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Misterio Cristiano


Enviado por   •  30 de Mayo de 2013  •  Monografías  •  3.327 Palabras (14 Páginas)  •  273 Visitas

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Misterio Cristiano.

El hombre es “capaz” de Dios.

 Amplio mi conocimiento sobre este tema y elaboro una crítica constructiva de lo que investigue al respecto.

El deseo de Dios:

"El deseo de Dios está inscrito en el corazón del hombre, porque el hombre ha sido creado por Dios y para Dios; y Dios no cesa de atraer al hombre hacia sí, y sólo en Dios encontrará el hombre la verdad y la dicha que no cesa de buscar".

- El hombre busca naturalmente la felicidad y al no encontrarla en este mundo la busca en un ser superior. Los que a tientas buscaron a Dios le hallaron.

- Puede existir un rechazo de Dios motivado por la rebelión ante el mal en el mundo, por el mal ejemplo de los creyentes o por miedo del juicio divino ante los pecados.

- En el fondo existe un deseo de algo más que lo que vemos y palpamos.

El hombre descubre ciertas vías o argumentos convincentes de que Dios existe. Estas vías parten del mundo material y de la persona humana para concluir que Dios debe existir. El mundo y el hombre no tienen su origen y su fin en sí mismos. Las pruebas de la existencia de Dios disponen a la fe y ayudan a ver que la fe no se opone a la razón humana.

Dios mismo, al crear al hombre a su propia imagen, inscribió en el corazón de éste el deseo de verlo. Aunque el hombre a menudo ignore tal deseo, Dios no cesa de atraerlo hacia sí, para que viva y encuentre en Él aquella plenitud de verdad y felicidad a la que aspira sin descanso. En consecuencia, el hombre, por naturaleza y vocación, es un ser esencialmente religioso, capaz de entrar en comunión con Dios. Esta íntima y vital relación con Dios otorga al hombre su dignidad fundamental.

 Construyo según mi fe y mis creencias mi propio credo.

Creo en Dios, que me creó a su imagen y semejanza y me dio la vida para amarlo. En el que aun cuando fallamos, él siempre nos vigila y nos intenta librar de la maldad de nuestros propios corazones.

Creo en Jesucristo, hijo unigénito del padre, el que dio a conocer a la humanidad el amor de Dios, aquel que no solo habló, sino fue capaz de entregar la vida por su rebaño. Es Cristo el que cambió el peso enorme del pecado mediante su cuerpo y su sangre, aquel que me redimió a mí y a ti.

Creo en el Espíritu Santo, aquel que nos guía a llegar hacia el padre, el que nos da las herramientas para alcanzar la santidad. Creo en la iglesia que fundó Cristo mediante Pedro, la roca, Creo en el bautizo del agua y del espíritu que nos libera, en la comunión eterna con el padre y la vida por la inmensidad del tiempo.

Amén

Creo en un solo Dios, Padre todopoderoso. Rico en misericordia. Que trasciende el mundo y la historia. Él es la Verdad, porque Dios es Luz, en El no hay tiniebla alguna, Él es Amor. En El no hay cambios, no tiene principio ni fin. Él es "El que es", desde siempre y para siempre. Creador de todo lo visible y lo invisible, que al hacer la naturaleza nos mandó custodiarla y conservarla, no solo para nosotros sino para las generaciones sucesivas. Que todo lo hace por amor, no sólo nos da la existencia sino que nos mantiene en ella. Que no abandona a sus hijos. Que todo lo que acontece en este mundo es querido o consentido por El. Si es querido no hay duda que es para nuestro bien, y si es consentido será también para el bien de los que aman a Dios.

Creo en Jesucristo, Hijo único de Dios, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros los hombres y por nuestra salvación bajó del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre. Nos dio un mandamiento: amarnos los unos a los otros como Él nos ha amado. Nos enseñó el camino de las bienaventuranzas: la pobreza de espíritu, la mansedumbre, el dolor soportado con paciencia, la sed de justicia, la misericordia, la pureza de corazón, la voluntad de paz, la persecución soportada por la justicia. Que por nuestra causa fue crucificado; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, a cada uno según sus méritos: quienes correspondieron al amor y a la piedad de Dios irán a la vida eterna; quienes lo rechazaron hasta el fin, al fuego inextinguible. Y su reino no tendrá fin.

Creo en la Virgen Santísima, Madre de nuestro señor Jesucristo, que le encarnó por obra y gracia del Espíritu Santo, Madre de la Iglesia y de todos los hombres. Es para mí: Consoladora de los afligidos, Auxilio de los cristianos, Puerta del cielo, Madre del buen consejo, causa de nuestra alegría, Salud de los enfermos, Reina de la paz. Mi madre, que aunque yo la olvide, ella no me deja nunca.

Creo en la Iglesia, como única y verdadera religión, fundada por el mismo Jesucristo sobre la piedra que es Pedro. Que es Una, Santa, Católica y Apostólica. Creo en la infalibilidad de que goza el sucesor de Pedro, cuando enseña -ex cátedra-, como pastor y maestro de todos los fieles, creo que el sucesor de Pedro está asistido de manera especial por el Espíritu Santo, y que este es como el alma de la Iglesia, por eso creo además en el magisterio de la Iglesia.

Creo en los sacramentos, instituidos por Jesucristo; Bautismo, Confirmación, Penitencia, Eucaristía, Matrimonio, Orden y Unción de enfermos.

Amén

 Hacer mínimo tres entrevistas sobre este tema con un margen de seis preguntas; luego elabora un análisis de las respuestas y subraya la idea más significativa.

A raíz de nuestra entrevista dedujimos que seguidores de Dios somos todos pero que algunos están más al pendiente de ser fiel a él y a sus principios, que la fe se fomenta día a día muchos confirman que Dios es su fuerza,

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