NUNCA UN PRINCIPE AZUL TEATRO
pablocenzano10 de Agosto de 2014
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Nunca un príncipe azul
de Luís Marcelo Cabrera
luismarcelocabrera@yahoo.com.ar
www.ce-ar-te.com.ar
Trenque Lauquen – Buenos Aires
ARGENTINA
Mayo 2004
Personajes:
(Algunos son realizados por el mismos actor)
Blancanieves
Cenicienta
Hada
Sancho
Quijote
Joven Flautista
Señora
Gardel
Tarzán
Enano
Jane
Madrastra
Hermana rubia
Hermana morocha
Una casa con bastante lujo. Una mesa con candelabros.
Hay una joven limpiando, lleva un delantal, está sucia, de mal humor y cansada.
Entra Blancanieves .
Blancanieves- ¿Esta no es la casa de los enanos?-
Cenicienta- ¿Que enanos? ¿No sabe que los enanos están viviendo en el bosque? –
Blancanieves- Escuchame un cachito... ¿como puede ser? Otra vez me mandaron a cualquier lado...-
Cenicienta- Acá no hay ningún enano. Y dejemé que estoy de mal humor.-
Blancanieves- Peor tendría que estar yo: me acabo de enterar que me quieren envenenar.-
Cenicienta- Oh,... no me diga!-
Blancanieves- Sí, esa envidiosa...mi madrastra... Por eso quería esconderme en algún lado. Según el escritor, tenía que llegar a la casa de los enanos, pero se ve que me ha indicado mal el camino... Ah, perdón... no me presenté. Soy Blancanieves.-
Cenicienta- Cenicienta. Mucho gusto. ... Bueno, por un rato se puede quedar aquí. Esas yeguas se fueron todas al baile del castillo y me dejaron de plantón. La verdad que ya me tienen podrida. Por eso estoy de mal humor.-
Blancanieves- Bueno, vamos, che. Arriba esa onda. No hay algo para comer? Tengo un hambre bárbaro.-
Cenicienta- Ah, sí, hay de todo. Como ellas cenan allá, en el castillo, quedó toda la comida en la heladera, nomás.-
Blancanieves- Dale, pongamos la mesa y cenamos juntas.-
Cenicienta- ¿Y usted... no va al baile?-
Blancanieves- No, dejate de embromar... ¿a que voy a ir? ¿a buscar un príncipe azul? Ya estoy grandecita y no me trago esas historias... Además me duelen los pies, debe ser de tanto caminar.-
Cenicienta- Bueno... si vamos a cenar yo tendría que cambiarme porque estoy hecha un desastre. Pero todavía tengo cosas que limpiar.-
Blancanieves- Dejá todo así nomás . Y no te cambies, si total no vamos a ningún lado. Dale que tengo hambre.-
Cenicienta- ¿Le parece?-
Blancanieves- Dale, metele nomás. Y tuteame, tenemos casi la misma edad.-
Cenicienta- Claro. Sí. Pero usted es tan famosa.-
Blancanieves- Bah, la fama es puro cuento. Y tuteame, te dije.-
Cenicienta- Bueno. Ya vengo. ....Ah, todavía tengo el cuentito tuyo por ahí, lo busco y...¿te molestaría firmarmelo en la primera página?-
Blancanieves- Che... los chicos..... Están esperando....-
Cenicienta- Ah, sí, perdoná. –
Blancanieves- Y dale , traé la comida que tengo un hambre de lobo.-
Cenicienta- ¡Ni lo nombres! El otro día se comió a la abuela de una nena que siempre pasaba por acá que se llamaba...-
Blancanieves- Sí. Ya sé.-
Cenicienta- ...y sabés que al rato llegó esta nena a visitar a la abuela con una canasta llena de....-
Blancanieves- ¡¡Sí, ya lo sé!! Que ya lo sé, te digo. Andá de una vez que yo pongo la mesa. ¿Donde está el mantel?-
Cenicienta- Ahí. Y la vajilla está guardada allá. Voy a calentar la cena.-
Sale Cenicienta.
Blancanieves sacude el mantel y lo estira sobre la mesa.
En ese momento aparece un hada. Musica triunfal para la entrada del hada, a la que se ve
bastante venida a menos.
Hada- (a Blancanieves) ¿Cenicienta, verdad? No llores mas, querida, en minutos toda la casa estará limpia y tu podrás ir al baile. Mirá: un momento mágico y todo estará listo.- (el hada comienza a sacar objetos de una bolsa)
Blancanieves- ¿Que hace, señora?-
Hada- Ya verás, querida, no llores, pronto estarás en ese baile y...-
Blancanieves- Si yo no lloro. ¿Quien es usted?-
Hada- Soy tu hada salvadora, tu hada madrina. En un momento todo estará limpio.-
El hada se arremanga y comienza a limpiar.
