Carta A Mis Alumno

15 de julio de 2014

Es para mí muy grato poder expresar a ustedes estas breves pero significativas palabras.

Las experiencias vividas este año sé que son innumerables, y estoy segura que el llegar hoy aquí para muchos de ustedes no fue fácil, este ciclo escolar requirieron de su esfuerzo y dedicación, y hoy no es más que el resultado de todo su empeño.

Chicos les ha tocado vivir en una época difícil, en todos los sentidos, muy diferente a la que sus padres o sus abuelos les tocó, en esta época donde todo es rápido y la información se tiene a la mano deben aprender a ser selectivos y cuidadosos con lo que es benéfico o no, hoy en día gracias a la tecnología abrirse paso en la vida no solo requiere de personas bien preparadas académicamente sino de aquellas que estén dispuestas a dar todo por lograr sus objetivos, y de cada uno de ustedes dependerá el éxito que conseguirán siempre con disciplina y esmero.

Han dado un paso esencial en su camino de la educación pero todavía tienen muchos que dar. Aprovechen lo aprendido de sus maestros y no me refiero solamente al juego de geometría, operaciones básicas, sistematizaciones, guiones de tutoría, proyectos, reglas ortográficas, o gramática inglesa, sino también a como ser más humanos, aprendieron cosas que quise enseñarles como amiga, no como docente.

Aprendieron a no dejarse arrastrar por ningún obstáculo y a tratar de buscar solución a los conflictos, aprendieron a ser siempre sinceros con sus sentimientos y pensamientos, a ser consecuentes con sus actos y sobre todo a aprender de los errores, a respetar al compañero, a ser ordenado, a seguir las reglas, a valorar la amistad, la unión, la solidaridad, la alegría, la confianza y el trabajo en equipo, todas estas son herramientas indispensables que quise transmitirles para hacer de ustedes mejores personas

Yo tuve la suerte de estar con ustedes en este segundo año de su nivel secundaria, compartiendo una serie de vivencias y construyendo día a día fuertes lazos de respeto y cariño que mantengo especialmente guardados en mi corazón, como olvidar la ida a la labor a comer elotes y esa sensación de independencia, los días de juego, de goles metidos, de pleitos ingenuos, todas nuestras presentaciones como: los bailes el día del desfile del 20 de noviembre, la poesía coral el día de las madres aquellos nervios que sentíamos minutos antes de cada una de ellas, las fiestas sorpresas, los triunfos y derrotas de todos como: el concurso de belleza y el de ortografía, las risas y también sus llantos, los regaños, el estrés de los exámenes bimestrales y todo el esfuerzo que pusieron a su evaluación final, tantas emociones que serán difíciles de olvidar.

El siguiente paso será una época cargada de nuevos aprendizajes y tareas, llena de nuevas personas que serán sus nuevos formadores y guías, sin dejar a un lado las enseñanzas aportadas por una

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