Popol Vuh Ensayo

En el libro del Popol Vuh, libro que es una pequeña comparación con algo conocido por todos, tal como la Biblia, solo que vista desde un punto cosmológico, debido a que nos explica la creación del mundo a partir de dos dioses Tepeu, Gucumatz y corazón del cielo.

Aquellos seres creadores, progenitores y formadores de todas las cosas vivas en la faz de la tierra; los entes decidían los lazos que tendrían estos seres vivos unos con otros tanto animales como vegetativos. Ellos otorgaban la posibilidad de alimentarse y reproducirse entre ellos, siempre y cuando fuera no por voluntad propia o al menos que ellos no lo pensaran así, al contrario estaban condicionados a pensar que existían por el capricho que tenia ellos de poblar la tierra, tener alguien con quien se pudieran divertir.

Pero para la completa satisfacción de sus deseos no era suficiente la flora y fauna ya creada, necesitaban unos seres pensantes que fueran capaces de entender su motivo en la tierra, que no solo fueran impulsivos y terrenales; que tuvieran la capacidad de adquirir, transmitir y crear conocimientos. Basados en las premisas que les dieran sus dioses, tener alguien que fuera capaz de venerarlos, de sacrificarse por sus deseos, que buscaran su satisfacción.

Fue así que tomaron la gran decisión de crear al hombre en las tierras de quiche, tierras que fueron las destinadas para ser donadas de vida propia por los dioses. Ellos tuvieron 3 intentos para poder lograr la creación de un hombre, se dice que el primero que existió fue hecho de lodo, pero este no fue capaz ni siquiera de ponerse de pie. El segundo fue el hombre de madera echo gracias a los abuelos de la tierra, los adivinos, seres que se decidieron consultar por su gran capacidad de creación, pero en especial porque con su experiencia todo lo trabajaban a la perfección y era duradero, estos recibieron de igual manera la orden de que fueran seres que pudieran ser capaces de venerar a sus creadores, capaces de pensar y evolucionar. Estos tampoco duraron mucho tiempo, pues era más difícil su cuidado para que siguieran con vida sumado a que eran seres insensibles que se marchitaban con facilidad.

El último hombre que crearon fue a base de maíz blanco y maíz negro. El cual llego a cumplir todas las expectativas de los creadores y formadores, el único problema ahora es que eran cuatro, ninguno con un sexo o tarea definidas, pero con una sabiduría y conocimientos que no esperaban los dioses, hecho que los atemorizo, pues ellos podrían ser capaces a igualarse con su grandeza y llegaría un momento en que sus creaciones olvidarían a sus padres, olvidarían que eran más grandes que ellos, olvidarían rendirles tributo y adorarlos.

Fue por este temor a ser olvidados o alcanzados que decidieron ponerles un velo sobre sus ojos, limitarles la vista, que no pudieran ver más allá de lo predecible, logrando así que su único motivo de vivir serian aquellos que les daban conocimientos para sobrevivir y crecer, solo buscando la manera de complacerlos para que estos les trajeran buenos augurios.

En conclusión se puede observar la necesidad que siempre ha tenido el hombre de explicar su entorno, como su anhelo a creer en algo que lo guíe por el buen camino o de las enseñanzas necesarias para obrar. A pesar de la necesidad inminente que tenemos por saber y adquirir conocimientos que nos hagan seres sabios, factores importantes para que el mundo gire y adquiera un camino, siempre hemos tenido miedo de aceptar que nuestros actos solo fueron creados por nosotros, somos seres que siempre queremos ser justificados por otros, alguien que nos diga si obramos bien o mal, evitándonos así un castigo mayor o el pesar o remordimiento de lo echo.

Es por eso que existen seres superiores, llamados como quieran a lo largo de las décadas, o las religiones leyes dictadas para el buen obrar, pues el miedo a lo inexplicable, a lo que no se puede ver

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