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EL RECICLAJE COMO ESTRATEGIA PARA LA CONSERVACIÓN DEL MEDIO AMBIENTE INSTITUCIONAL DE LA UNIDAD EDUCATIVA COLEGIO BETANIA EN VALENCIA, ESTADO CARABOBO.

LeogldTesis24 de Noviembre de 2016

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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN

UNIDAD EDUCATIVA COLEGIO BETANIA

PROYECTO DE INVESTIGACIÓN

EL RECICLAJE COMO ESTRATEGIA PARA LA CONSERVACIÓN DEL MEDIO AMBIENTE INSTITUCIONAL DE LA UNIDAD EDUCATIVA COLEGIO BETANIA EN VALENCIA, ESTADO CARABOBO.

Tutora: Veliz Rosnely.                                                                                      Autores:

Boscán Ricardo

Bruno Kimberly

Hernández María

Jiménez Manuel

López Leoscar

Tovar Millennia

Valencia, Noviembre, 2016


CAPITULO I

EL PROBLEMA 

Planteamiento del problema

Los problemas ambientales que actualmente repercuten negativamente sobre el hombre y ponen en peligro la vida del planeta, son el resultado, en parte, del modo en que la sociedad se ha organizado, al uso imprudente de la tecnología para explotar los recursos de la tierra y al manejo de producción, distribución y consumo de bienes y servicios. Villamizar (2006) indica que esta relación de dependencia permite considerar que la crisis actual no tiene raíces ecológicas. Por el contrario tiene origen social.

        Según Antillano (2002), la sociedad urbana genera una enorme cantidad de residuos que inciden negativamente en los procesos ecológicos y sociales. Cada vez se emiten más contaminantes a la atmosfera y se vierten mayores cantidades de sustancias tóxicas en el océano.

        De acuerdo a Briceño (1993), residuos sólidos, es el término técnico para lo que usualmente se llama basura. La generación de residuos sólidos se inicia en el momento que surgen los primeros asentamientos humanos. Al principio, estos consistían principalmente en restos orgánicos no aprovechables, que por sus cantidades y características eran descompuestos por el ambiente y absorbidos  por el ambiente. Saint (1994) expone que a medida que los centros urbanos crecieron y las fabricas incrementaron los bienes de consumo, los residuos se convirtieron en un problema ambiental y de salud pública, debido a la contaminación que ocasiona.

        Según Erickson (2005) los estadounidenses producen 185 millones de toneladas de basura, que equivale a 1,7 kilos aproximadamente de residuos por persona/día. El mismo autor expone que, en España se producen 8 millones de toneladas de basura por año. En Japón, se producen 40 millones de toneladas anuales, el equivalente de 0,8 kilos de basura por persona/día. Sin embargo, el total de basura generado en el planeta se desconoce. Desafortunadamente, la basura seguirá creciendo en las próximas décadas.

        En Venezuela, se estima que en promedio, se están generando 1,2 kilos por personas/día, produciéndose aproximadamente 158.300 toneladas de desperdicios por día. Las consideraciones anteriores evidencian que es necesario desarrollar, con urgencia, procesos para el manejo integral de residuos.

Al respecto, Boada (2003), sostiene que el reciclaje ofrece grandes ventajas o al menos una salida, para reducir y valorizar los residuos sólidos. Explica Ramírez (2016) que hoy día, los líderes en reciclaje en el mundo son Suiza, Austria, Holanda y Noruega en ese orden, en Sudamérica están Brasil, que es el tercer mayor reciclador de latas de aluminio en el mundo y, Chile, que se destaca por su alto nivel de reciclaje de acero y papel, pero industrias como plásticos y aguas, están lejos de llegar a niveles máximos de desarrollo.

Es importante señalar que el ciudadano común puede llevar a cabo acciones que tiendan a disminuir la basura y residuos que genera y lo puede lograr, si se toma en cuenta que el 80% de las 158.300 toneladas de dichos desperdicios son aprovechables, esto significa que muchos objetos que se consideran desechos pueden  reciclarse o rehusarse.

Así pues, la acción de reciclar puede salvar grandes cantidades de recursos naturales no renovables, sobre todo cuando en los procesos de producción se utilizan materiales reciclados. Un estudio de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos – US EPA – (2014) concluye que el reciclaje es siempre benéfico, de acuerdo con parámetros de energía y carbono que son ahorrados. Los recursos no renovables, como el agua, también pueden ser salvados, mediante la instalación de plantas purificadoras de agua que es desechada en procesos primarios.

