ASCENSO ECONOMICO, CONSECUENCIA DEL HALLAZGO DEL PETRÒLEO EN TERRITORIO VENEZOLANO DURANTE EL GOBIERNO DE ROMULO BETANCOURT

REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACION SUPERIOR

UNIVERSIDAD SANTA MARIA SEDE EL PARAISO

ASIGNATURA: HISTORIA DE VENEZUELA

ASCENSO ECONOMICO, CONSECUENCIA DEL HALLAZGO DEL PETRÒLEO EN TERRITORIO VENEZOLANO DURANTE EL GOBIERNO DE ROMULO BETANCOURT

INTEGRANTES:

MARTINEZ BELLA

LOZADA FERDYMAR

RAMIREZ JOSMAR

MORALES ARGENIS

HERNANDEZ MONICA

VERA GRIBEL

CARACAS, JUNIO DEL 2014

ASCENSO ECONOMICO, CONSECUENCIA DEL HALLAZGO DEL PETRÒLEO EN TERRITORIO VENEZOLANO DURANTE EL GOBIERNO DE ROMULO BETANCOURT

Hipótesis

• La Llegada de Rómulo Betancourt a la presidencia mediante la revolución del 18 de octubre
• Las medidas económicas que buscarían solventar los problemas tanto económicos como sociales que para ese entonces presentaba Venezuela.
• La modificación de los porcentajes a pagar por concepto de Impuesto Sobre la Renta  mediante el Decreto Nº 112 del 31 de Diciembre de 1945  

PLATEAMIENTO DEL PROBLEMA

El gobierno de Rómulo Betancourt durante el periodo de 1959-1964, viene a ser una reestructuración del ambiente político, luego de diez años de dictadura. Por lo tanto, la situación en el país en cuanto al desarrollo de políticas económicas y sociales, era frágil, prácticamente en Venezuela, no era comenzar de cero, pero si era necesario reinventarse como país. Para esto, debemos tomar en cuenta que, en la misma evolución del proceso político, en cualquier nación que ha pasado por cambios de sistemas políticos, este se adentra en un tumultoso cambio en corrientes ideológicas. No obstante, en Venezuela, un pueblo que quería olvidar su triste pasado, no profundiza en los caracteres que se conjugan en la formación del Estado.

        De aquí surge la importancia de dar a conocer bajo que cultura política Rómulo Betancourt en su gobierno intenta levantar a Venezuela con la implementación de varias medidas económicas, pero lo mas importante que se destaca en su gobierno es el reconocimiento del petróleo como principal fuente de evolución, dando origen a la concepción rentista del Estado paternalista que comienza con el desarrollo de la industria petrolera y continúa en Venezuela durante el resto del siglo XX. El inicio mismo de la explotación petrolera en el país generó un impacto que tuvo implicaciones inmediatas en todos los ordenes de la vida social.

Cabe destacar que hoy por hoy el Petróleo sigue generando ingresos rentables a la nación, por lo que siempre será tema abierto de discusión ya que Venezuela es un país dependiente de la exportación de este producto.

De la crisis histórica por la que atravesó Venezuela entre el S IXX y S XX, se puede adquirir una conciencia crítica  con una amplia visión económica, permitiendo construir una economía de mercado, centrada en la competitividad y rentabilidad , alejada de la tutela e independencia del Estado.

Revolución Del 18 De Octubre De 1945

Fue un movimiento cívico militar que se mostró abiertamente en rebeldía contra el gobierno legítimo de la república. La Junta Revolucionaria de Gobierno presidida por Rómulo Betancourt rigió los destinos del país desde el 18 de octubre de 1945, hasta el 15de febrero de 1948, fecha esta ultima en la que asumió la Presidencia de la República el novelista Rómulo Gallegos, electo por voto universal, directo y secreto. Entre los logros de la Junta Revolucionaria de Gobierno en ese agitado periodo de la Historia de Venezuela, se destaca la reforma petrolera de 1945, la creación de la Corporación Venezolana de Fomento y el Estatuto Electoral de 1946, así como la promulgación de la Constitución Nacional de 1947. Una de las más importantes medidas tomadas por la Junta Revolucionaria de Gobierno fue la establecida por el Decreto N.-112 del 31 de diciembre de 1945, por medio del cual se modificaban los porcentajes a pagar por concepto de Impuesto Sobre La Renta. En esta forma se lograba una más adecuada participación del fisco en los beneficios generados por la industria petrolera hasta alcanzar el cincuenta por ciento de los mismos, por lo que se denomino al resultado de esa política, el régimen del 50-50 (Fifty-fifty) en materia petrolera.

