La Cuidad De Las Esfinges

LA CIUDAD DE LAS ESFINGES

Un mayordomo llamado Theodore era uno de los mejores mayordomos de Londres, acompañó a su amo Lord Halifax a cazar, empezó cazando patos y aves pero su vista empeoro, empezó a cazar zorros y perros del bosque, pero como su vista seguía empeorando solo alcanzaba a cazar animales de más de 3 metros por eso empezaba a cazar rinocerontes (Todo eso se lo hubiera ahorrado Lord Halifax si hubiera accedido a usar lentes, por no arruinar su excelente perfil griego).

Un día se encontraban cazando en la sabana de EL PARQUE NACIONAL DE TSAVO, en Kenia, Lord Halifax empezó a disparar a todos lados y causó una revuelta entre los rinocerontes blancos que venían hacia ellos, Theodore pensaba que era su fin y derrepente los rinocerontes cayeron muertos. Los gemelos Astorga fueron sus salvadores. Bueno casi, el señor Halifax estaba aplastado por los 5 rinocerontes de 3 toneladas cada uno.

Después de eso Theodore regreso a su apartamento en Londres y pensaba en regresar TSAVO a darle las gracias a los hermanos Astorga Diana y Aquiles, los encontró en un bar y no los pudo reconocer bien porque cuando lo salvaron, estaban vestidos de fresas silvestres, al verlos de día se dieron cuenta que eran solo niños (tenían menos de 13 años), así que se dispuso a charlar con ellos y los hermanos lo contrataron como su mayordomo.

Semanas después de eso a la casa de los Astorga había llegado una cabecilla de mono hecha de cera, adentro venía una invitación y dos boletos a Manaos, Brasil a un concurso de caza, el que cazara el animal más extraño se ganaría la fortuna del recién fallecido Jack Grey Hill que constaba de: En 15 fábricas de acero, 11 de galletas, 3 de armas 9 mansiones, 40 ranchos con 12000 cabezas de ganado, la editorial PÓLVORA INC. , el acuario taxidermico de la ciudad de Chicago y 1 cuenta bancaria con 870.000.000.000 de dólares. Fueron invitados los más destacados

Cazadores, investigadores, domadores, coleccionistas y expertos en animales, dejó su Herencia al que demostrara ser el mejor cazador del mundo.

Después de eso los hermanos Astorga regresaron a TSAVO pensando en que cazar, hasta que Diana sugirió que pusieran un anuncio en el periódico, llegaron cartas de todo el mundo, desde papagayos grises cantores de O SOLÉ MIO de la Guyana francesa hasta arboles carnívoros en Madagascar pero el que más les interesó fue el de un doctor en Nuevo México que decía que había otras civilizaciones no humanas racionales, así que acudieron a su llamado él les explico de un descubrimiento en los Himalaya los llamados “Lemurios”.

Viajan hasta la zona prohibida en lo Matang en Nepal, al día siguiente buscaban encontrar a los lemurios y Diana, Aquiles, Farraday y el Señor Udo son cazados y vendidos en la Cuidad de las esfinges.

Se despertaron en una especie

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