LAS CIUDADES DE MAÑANA

Vemos diferencias en la concepción del espacio urbano entre las diferentes civilizaciones antiguas, condicionadas tanto por sus creencias como por el lugar en el que se instalaron: en Grecia las ciudades representaban un acto religioso, su intención era reflejar la grandeza de los dioses con la monumentalidad de los templos; y aunque la religiosidad era tan marcada también en las civilizaciones precolombinas, también le daban gran importancia a su entorno natural, sus dioses representaban la tierra, los astros y fenómenos naturales, y vemos como la ciudad se integra con el medio considerando las necesidades de este y la población. Y con el pasar del tiempo evolucionan las sociedades y van cambiando sus características y así mismo va cambiando la urbe en su intención y configuración; podemos decir que las ciudades son el resultado de la interacción entre hombre y medio ambiente, por lo tanto son víctimas directas de las transformaciones que sufren nuestra cultura y el entorno reflejadas en intenciones y necesidades.

En un principio las agrupaciones de humanos, después de la implementación de la agricultura, se daban para satisfacer las necesidades de alimento del pequeño grupo, pero con el tiempo se desarrollan técnicas para optimizar la producción y así poder intercambiar con otras poblaciones. Poco a poco en las ciudades se van generando mercados y estos a su vez hacen que crezca el número de habitantes, ya que ofrecen unas condiciones aptas para comercio obteniendo y ofreciendo productos de otras tierras.

Pero en la revolución Industrial la idea de ciudad adquiere una magnitud diferente, el hombre se convierte a una producción capitalista y una sociedad de consumo y punto de llegada para un gran volumen poblacional en busca de mejores oportunidades de empleo y condiciones de vida. Este proceso llamado urbanización es la mayor migración en un período corto de tiempo producido en la historia y el porcentaje sigue en aumento. La necesidad es albergar a la gran cantidad de población y en este afán vamos convitiendo nuestras ciudades en selvas de concreto y a pesar de ello no todas las personas que viven en ciudades tienen las condiciones adecuadas para vivir: vivienda, servicios públicos, etc., ni los medios para subsistir; con ello vemos nacer la indigencia, la creciente inseguridad, los barrios de invasión que a su vez conllevan a problemas sanitarios.

La población mundial seguía creciendo y de la mano no se habían desarrollado políticas, además de satisfacer las necesidades del hombre, controlar el impacto que generan tanto la producción industrial como los desechos del gran volumen poblacional.

Pero con el tiempo el hombre se ha dado cuenta del daño que ha ocasionado el desmedido consumo de recursos naturales y la contaminación producida por el nuevo estilo de vida de nuestra sociedad; no estamos sosteniendo una relación de mutuo beneficio

...