La Evaluación De La Educación En México

Reflexión

“La evaluación de la educación en México: el ámbito de las políticas y las respuestas institucionales”.

Margarita Zorrilla Fierro

El tema de evaluación educativa se ha presentado como menciona la autora del artículo desde hace varios sexenios presidenciales, pero es hasta el año 2001 cuando Vicente Fox ex presidente de la República Mexicana propone crear el Instituto Nacional para la Evaluación Educativa (INEE), organismo descentralizado que se encargaría de evaluar la educación en México pero, es hasta el 8 de agosto de 2002 que por Decreto Presidencial es creado el INEE.

El INEE sería el responsable de lo que Fox llamó “rendición de cuentas”. Es interesante conocer las propuestas realizadas en los distintos sexenios pero resulta complicado entender el propósito de cada una si se analiza desde la perspectiva del tiempo durante el cual se mantienen vigentes, pareciera que seis años de mandato presidencial fuesen suficientes para llevar a la práctica los nuevos planes educativos, pero este tiempo para los docentes, autoridades educativas y educandos se hace poco para lograr una cohesión total.

Con el paso de los años, los Programas Nacionales para la Educación han mejorado notablemente en cuanto a calidad se refiere, es indudable que los presidentes en curso han creado planes y estrategias que, como resultado, obtuvieron un avance notable en materia de calidad educativa, pero aún falta mucho por hacer y es responsabilidad de todos desde los padres de familia, docentes y educandos hasta las autoridades correspondientes responder con celeridad al gran número de demandas del mundo globalizado.

Las preguntas que se deben responder son las siguientes ¿Realmente los programas creados y legislados desde el sexenio de Miguel de la Madrid hasta Felipe Calderón se han llevado a cabo de la manera correcta?, ¿Sus resultados son factibles y verificables?

La cultura de evaluación que incluía la rendición de cuentas tuvo auge en el mandato presidencial de Vicente Fox (2001 – 2006) y tenía como propósito principal responder a las cuestiones anteriores. Pero, esta respuesta no ha sido suficiente. De forma personal y bajo la voz de experiencias propias y de algunos docentes, un sexenio presidencial es poco tiempo para aceptar, entender y adaptar los nuevos programas al trabajo diario.

Sería interesante que los presidentes en curso retomaran las mejores propuestas de programas anteriores y las modificaran lo necesario para mejorar sin cambiar radicalmente el cauce que lleve el Sistema Educativo hasta ese momento. El resultado sin lugar a dudas se mostraría más viable para todos.

A manera de conclusión se puede decir que los programas nacionales de educación buscan mejorar la calidad educativa, hacer pertinente la educación y erradicar

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