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Oratoria A Juarez


Enviado por   •  6 de Marzo de 2014  •  784 Palabras (4 Páginas)  •  336 Visitas

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Tema: Juárez como ejemplo para la niñez y la juventud.

Era hombre de estado que creía en las virtudes, en la lealtad, en el honor, en la libertad y en la soberanía entera y en la felicidad de su patria, Juárez es una lección, una soberana lección de moral cívica de profundo respeto a la verdad, que alcanzo la devoción a la patria.

Honorables miembros del jurado calificador estimados maestros, compañeros participantes de este evento, auditorio que me escucha, es un honor para mi encontrarme con ustedes y hablar sobre el destacado tema Juárez como ejemplo para la niñez y la juventud.

Salustio expresaba que “Recto es servir a la Patria con hechos hermosos”. Juárez la sirvió como constructor de la Nación. Cimentó la imagen de la Patria en la estabilidad justa y perdurable de las leyes que habían de convertirse en muros poderosos del edificio patrio. La obra de Juárez a través de un programa de reformas sociales, económicas y políticas, comienza en 1855, al expedirse la ley que suprime los fueros del clero y del ejército, la que, en homenaje al Patricio, quien la puso en vigor, es llamada la “Ley de Juárez”.

Después, da cima a uno de los monumentos más grandiosos en la historia de nuestra Nación: La Constitución de 1857. Ese nuevo evangelio de la vida de México, establece la forma republicana, representativa y popular, prohíbe las leyes retroactivas y privativas; suprime las penas infamantes y la prisión por deudas; reafirma la división del Gobierno en tres poderes, y fundamentalmente reconoce las garantías individuales de libertad, igualdad y seguridad.

La Carta Constitucional de 1857, es la victoria definitiva de la libertad del hombre como la entendía Cicerón: “La libertad sólo puede fijar su residencia en aquellos Estados donde el pueblo es poder supremo”.

En plena lucha de Reforma, Juárez, en un vigoroso y lúcido designio de estadista, había de convertir la guerra civil en Revolución de Reforma, coronando así a una Patria soberana y dueña de sus destinos. Su célebre manifiesto de 1859, prólogo de las Leyes de Reforma, ha de ser no sólo el luminoso ideario de Juárez, sino el ideario de toda la Nación. Y la expedición de las llamadas Leyes de Reforma se convertirían en otros tantos impactos en el cuerpo herido y caduco del Partido Conservador.

Así, el 12 de julio de 1859, expide la ley de nacionalización de bienes del clero. Al día siguiente reglamenta la anterior disposición sobre ocupación de bienes eclesiásticos. El 23 de julio promulga la ley del matrimonio civil. El 28 expide la ley del Registro Civil. El 31 expide la ley de secularización de cementerios, y finalmente, la ley sobre la libertad de cultos.

La obra de Juárez no es tarea circunstancial o transitoria. Viene desde los labios sagrados

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