ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

¿Cuáles son las posibilidades reales de producir una interacción transformadora entre universidad y sociedad?


Enviado por   •  7 de Febrero de 2017  •  Resúmenes  •  1.110 Palabras (5 Páginas)  •  1.278 Visitas

Página 1 de 5

Universidad Autónoma de Entre Ríos

Facultad de Humanidades Artes y Ciencias Sociales

Licenciatura en Psicología

Taller de lectura y escritura

¿Cuáles son las posibilidades reales de producir una interacción transformadora entre universidad y sociedad?

Silvia Delaloye

Ramírez Cagnasia Martina

Comisión 8

Fecha de entrega: 2 de marzo de 2016

¿Cuáles son las posibilidades reales de producir una interacción transformadora entre universidad y sociedad?
                                                                                                                    Dr. Eduardo Rinesi

He elegido este texto porque me pareció, y creo yo, es interesante conocer los orígenes de lo que es la Universidad hoy en día porque al leer este texto y otros anteriores, me doy cuenta que la universidad no sería la que hoy tenemos, la que hoy es si no fuese por distintos acontecimientos durante la historia que hicieron posible esta Universidad que hoy conocemos: autónoma.
   Empiezo por lo primero: la constatación de la creciente, preocupación, del creciente interés por el compromiso social de la Universidad con eso que no sería ella misma: con el Estado, con otras organizaciones, con la sociedad, con sujetos sociales que no son los que están “dentro”, sino que por diversas razones quedan afuera. Esa creciente preocupación es un movimiento casi contrario a la universidad moderna como tal. Debemos recordar, la Universidad no es una institución moderna: la Universidad es una institución medieval. Nace en el medioevo europeo; esta nace preocupada por Dios, por los ángeles. Se preocupaba de cuestiones trascendentes a ella y al propio mundo terrenal. Esta era una institución ligada al poder eclesiástico y a las disciplinas que se enseñaban.
   Se fue dejando de lado las cuestiones angelicales y surgieron nuevas preocupaciones. Preocupación por las leyes, quiero decir, de los estados. Así es como surgen tres campos de estudio: Dios, las leyes y la salud.
   La universidad del medioevo era una universidad al servicio de la comunidad, de las organizaciones, de los poderes y de las corporaciones a los que servía. La universidad moderna nace con un movimiento en cierto modo opuesto o inverso al de nuestra preocupación actual por el compromiso social de la Universidad.
   En un texto Immanuel Kant escribió sobre la cuestión universitaria “El conflicto de las facultades”. En este texto Kant relaciona las cuatro universidades; había una cuarta universidad a la que nadie le daba importancia. Se dividían en universidades superiores a las ya mencionadas y estaba la inferior: la universidad de filosofía. En esta facultad se estudiaba el conocimiento, era dimensión reflexiva. Se encargaba de estudiar a las leyes, Dios y al cuerpo. Kant, también decía que el Estado tiene la obligación de imponer los contenidos, las formas de enseñar, las normas, las pautas de la vida universitaria. En este punto la universidad debe ser heterónoma.  Dice al respecto que la universidad debe ser autónoma; debe darse a sí misma sus propias normas, sus propias leyes, sus propias formas de pensar, porque si la universidad no piensa un poco hacia adentro lo que está haciendo, corre el riesgo de hacer estragos.
   Lo que vendría en la historia de Occidente, es el desarrollo de un pensamiento que voy a llamar “liberal”, que estuvo cada vez más atento a las posibilidades derivas autoritarias del poder del Estado. O de la Iglesia, que había sido el gran poder del medioevo, pero ahora iba perdiendo influencia.
   La idea de autonomía universitaria tiene un punto muy alto, se presenta como la idea de preservar la capacidad de la Universidad de pensar como si misma, de que nadie le diga qué pensar ni cómo pensar, poniendo del lado de afuera al Estado porque este es la amenaza en el pensamiento “liberal”. Es lógico que la universidad haya tendido a ser muy autonomista porque teníamos un Estado que acecho a las libertades de la Universidad y la puso a la defensiva.
   Debido a esto aparece la idea de “extensión” universitaria. Es la idea coincidente con la reivindicación de la autonomía, con no querer tener que ver nada con el Estado, con la idea de la institución cuyo sentido cierre sobre sí mismo.
    El Estado es el garante de las libertades. No es la amenaza, somos libres sólo el Estado y gracias al Estado. Somos libres gracias a la ley. Este es el encargado de ayudarnos a organizar nuestros estudios porque si no sería cualquier cosa.
   Hay factores que no nos permiten pensar con total autonomía y no son solo el estado, el mercado sino también las corporaciones a las que pertenecemos.
   También la cuestión del compromiso social que debe verificarse, en las tres funciones fundamentales de la Universidad.
   La educación superior puede ser pensada como un derecho universal. La educación secundaria en Argentina es obligatoria. Para ello hay un conjunto de políticas públicas, sociales y educativas, de enorme importancia que ayudan a mejorar el ingreso en las familias lo que ha dado como fruto la expansión en los últimos años que ha tenido el sistema universitario nacional.
    Las universidades fueron concebidas como formadoras de elites. La función de la Universidad en la historia de Occidente fue formar: elites eclesiásticas, elites profesionales, elites profesorales. Decía Barañao: ha cambiado mucho la estructura social argentina y necesitamos conocerla. El compromiso social en la función de extensión de las universidades de otra manera.
   Este texto del Dr. Rinesi se relaciona con el texto “La democratización del acceso a la universidad: de la ampliación de oportunidades a la inclusión” porque en ellos se habla de cómo se crea la universidad, el proceso histórico por el que tuvo que atravesar para ser la que tenemos, autónoma. Hablamos de la universidad en torno a la inclusión; cualquiera puede ser parte de la universidad, es más, es un derecho, por ende todos tenemos las mismas posibilidades sin importar la clase social a la que pertenezcamos y para ello tenemos ayudas como lo son las becas y otras políticas públicas, sociales y educativas que ha aumentado el número de alumnos en las instituciones.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (6 Kb)   pdf (66 Kb)   docx (12 Kb)  
Leer 4 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com