ECONOMÍA ALTERNATIVA

ECONOMÍA ALTERNATIVA

SANTIAGO POSADA SIEMPIRA

UNIVERSIDAD SANTO TOMAS

EFRAIN TINJO

BOGOTA D.C 30 DE MARZO DEL 2020

Quiero hablar principalmente en este ensayo sobre la economía del decrecimiento, aprovechando de que también es mi exposición, ya especificando en que consiste esta, y que pautas tiene para desarrollarla, incluiré levemente, las economías expuestas por mis compañeros y que relación tiene con esta, para finalizar, planteare con mi poco conocimiento si para mi esta economía sería viable o no, y el porque.

Palabras clave: Equidad, Finitos, producción.

Quiero plantear como economía alternativa, la economía del decrecimiento esta es una corriente de pensamiento económico, político y social, que tiene como idea principal el disminuir de forma controlada y progresiva la producción, con el objetivo de equilibrar la relación entre los seres humanos y la naturaleza. La situación en la que está el planeta es muy preocupante, y el objetivo no es tomar medidas para ir reduciendo el consumo a largo plazo, sino buscar una solución ya, puesto que el problema ya está entre nosotros.

Sustituir los valores globales, individualistas y consumistas por valores locales, de cooperación y humanistas.

Un decrecimiento productivo y económico, pero un crecimiento en la vida social.

Es una economía consiente mostrando que nuestros recursos son finitos, y cuando estos se extingan no se podrá seguir creciendo o produciendo ni si quiera en lo esencial.

Esta economía nos dice la ironía de los políticos que hablan de ajustar las materias primas y reducir los niveles de contaminación y luego dictan leyes que permiten el uso indiscriminado de pesticidas, deforestaciones, o generan la guerra del petróleo.

Algo bastante interesante de esta economía es lo que plantea el profesor de ciencias políticas Carlos Taibo en donde nos hace entender que el consumismo es una forma de vida carcelaria que, como una droga, distorsiona la realidad haciéndonos cree que somos felices. Y ¿en que se basa?

Él nos muestra como el las últimas decadas la renta per cápita de muchos de los países del norte haya crecido de manera exagerada, más los propios habitantes no se consideran a sí mismos más felices de lo que lo fueron sus padres o las generaciones anteriores a ello. La felicidad es un indicador individual del grado de bienestar personal. Si los datos demuestran que ésta no evoluciona al compás del aparente progreso significa que desde el sistema económico oficial se confunden bienestar y crecimiento de forma intencionada.

Esta economía se basa en algo que lo denomino las 8R, que son : Reconceptualizar Revaluar Reestructurar Relocalizar Redistribuir. Reducir Reutilizar y Reciclar, en donde en pocas palabras nos muestra unas pautas o un camino a seguir a través de estas en donde el decrecimiento sería una forma probable de tener una nueva economía o al menos pasar a ella. Esta también nos dice que una sociedad sin crecimiento puede seguir teniendo mercados, propiedad privada o dinero. Las instituciones de propiedad, crédito o empleo tendrían que reconfigurarse de forma radical para que el sistema fuera estable aun sin crecimiento.  

Esta economía tiene bastante semejanza a otras expuestas por mis compañeros de clase, como lo son la economía ecológica, la economía del buen vivir, la economía verde.

En donde todas estas buscan como objetivo reducir la producción del capitalismo salvaje y solo producir lo necesario para nuestra subsistencia y así por fin el ser humano sea un equilibrio, o al menos no tenga tanto impacto con la naturaleza.

Desde mi punto de vista es innegable, que hay una problemática mediante  el capitalismo salvaje en el que nos encontramos en pleno siglo 21, y aunque las teorías de estas economías me gustan bastante, puesto que refleja que tarde o temprano, y  ah este ritmo más temprano que nunca nos quedaremos sin recursos y es ahí en donde nos haremos la pregunta ¿Qué vamos a hacer? ¿Hicimos bien globalmente al escoger la eficiencia en vez de la equidad como economistas? Cuando nosotros somos una ciencia social, y nuestro trabajo se supone tendría que ser, repartir de manera equitativa para que estos mismos recursos duren más.  

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