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Independencia de las trece colonias británicas

William SanzApuntes1 de Mayo de 2016

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El texto nos habla sobre la  independencia de las trece colonias británicas. España tomó partido por los norteamericanos y en 1779 declaró su entrada al conflicto bélico.

De esta manera el riesgo de la guerra hacia un impedimento a la navegación entre Europa y América y así las embarcaciones comerciales eran cada vez menos frecuentes en esas rutas esto implicaba una escasez en las colonias, básicamente en productos importados de la capital.

En 1774 estaba vigente la real cédula la cual aprobaba el comercio entre Nueva España y Guatemala por una parte, y los virreinatos de Perú y Nueva Granada. El fruto más importante en este  trueque era el cacao de Guayaquil, cuyo puerto de entrada y salida en Nueva España era el de Acapulco.

El ruido de la guerra con Inglaterra, y dada el impedimento que ocasionaba el suministro en los mercados coloniales la Corona española otorgo una licencia extensa para trasladar ropas desde Nueva España hacia Sudamérica.  

Así en 1783 llegó al puerto de Acapulco don Pedro Blanco, capitán y maestre de la fragata Aurora procedente de Guayaquil. En este navío viajaban comerciantes peruanos, algunos de los cuales llevaban cantidades importantes de cacao y plata con destino final a Europa.

Durante su permanencia en México no sabían cuál era el motivo de adquirir mercancía allí y si su plan era venderlas después en Perú.

Era 8 de mayo de 1783 y la fragata Aurora se encontraba con las mercancías embarcadas y el capitán Blanco listo para zarpar rumbo a la bahía de Payta, al norte actual de Perú  justo en el momento antes de partir llegó una orden del virrey novohispano, Matías de Gálvez prohibiendo la salida del velero. Pocos días antes se corría la noticia de la paz, se desplazó un rumor de que la detención se debía  a que la nave  tomaría  rumbo hacia Manila con pliegos del real servicio.

Para este entonces aun reinaba el silencio sobre la salida de la Aurora, el capitán en atención a estos prejuicios, pedía que liberaran la orden de salida. En vista del mal estado, y dado que el deterioro se debía a la detención exclama que las autoridades repusieran los utensilios que se habían visto obligados a utilizar durante las semanas de espera en Acapulco.

Afectados los comerciantes se dirigieron al virrey donde expresaron lo que implicaba quedarse en Acapulco durante esa temporada el riesgo que tenían los individuos, ponían en peligro su salud y sus vidas, dado que no contaban con el reguardo adecuado para el posible azote del huaracan.

Así el 25 de junio llegaba la respuesta para el capitán Blanco y el 30 del mismo mes para los comerciantes. Donde el virrey decretaba a los oficiales del puerto para que suministraran todos los auxilios que necesitaba el capitán y para los comerciantes se denegaba la solicitud de que el buque no podía navegar por necesitarlo el rey para fines de su servicio.

Los primero indicios de algún aliciente llegaron en octubre, cuando el virrey le comunicó a blanco que se prepara para conducir al puerto del Gallao de Perú a un señor oficial general. El capitán puso manos a la obra. Su viaje original era hasta Payta, pero ahora ya sabía cuál era su nuevo destino, lo que duplicaba el tiempo de navegación.

A principios de noviembre, el capitán blanco ya sabía que el viajero sería nada más y nada menos que Teodoro Croix recién nombrado virrey de Perú. En los últimos años, la revuelta de Tupac Amaru había amenazado el poder español en el virreinato de Perú.

A principios de estos sucesos, Teodoro de Croix  recibía la encomienda de convertirse en virrey de Perú, con la responsabilidad de asegurar la calma y la estabilidad en la colonia.

Rodeado de poder y prestigio, tenía a su disposición cuantos lujos quisiera estos lujos, sin embargo no eran solo resultado y signo de bienestar material, sino que constituían también una necesaria herramienta de relaciones públicas. Es decir que le daban cierta proyección como virrey  en cuanto a la opinión pública, en la cual se reflejaba el respeto y el apoyo que pudiese obtener de la población.

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