Tonterias
nosedfdghfds9 de Julio de 2015
715 Palabras (3 Páginas)158 Visitas
Mejor con el pelo suelto:
En invierno el frío aprieta y dormir puede ser toda una aventura dependiendo de donde vivas. Accesorios como los gorros de los pijamas son un accesorio a priori perfecto para no acabar con el cuello congelado, pero puede que por otra parte, sea un arma de doble filo…
…y es que cuando se está durmiendo, hay que tener la cabeza destapada y al descubierto puesto que si la cubrimos aumenta levemente la temperatura interna del cerebro, lo justo para elevar la producción de Dióxido de Carbono y perjudicar gravemente al cerebro a la larga. ¿Una alternativa para no pasar frío en la coronilla? Dejarse el pelo largo suena interesante, ¡siempre que se pueda!
La cama es muy importante:
La falta de sueño es prácticamente tan grave como evitar el desayuno o no alimentar a nuestro cerebro como es necesario. Durante el sueño, el cuerpo humano segrega diversas hormonas como la mielina que regeneran el cuerpo a través de renovar continuamente las células. Si dormimos poco en el día a día no completamos el ciclo natural del cuerpo y no se regenerará correctamente. ¿El resultado? Más oxidación y peor bienestar.
Siempre se ha dicho que se deben dormir al menos ocho horas diarias. Está claro que cada persona es un mundo y depende de muchas circunstancias que una persona pueda dormir estas horas diarias, y además correctamente.
Del ordenador al paseo:
Se dice del sedentarismo que es una de las peores lacras de la cultura Occidental, y no van desencaminados. Porque con los horarios laborales de oficina, estando sentado tantísimas horas al día y dejando cualquier tipo de deporte a un lado, estamos diciéndole a nuestro cuerpo que esto se va a acabar.
El ejercicio físico ya sea leve, moderado o intenso, beneficia a nuestro cuerpo y también nuestro cerebro. Participa en la regeneración celular y la oxigenación y además ayuda a que durmamos mejor. El sedentarismo es una lacra que se debe erradicar, y comenzar andando quince o veinte minutos diarios, es ya un gran paso.
Mejor levantarse antes y desayunar bien:
Y esto asusta, porque al fin y al cabo podemos decir que todos lo hemos hecho alguna vez. Faltar al desayuno o retrasarlo es una causa común en tiempos de estrés y cuando, hablando claro, llegamos al trabajo con la hora pegada al… trasero. Pero cuidado, porque cuando el cuerpo está recién levantado hay unos níveles en sangre que se deben regular, y tomar un buen desayuno es fundamental para ello.
Fue la propia OMS (Org. Mundial de la Salud) quienes advirtieron del riesgo que se corre en la actualidad de faltar a estas comidas primerizas que son vitales para el resto del día y para ayudar a que el cerebro no se deteriore ante la falta de glucosa. No desayunar provoca entre otras causas, desmayos, vómitos y también daños a la larga en el estómago por la segregación continua de ácidos.
La baja laboral, por favor:
Esto no se puede elegir, ¡qué pena! Pero no podemos negar la realidad, ir al trabajo o a la universidad enfermo es hacer un flaco favor a nuestro cerebro. Cuando estamos enfermos, todo el cuerpo y por supuesto el cerebro se centra en expulsar al invasor y dedica casi todo su esfuerzo a ello, de ahí que estando enfermo pueda parecer que en ocasiones se está incluso desvariando.
Si realizamos trabajos intensos o de oficina o dedicamos muchas horas de estudio estando resfriado o con cualquier otro problema de salud que nos afecte directamente, el cerebro tendrá que repartir el trabajo y el sobreesfuerzo ya sabemos que no es bueno.
Con moderación:
No vamos a negar que el alcohol es el alma de muchas fiestas y sobre todo, de las fiestas nocturnas. Pero como todo en esta vida, abusar del alcohol crea más problemas aparte de los graves que ya
...