estorbo. ¡Que no cerrara con él! ¡Vive el cielo que me corro!

Segundo acto:

El acto comienza uniéndose Leonelo y Barrildo cambiando el tema de la astrología por la enseñanza. Llega pues Juan Rojo quejandose de la poca abundancia de bienes del pueblo y sale el tema de los agravios del Comendador y del poco bien que trae al pueblo. Todos le exponen sus quejas a Fernán Gómez sobretodo Laurencia por lo ocurrido anteriormente. Fernán Gómez se enfada y los hecha sin solucionar los problemas, como había prometido. Poco después aparece un soldado diciendo que Ciudad Real está casi tomada por los Reyes Católicos Fernán reúne a todos sus hombre y se va a la Ciudad Castellano Manchega. Regidor: - Ya a los Católicos Reyes que este nombre les dan ya, presto España les dará la obediencia de sus leyes. Antes de marcharse el Comendador tiene un incidente con una mujer y Mengo lo impide aunque por ello se lleve unos latigazos.

En otro lugar Frondoso vuelve a pedir el amor de Laurencia accede. En Ciudad Real el Comendador habla con el Maestre sobre la batalla perdida contra los Reyes Católicos, y el Comendador le recomienda que huya pero el maestre lo rechaza yendo en contra de sus principios. En Fuente Ovejuna se celebra la boda entre Laurencia y Frondoso. En esos momentos aparece el Comendador y prende a Frondoso y a Laurencia frente a todo el pueblo. Comendador: - Estese la boda queda, y no se alborote nadie.

Tercer acto:

El acto comienza con el pueblo reunido para analizar el comportamiento del comendador, si se merece un castigo y como se le ha de aplicar. A parece Laurencia recién salida de la cárcel reclamando poder tomar parte y voz en el consejo de hombres y además Mengo les recuerda los latigazos que recibió. El pueblo decide tomar la justicia por su mano tomando por la fuerza la casa de la Encomienda y asesinar al Comendador por actuar de tal forma. Juan: - ¿Qué orden pensáis tener?; Mengo: - Ir a matarle sin orden. Juntad el pueblo a una voz, que todos están conformes en que los tiranos mueran. Aunque surgen dudas por la carencia de armas en comparación con los guardianes deciden hacerlo en nombre de Fuente Ovejuna y en nombre de los Reyes Católicos. Cuando llegan al palacio del Comendador derrotan las puertas y a sus guardianes y matan a su dirigente. A sus sirvientes, Flores y Ortuño, les dan su merecido las mujeres. Flores vivo aún le cuenta la revolución de Fuente Ovejuna al rey. D. Fernando manda

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