Violencia De Genero
Enviado por xalala • 9 de Febrero de 2013 • 383 Palabras (2 Páginas) • 238 Visitas
TOLERANCIA CERO FRENTE A LA VIOLENCIA DE GÉNERO
La violencia de género es una lacra de la sociedad que se debe erradicar desde la educación e imponiendo penas más duras.
Cambiar la mentalidad desde la infancia.
Los daños psicológicos son iguales o más graves que los físicos.
La pena de cárcel.
Siempre hay alguien que se pregunta ¿Por qué ella no se va?, en vez de preguntar ¿Por qué él la agrede? La sociedad suele poner el centro de gravedad de los malos tratos en la victima, buscando las razones por las que merece o se deja maltratar, y justifica al agresor diciendo que es un enfermo o un borracho.
La violencia de género es un problema con muchas raíces que hay que cortar, pero debemos empezar por cambiar nosotros mismos.
Para empezar a erradicar la violencia de género podemos empezar a estar atentos a nuestro lenguaje sexista, a la educación que damos a nuestros hijos, a nuestros papeles en la sociedad, a las agresiones verbales que aguantamos.
El maltrato psicológico es igual o más grave, puesto que no deja marcas y no sangra, pero doy fe de que existe. Te destruye lentamente, te corroe el alma y deja secuelas graves para toda la vida, que te mata por dentro. Y en ese afán de superioridad ante la mujer, el siempre encuentra tu error, tu fallo, tu defecto, tu problema y te lo hace ver de forma delicada, cariñosa, sutil, pero con firmeza…y acabas creyéndotelo.
En cuanto a la pena de cárcel que tiene los maltratadores es de tres años y 10 meses, y solo el 40% soporta penas inferiores a dos años de prisión.
El principal camino para acabar con la violencia de género es la prevención, Esto incluye un cambio global en la forma de ver las relaciones entre mujeres y hombres. Estos cambios deben partir de las personas adultas con el objetivo de que se transmitan eficazmente en niñas y niños.
Como mujer pienso que hay que valorar tus propias ideas respecto al amor y la pareja. Y ante todo, conociéndote a ti misma y teniendo claro tus valores. Si los valores de la otra persona entran en conflicto con los tuyos, debes reconocer y no aceptar en ningún caso renunciar aquello que es importante para ti como tus gustos, tu manera de pensar y sobre todo tu forma de vivir.
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