Lectura

Marina entiende por personalidad el modo en como una persona aplica sus capacidades en su situación vital, es decir, la aplicación de sus habilidades en su vida diaria. Se trata pues de un concepto interactivo, con aspecto estructural, conyuntual y circunstancial.

En ella Marina distingue tres etapas: personalidad recibida, personalidad aprendida y personalidad elegida.

• Personalidad recibida: matriz personal adquirida genéticamente. Sus elementos principales son las funciones intelectuales básicas, el temperamento y el sexo.
• Personalidad aprendida: carácter. Conjunto de hábitos afectivos, cognitivos y operativos adquiridos a partir de la personalidad base conocida como segunda naturaleza. Estos son estables pero aprendidos.

Personalidad elegida: modo en el que una persona concreta en una situación concreta es capaz de enfrentarse o aceptar su propio carácter. Incluye el sistema de valores, el proyecto vital…

La importancia de la afectividad en el desarrollo viene marcada por la importancia que esta ofrece a las personas ayudando a que estos adquieran conocimientos que sin recibir un apego positivo jamás llegarían a adquirir. Por ejemplo, un niño con apego positivo por parte de la madre, es capaz de adquirir una mayor confianza en sus actos y ser capaz de alejarse de los cuidados maternos, llegando así a explorar el mundo por sí mismo, esta independencia de los cuidados de la madre hará que el niño vaya adquiriendo experiencias que posteriormente serán convertidas en conceptos y conocimientos.

El ámbito de la libertad personal viene determinado por aquello que estamos predispuestos a hacer utilizando todos los medios disponibles para hacer frente a las situaciones adversas que se nos van presentando en nuestra vida diaria. Por ejemplo, cada persona decide su propio camino independientemente de la elección que tomaran sus padres o sus hermanos. Como simil, Marina utiliza una partida de póquer en la que cada jugador tiene unas cartas con las que jugar, y dependiendo de las cartas cada uno de los jugadores es libre de elegir si quiere continuar con la partida o por el contrario abandonar y seguir jugando en las posteriores partidas.

Los hábitos son, esquemas mentales estables, aprendidos por repetición de actos, que facilitan y automatizan las operaciones mentales cognitivas, afectivas, ejecutivas o motoras. Constituyen el carácter, la segunda naturaleza. Podían ser buenos (virtudes) o malos (vicios). Se adquieren por entrenamiento.  Por ejemplo podemos mejorar las ocurrencias de un niño si conseguimos que adquiera el hábito de producir buenas ocurrencias o conseguir que tenga mejores respuestas emocionales, si logramos que adquiera hábitos emocionales adecuados. También podemos mejorar sus funciones ejecutivas mediante el fomento de las virtudes de la acción. En cambio los recursos son los encargados en cierta medida de hacer llegar a las personas a situaciones o lugares donde no pueden alcanzar con los hábitos. La educación, pues, en su sentido más profundo de ampliar los poderes de la inteligencia y la capacidad de creación del ser humano es, siempre, una adquisición de hábitos adecuados.