Sensibilidad En El Arte

Qué es la sensibilidad en el arte?

En el arte para poder ser sensible se necesita de un gusto estético o gusto artístico. En objeto estético, en cuanto obra de arte y obra de naturaleza constituye el fundamento de los juicios y sentimientos de la belleza, sublimidad y fealdad de la experiencia artística. Cada persona tiene sus juicios de gusto y dice sobre lo bello, lo sublime o feo. La estética no legisla cánones artísticos, ni dicta normas de perspectiva, sino que intenta descubrir y explicitar racimalmente los contenidos objetivos y de experiencia subjetiva que enmarcan lo artístico.

El esteta que no se a la vez artista difícilmente podrá emitir juicios correctos sobre el arte. El artista posee una capacidad creadora y unos dones de plasmación artística que le distinguen de los demás. La experiencia artística es ese instante fugaz, muy breve hasta ser casi sin tiempo, en el que espectador se identifica totalmente con la obra del arte que está contemplando. La función del artista consiste en expresar emociones; y las únicas emociones que puede expresar son las que el siente, es decir, las suyas,

La obra de arte es concebida como un artefacto, creada con el propósito (cuando hay un grado suficiente de habilidad para justificar la palabra) de servir de medio para la consecución de un fin mas allá de ella, a saber, un estado de ánimo en el publico artista. Para poder afectar a su público de un cierto modo, el artista se dirige a él de determinada manera, colocándole entre sí una determinada obra de arte. El estado de ánimo creado en el publico puede de un modo o de otro ser un estado de ánimo valioso, que enriquezca su vida, y de si al artista, no solo el derecho a que lo admiren sino también a recibir la gratitud del público. El público, al tratar de realizar una reconstrucción exacta de su propia mente de la experiencia imaginativa del artista, se entrega a una búsqueda infinita.

La actividad que genera una experiencia artística es la actividad de la conciencia.

La experiencia artística no se genera de la nada. Presupone una experiencia psíquica o sensual-emocional, por el acto que genera la experiencia artística. Es transformada de sensación a imaginación, o de impresión en idea.

La experiencia estética, o actividad artística, es la experiencia de expresar las propias emociones. Y lo que las expresa es la actividad imaginativa total llamada indiferentemente lenguaje o arte. Pero expresar una emoción es lo mismo que cobrar conciencia de ella.

Una obra de arte no necesita serlo que llamaríamos una cosa real. Puede ser lo que llamamos una cosa imaginaria.

El valor de cualquier obra de arte dada para apreciar su valor no radica en el deleite de los elementos sensuales de los que como obra de arte realmente consta, sino el deleite de la experiencia imaginativa que estos elementos sensuales despiertan en él. Las obras de arte son solo medios para un fin; el fin es esta experiencia imaginativa total que ellos nos permiten disfrutar.

La actividad estética es una actividad del pensamiento en forma de conciencia, que convierte en imaginación una experiencia que, además de ser convertida de tal manera, es sensible.

El arte no solamente es una contemplación sino una acción.

Para entender más el tema hay que hablar sobre el juicio estético.

Cuando se dice que algo es feo bello o sublime estamos hablando de un juicio; de un modo inmediato y espontaneo predicamos cualidades que nos afectan anímicamente según diversos sentimientos.

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