        A inicios de 1945, el médico Edmundo Fernández abordó a Rómulo Betancourt y le confió que un grupo de militares jóvenes deseaban entrevistarse con él. Superada la sorpresa y consultada la solicitud con un reducido grupo de dirigentes de AD, el secretario general aceptó la invitación, y concurrió acompañado de Raúl Leoni a la primera reunión en casa del médico. Concurrieron vestidos de civiles el mayor Marcos Pérez Jiménez, y los tenientes Martín Márquez Áñez, Horacio López Conde y Carlos Morales. Pérez Jiménez llevó siempre la palabra, y luego de graves críticas al régimen de Medina, les dijo que los militares comprometidos en la conspiración  no aspiraban a gobernar el país ellos mismos, concluyendo con lo que probablemente Betancourt no esperaba, al menos de manera tan súbita.  Estas fueron las palabras del mayor: “Hemos llegado a la conclusión de que el civil que deberá presidir el gobierno provisional sea usted, señor Betancourt”.  

        A partir de esa noche el reducido grupo de dirigentes de AD que tuvo acceso al gran secreto, se conducía con una brasa caliente en sus manos, con un compromiso que les quitaba el sueño. Asumían un riesgo que comportaba el rechazo al golpe de Estado militar, pero que reservarían como carta final de fracasar todos los otros caminos. Creo que podemos afirmar con franqueza que AD y sus líderes desde Betancourt  y Gallegos hicieron lo posible y lo imposible por buscar una solución de consenso, pacífica, a la grave crisis.  Así está escrito.

        “Continuaron nuestras reuniones, nocturnas y secretas, con grupos de militares conspiradores”,  confesó Betancourt. Una conversación con el capitán Mario Vargas convenció al secretario general y a Gonzalo Barrios de que la conjura “era una vasta red que prácticamente estaba extendida a todas las guarniciones de la República”. Transcurrieron los días, con un intenso paralelismo de gestiones pacificas en busca de soluciones políticas,  y la conspiración que de tiempo en tiempo parecía ser innecesaria. Cuando se cerraron todos los caminos, el movimiento conspirativo  fue descubierto, y el 18 de octubre, detenidos algunos de los oficiales, entre ellos Pérez Jiménez. Esto puso en marcha el golpe de Estado que se decidió en pocas horas.  

        El 19 en la noche se constituyó en el Palacio de Miraflores la Junta Revolucionaria de Gobierno integrada  por  Rómulo Betancourt, presidente, y los doctores Raúl Leoni, Luis Beltrán Prieto Figueroa, y Gonzalo Barrios, de AD, el independiente Edmundo Fernández, y los  militares teniente coronel Carlos Delgado Chalbaud y capitán Mario R. Vargas.

Desde su primera declaración oficial, la JRG definió al movimiento como una revolución democrática, con objetivos precisos y limitados en el tiempo. El objetivo fundamental fue el de convocar a elecciones generales para la democratización del sistema político. Para despejar sospechas, la Junta Revolucionaria aprobó un decreto prohibiendo que sus miembros pudieran optar a la presidencia de la República una vez que se abriera el juego político. Sin pérdida de tiempo, fue designada una comisión plural de juristas eminentes para que redactaran un Estatuto Electoral a fin de convocar a elecciones generales para la  Asamblea Nacional Constituyente. Este decreto tiene fecha de 17 de noviembre, un mes después de instalada la JRG. De los miembros de la comisión redactora del Estatuto Electoral solo uno, Andrés Eloy Blanco, era de AD, los otros, eran de partidos de oposición o independientes, a saber: Luis Hernández Solís, de URD; Lorenzo Fernández, de la Democracia Cristiana;  Jesús Enrique Lossada, Nicomedes Zuloaga, Germán Suárez Flamerich, Martín Pérez Guevara, Ambrosio Oropeza y Luis Eduardo Monsanto. Mediante el Estatuto podrían votar “todos los venezolanos mayores de 18 años, sin distinción de sexo y sin más excepciones que los entredichos y los que cumplen condena penal por sentencia firme que lleve consigo la inhabilitación política”.  El Consejo Supremo Electoral fue integrado con representación de todos los partidos políticos.

        La transformación económica y social de Venezuela en el periodo 1945-1948 puede ser juzgada como sustancial. La piedra de toque de la Revolución de Octubre como era comprensible fue la política petrolera. La presencia de Betancourt y de Pérez Alfonzo en  el poder, y de manera tan inesperada, alarmó a los grandes ejecutivos petroleros, y en los primeros días predominaron las tensiones y las confusiones. El Gobierno puso las cartas sobre la mesa, la primera de las cuales era el reconocimiento de la Ley de 1943, o sea la validez de las concesiones otorgadas entonces. A partir de allí, el diálogo pudo ser áspero, pero dentro de una confianza necesaria. La economía gravitaba en torno del petróleo, el 92% de los ingresos en divisas era aportado por el petróleo. El atraso social del país obligaba a la Junta Revolucionaria de Gobierno a emprender, como en efecto lo hizo, las más diversas reformas en materia de educación, agraria, vivienda y salud, más obras de infraestructura de verdadera urgencia. Para satisfacer esos compromisos y llevar a cabo de manera diligente estas políticas, el régimen requería de ingresos buenos, y no había otra fuente para obtenerlos en ese momento que el petróleo.

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