Mundo de sueños

Mundo de sueños

Veloz es un lindo potrillo que vive en una finca llamada “El Palacio de los sueños”. Un día su amo Cesar Vallejo le dice a Veloz vamos a casa de mi tío Ciro Alegría porque tiene una sorpresa para ti. Veloz se puso muy feliz y empezó a correr despavoridamente por todo la finca. Cuando llegó a la finca del tío Ciro, Veloz exclamó: ¡Qué lindo lugar es éste! Es un palacio. La entrada estaba asfaltada llena de flores y árboles a sus costados que los llevaba a la puerta principal.

En eso vimos al tío Ciro venir con una amplia sonrisa y sus brazos abiertos en gesto de calurosa bienvenida. Al acercarse nos dijo: ¡Sean bienvenidos, estoy contento de verlos! El tío Ciro ya de avanzada edad; pero con una vasta sabiduría para componer poemas y cuentos.

¡Veloz, hoy es tu día de suerte, muchacho! Exclamo el tío Ciro mientras saludaba a Vallejo. En eso Veloz se fue al establo y vio a una linda potrilla quedándose estupefacto y tartamudeando dijo: ¡Wow! ¡Qué hermosa es! ¡Qué lindo pelaje!. Después de dar suspiros profundos, Veloz se acercó y le dijo: ¡Hola! Mi nombre es Veloz y tú ¿Cómo te llamas? Mi nombre es Zafiro contestó con voz dulce y suave como el algodón que llegó a lo profundo de su corazón de Veloz.

Enseguida, Veloz salió corriendo del establo en busca del tío Ciro, ¡Tío Ciro! ¡Tío Ciro! ¡Necesito tus mejores versos! ¡Por favor! ¡Conocí a Zafiro! ¡Conocí a Zafiro! El tío Ciro con una sonrisa le dijo: Te dije que era tu día de suerte, muchacho. Te las daré Veloz, con calma, te las daré.

Luego regresó al establo más calmado y encontró a Zafiro triste, meditabunda, entonces se acercó y le dijo: ¿Porque estás triste Zafiro? Su mirada era vaga y confundida. Es que… mi amo…. José María Arguedas viajó, para recibir un premio como mejor escritor y tengo miedo de que no regrese por mí. Han pasado ya 2 semanas y aún no regresa. No estés más triste Zafiro, el pronto regresará … Pero ¡Hey! Espera …. Yo no quiero que te vayas dijo el dulce Veloz. Tú me caes bien ¿Podemos ser amigos, No? Si claro dijo Zafiro. Y desde ese momento, Zafiro no volvió a estar más triste.

Los días pasaban y la amistad de Veloz y Zafiro se entrelazaba cada vez más. Vallejo y Alegría usando sus dotes de poetas hicieron muchos versos para Zafiro y Veloz.

Dos semanas después el amo de Zafiro llegó, el señor José María Arguedas se encontraba extremadamente feliz porque recibió el título de mejor novelista. Cesar Vallejo su amigo entrañable lo abrazo y lo felicitó por su triunfo.

Estando en la sala de estudio platicando mucho, ingresa Mariano Melgar con una botella de champagne para celebrar…. Pasado unas horas de elogios y barullo. José María en un tono de perplejidad exclamó: ¡Zafiro!, ¡ Zafiro! ¿Cómo esta ella? Melgar y Vallejo se rieron concienzudamente y dijeron:

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