Participación television

¿LECTURA VS TELEVISIÓN?

Urge lograr una postura con mayor seriedad referente a la idea sobre la formación de lectores en nuestro país. El tiempo presente ha sido testigo sobre el arrojamiento ante una realidad donde los niños y jóvenes les resulta muy tedioso proponerse el fortalecimiento y desarrollo sobre el hábito de la lectura.

Las primeras reacciones a tales propuestas no se hacen esperar, los adolescentes y niños se niegan a la entrada de la lectura en sus vidas diarias.

Si se realiza una observación crítica a esta realidad que acontece, el origen y la raíz de todo esto en cierta medida es por la influencia desmesurada que tiene la televisión sobre nuestra sociedad; propagandas y promociones comerciales que pueden considerarse con contenidos absurdos y sin fundamentos a los apegos de la ética que debe poseer toda empresa televisiva, nada propositivo, todo focalizado al incremento de la vanidad, vaguedad y en lo artificial. Además de esto se llega a la conclusión que en todo contenido televisivo no existe una proposición para elevar un acercamiento a la cultura, ni permitir encontrar nuestras propias respuestas que se pueden obtener (como una alternativa más) a través del desciframiento de una lectura, de experimentar las pasiones y sentimientos sublimes de algún poeta, de obtener conocimiento a través de la lectura de un texto científico e informativo, de acercarse a las entrañas de nuestra historia mitológica y los retratos costumbristas que caracterizan las leyendas de nuestro país. Los niños y algunos jóvenes se han perdido de un legado cultural increíble; es así

como deben adoptarse medidas con respecto al uso de la televisión y denotar los valores y antivalores presentados en esta, llevándose a cabo una visión crítica, apoyada en contenidos ya conocidos que se presentan en la televisión y puedan ser más selectivos al momento de verla.

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