UN MAESTRO IDEAL EN SECUNDARIA

UN MAESTRO IDEAL EN SECUNDARIA

El maestro en secundaria debe de ser alegre y paciente para entender los cambios de lo que adolecen sus alumnos en esta etapa, ya que los adolescentes son alegres, apasionados, caprichosos y están llenos de esperanza como lo menciona  “Delval, juan (1994), en  el desarrollo humano” Es importante que los maestros mantengan comunicación con sus alumnos para que conozcan sus necesidades e intereses y de esta manera puedan implementar estrategias de enseñanza en las que sus alumnos estén interesados y pongan atención, ya  el que estén callados y sin moverse no significa que  van aprender más .(Fernando Hernández y Juana María Sancho (1996) “el estudiante –adolescente que vive y aprende en un contexto de cambio “.)

El maestro  en secundaria  debe de incentivar a sus alumnos para que participen en la clase, que discutan los problemas del salón, de la escuela y de las materias tratando de resolverlas.

El maestro en secundaria debe de tener ante todo respeto y amar su trabajo, pues los alumnos perciben cuando un maestro solo asiste por cumplir un horario y entonces le responden con indisciplina y falta de atención. La escuela enseña por fuerza, pero esto solo interesa a unos pocos, “Paul Veyne (1997), el imperio romano.”

El maestro en secundaria debe enseñar a formular por sí mismo “y a elaborar sus propias teorías y sistemas de creencias” (carretero, 1985)

El docente debe   realizar estrategias para intentar desarrollar la autonomía de sus alumnos, haciendo hincapié para que el alumno encuentre sus propias respuestas a sus preguntas, mediante experimentos, razonamientos críticos, confrontación de puntos de vista y, sobre todo encontrando un sentido en estas actividades.(Onrubia y Javier, 1997)

Desarrollar la autonomía en los alumnos para que piensen críticamente por si mismos tomando en cuenta muchos puntos de vista tanto en el terreno moral como en el intelectual. El profesor debe preocuparse constantemente de que su alumno sea capaz de tomar iniciativas, tener su propia opinión y desarrollar la confianza en su propia capacidad.  “Ya que de esta manera las prácticas educativas serán parte fundamental de la mediación social necesaria para apoyar y orientar el paso de los adolescentes a la vida adulta y su inserción como miembros plenos de la sociedad.” (Onrubia y Javier, 1997)

El maestro de secundaria debe de ayudar a sus alumnos a enfrentarse a un mundo en constante crecimiento, que cada vez contiene más tecnología, más avances científicos, una sociedad que necesita rescatar los valores, un mundo en que cada vez es más necesaria la comunicación, un mundo laborar que cambia rápidamente, en fin una serie de situaciones impredecibles para las que necesitan estar preparados, ya que” la escuela puede jugar un papel decisivo en la elaboración de, almenos, algunos de los proyectos de futuro de los adolescentes, facilitando experiencias y conocimientos relevantes para la transición a la vida adulta en aspectos como el futuro académico y profesional.” (Onrubia y Javier, 1997)

Pero especialmente en esta etapa se debe desarrollar la autoestima en los jóvenes, porque cuando una persona se siente amada y respetada es más fácil que acepte los valores y las normas; identificando a sus padres y maestros como un modelo a seguir, desarrollando el sentido básico de la seguridad con menor temor y ansiedad. Esto le permitirá desarrollarse de manera armónica en cualquier ámbito de su vida. De esta manera los adolescentes lograran calmar su apetito de excelencia, y la victoria será la superación de algo. De esta forma se propiciara el éxito escolar y se allana el camino para formar un adulto responsable, confiado en sus capacidades y habilidades respetuoso de los demás y de sí mismo, y se estará formando un joven que se quiere y por lo tanto capaz de querer a los demás.   

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