Según Mora (2011) en Venezuela aunque existen varias compañías de reciclaje para impartir la actividad haciendo grandes esfuerzos y, muchas otras que están adoptando políticas de reciclaje y conservación de espacios, solamente alrededor de 19.000 toneladas de residuos que se producen diariamente, pudieran estarse reciclando lo que se traduce entre el 10% y 20% de la cantidad total, algo que sin duda vendría siendo un problema para la sociedad.

        De acuerdo con las estadísticas que maneja VITALIS, en Venezuela de esas 19.000 toneladas de residuos, se recicla alrededor del 95% del aluminio, 90% de hierro, 25% de vidrio, 1% de materia orgánica, 20% de papel y cartón, y alrededor del 2% en plásticos. Sin embargo, en función del volumen total de residuos, menos de la quinta parte pudieran estar recibiendo un tratamiento final apropiado.

Según Sánchez y la empresa VITALIS (2010) un buen proceso de reciclaje es capaz de generar ingresos; no obstante, la capacidad para reciclar en el país pudiera duplicarse o triplicarse en el caso del papel, los plásticos y el vidrio, en tanto que el aprovechamiento de los residuos orgánicos pudiera incrementarse hasta un 1000%. Tomando en cuenta que alrededor del 80% de los residuos domésticos e industriales pudieran ser reciclados, no sólo resolveríamos el primer problema ambiental del país que es la basura, sino hasta se pudiera generar alrededor de 250 mil empleos directos y más de 1 millón indirectos en un año, ya que se necesita una gran fuerza laboral para recolectar los materiales aptos para el reciclaje y para su clasificación.  

        Ferreira (2006) expone que desafortunadamente en Venezuela, debido a la no existencia de una cultura del reciclaje, los residuos sólidos en general son tratados como basura con escaso valor económico, por lo cual su disposición final se realiza en vertederos al aire libre y rellenos sanitarios. Debido a los altos volúmenes de desechos producidos en las grandes ciudades y a la deficiencia en los procesos de recolección, clasificación y disposición final, la mayoría de los rellenos sanitarios representan un problema en lugar de una solución, y algunos de ellos han colapsado.

En este orden de ideas, Castillo (2007), plantea que aunque el reciclaje representa un proceso emergente en países desarrollados, es desconocido para la mayor parte de la población venezolana, por lo que se hace necesario crear una plataforma para promover su conocimiento y práctica cotidiana, como una actividad que pueda ayudar a mitigar el problema de la basura, disminuyendo el deterioro ambiental y proporcionando al mismo tiempo, beneficios económicos para la ciudadanía en general.

Es importante resaltar que ya existen algunas iniciativas de reciclaje, tales como las que llevan a cabo Resolquim C.A., empresa recuperadora de solventes y químicos no biodegradables ubicada en el municipio Los Guayos del Estado Carabobo, la compañía Resimplast que se ocupa de la recolección y reciclaje de envases plásticos PET (Tereftalato de polietileno, mejor conocido por sus siglas en inglés “PET”, polyethylene terephtalate) en el Municipio Libertador del Estado Carabobo, sector La Guásima junto al vertedero de basura.

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De igual forma, la iniciativa de reciclar no sólo ha sido de la empresa privada sino que también las Alcaldías han venido propiciando el diálogo entre sectores que hacen vida en las comunidades en su ámbito territorial, para promoverla como herramienta de mejoramiento de la calidad de vida. Noticias24 Carabobo (2014) informó, que la Alcaldía del Municipio Valencia en fecha 19 Marzo del año 2014, dictó el primer curso facilitado por el experto internacional en reciclaje y directivo de la  Cámara de Pequeños, Medianos Industriales y Artesanos del estado Carabobo (CAPEMIAC) Oscar García, dirigido a docentes y asistentes administrativos de las escuelas de la Fundación para el Desarrollo Educativo de Valencia, para poner en marcha el proyecto emprendido por el alcalde Miguel Cocchiola, en pro de generar alianzas estratégicas entre el sector privado productivo y la institucionalidad del sector público con el propósito de crear una cultura de cuidar y preservar el medio ambiente.

La página web de la Alcaldía de Naguanagua publicó en Mayo de 2013, bajo el lema, “desde Naguanagua: yo reciclo, tú reciclas, nosotros reciclamos. ¡Juntos por un ambiente sano!”, la iniciativa del alcalde Alejandro Feo La Cruz, quien anunció en compañía de María Isabel Rosillon, Presidenta del Instituto Municipal para el Aseo Urbano y Peggy Márquez, representante de la empresa Inversiones y Servicios CT, C.A y a través de una rueda de prensa, la incorporación de este programa a su gestión que iniciará con el reciclaje de envases plásticos PET; ubicando en todas sus oficinas basureros bien identificados con este fin, sumándose a este esfuerzo condominios residenciales y de centros comerciales del municipio.

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