Blancanieves- Eh... oiga... ¿que le pasa?-
Hada- Su casa quedará lustrosa
Usando todas estas cosas:
Un toque de CIF, que limpia y desengrasa, Magistral que rinde cuatro veces mas, Cierto, Camellito, una esponja Mortimer, Ala....-
Blancanieves- ¿Estamos en la tanda publicitaria?-
Hada- No. Que desastre. Hace años que no me sale un truco de verdad. Y... mirá, me salió este trabajito y lo agarré igual....-
Blancanieves- ¿Pero vos no hacés así.... con la varita ... y listo?-
Hada- Callate. Ni me hablés. Ni una me sale. Años que no me sale un pase mágico. Ojo, eh, esto acá , entre nosotras. Ni se te ocurra contarlo. Con decirte que se me partió en dos el palo del plumero y usé la varita para empatillarlo.-
Blancanieves- Uh, que desastre...-
Hada- Sí... no pego una . Pero vos no te preocupes. A ese baile vas a ir. Mirá, tuve que alquilar una carroza. No sabés lo que me costó. Hasta Buenos Aires tuve que viajar para conseguir una, porque acá pregunté y todos se me cagaban de risa. ¿De donde iba a sacar una carroza? Allá conseguís cualquier cosa. Eso sí, al baile vas a ir pero a las doce te volvés disparando porque se me vence el día de alquiler y se la tengo que devolver urgente, mirá que sinó pierdo plata.-
Blancanieves- No, usted está confundida...-
Hada- (que ha empezado a limpiar) Bueno, dale, nena, que yo me quedo limpiando todo, en la puerta tenés el carruaje. Por suerte vos estás cambiada. Me dijeron que ibas a estar hecha un desastre. Por las dudas había alquilado un vestido de fiesta, ....está ahí , en mi bolsa mágica... Como 300 pesos la noche, ese vestido.... este laburo de hada no da para mas....-
Blancanieves- No, pare. Se confundió. Yo no soy Cenicienta. Ella está en la cocina. Ahora viene. Y acá nadie va a ir a ningún baile.-
Hada- ¿Como? Oiga, señorita, yo tengo , por contrato, que mandar a esa niña al baile del castillo.-
Blancanieves- Sí, pero yo hace un rato que llegué y la Ceni me invitó a cenar. Y yo tengo un hambre que no aguanto mas. Así que la cortás con eso del baile.-
Hada- ¿Pero entonces usted no es Cenicienta?-
Blancanieves- No, querida, yo soy Blancanieves. Y vine equivocada, buscando la casa de los enanos.-
Hada- ¿Los siete enanos? Ni me hablés. Uno de ellos me hizo pis en la varita y ahí fue que perdí todos mis poderes.-
Blancanieves- ¡Que guacho! Menos mal que me perdí, entonces. Vení, sentate, vamos a comer, dale...-
Hada- ¿Te parece? Yo tenía que dejar todo limpio y....-
Blancanieves- No jodas. Sentate. La piba no va al baile.-
Hada- Bueno, la verdad es que estoy cansada, tuve que volar a Buenos Aires y volver, ... no doy mas...-
Blancanieves- ¿Hay avión desde acá?-
Hada- No, ... ¿que pavadas decís?-
Blancanieves- Como dijo que voló...-
Hada- Le afané la escoba a una bruja que vive en mi barrio. ¿Sabés que garrón viajar en micro? ¿Sabés lo que tarda? ... No,... si este laburo de hada no es para cualquiera... si no fuera que tengo tres haditos ya hubiera largado todo, mirá....-
Blancanieves- Y, sí, está dura la calle....-
Se escuchan voces afuera y galopes de corceles.
“No es un gigante!” dice una voz, y se repite .
De golpe se escucha un gran ruido de cristales rotos.
Cubierto de vidrios y montando un caballo flaco entra un hombre con una lanza en ristre.
Detrás de él otro , de a pie, muy gordo.
Blancanieves- ¡Que diablos sucede?!-
Cenicienta- (apareciendo desde la cocina, con una olla) ¿Que esesto?-
Sancho- (al flaco) Le dije, señor, que solo era una casa iluminada...-
Quijote- Es que... me pareció que las ventanas eran los ojos de un gigante...-
Sancho- No sé que hacer con él... cada vez está mas loco...-
Blancanieves- ¿Quienes son ustedes, señores?-
Quijote- Soy el hidalgo don Quijote. Y este es mi personal trainer, Sancho Panza.-
Hada- ¡Oh! ¿Don Quijote?-
Quijote- El mismo, para servirla, señora.-
Hada- ¿¡Don Quijote?! ...¡¡El de La Mancha!!-
Quijote- (intenta esconder una gran mancha en su pantalón) (a Sancho) ¡Te dije que llevaras el pantalón a la tintorería! ¡Te lo dije!-
Sancho- Siempre me está dando órdenes absurdas. Todavía no se inventaron las tintorerías.-
Quijote- Tenés menos imaginación que una piedra.-
Hada- ¡El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha!-
Quijote- Bueno, cortala. Basta con las cargaditas.-
Hada- Por favor, si yo solo...-
Don Quijote se ha quedado estático, con la vista fija en Cenicienta, a quien acaba de
descubrir.
Quijote- ¡¡Dulcinea!! ¡Mi bella Dulcinea!-
Cenicienta- ¿Eh?-
Quijote- Oh, mi dulce amor.... Dulcinea...-
Blancanieves- Escuche, don Quitejo...-
Quijote- Quijote, señorita.-
Blancanieves- Bueno. Mire, acá estabamos por cenar,
...