Las Cualidades Clásicas

LAS CUALIDADES CLÁSICAS: VOCACIÓN Y MORAL

SÍNTESIS

El magisterio no se define como una profesión sino como una misión o sacerdocio, un verdadero apostolado. La realización de esta práctica requiere no tanto de un saber, cuanto de un conjunto de cualidades de carácter ético-moral. La primera y más importante es la vocación, que deberá complementarse con un conjunto de virtudes de todo tipo.

Cuando se habla de elección para esta vocación, la persona debe responder a un llamado que no entra en materia de elección racional.

De acuerdo al Boletín de Educación de Santa Fe, si el maestro no tiene fe en la escuela, no tendrá entusiasmo profesional y para que el maestro de la escuela comprenda la sublime tarea de su misión, debe comenzar por dignificarse a sí mismo y de este modo dignificar también su profesión, con la satisfacción de que la felicidad duradera la hallará en el cumplimiento de su deber.

Para el ejercicio de la docencia, recordemos que es muy importante la auto- presentación y un componente básico de ésta, lo constituyen los modales que son los modos de hablar y de actuar frente a los alumnos, sin emplear locuciones familiares pues esto podría ocasionar la pérdida del respeto. Junto con los modales, se recuerda al maestro, que las cualidades morales se expresan a través de la constitución física del cuerpo: la robustez, el vigor, la salud y la fortaleza física entre otras, que son necesarias para sobrellevar la pesada carga del oficio que ejerce y que son útiles a la vez, para mantener el principio de autoridad.

COMENTARIO CRÍTICO

Según me pude percatar, lectura hace alusión a las definiciones más comunes del docente, unificándose en una sola: el magisterio puede entenderse como una misión o sacerdocio para la cual debe haber una vocación, un llamado interior, que implica una serie de cualidades tanto éticas como morales; estoy de acuerdo que para ejercer esta profesión se requiere de una vocación, sin embargo, difiero un poco con esta postura: “No hay que olvidar, además que se nace educador, como se nace artista (…)”.Abraham Castellanos; porque desde mi punto de vista, creo que aunque ciertamente es una vocación, también se puede ir desarrollando en la persona, se pueden ir forjando ciertas habilidades y adquiriendo las capacidades para ejercerla.

Pasando a otro punto, considero que es bueno mencionar, que el maestro debe tener fe en la escuela, en su misión, para tener el éxito profesional que debe caracterizar a todo maestro y pienso que para esto, el docente debe esforzarse por adquirir el perfil de todo maestro; además, las virtudes de la bondad, la caballerosidad, la ternura, la responsabilidad, el respeto, la comprensión, etc. y de este modo se habrá dignificado a sí mismo y por consiguiente, su vocación.

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