El Derecho A La Salud ¿un Realidad Viable Para Los Colombianos En El Futuro Próximo?

El sistema a de salud en Colombia es un tema delicado e importante en la sociedad de hoy en dia. Antes de la ley 100, la gran mayoría de ciudadanos colombianos no tenían acceso a la seguridad en salud, y por esto mismo fue que se formulo esta reforma de la ley 100. Comenzó por ser algo bueno, algo que iba a ser positivo y estimulante para los ciudadanos Colombianos, sin embargo, esta se convirtió en un negocio, en donde las EPS se terminaban por robar el dinero de los pocos contribuyentes colombianos. Como podemos ver: ‘El Sistema de Salud Colombiano, de la misma forma que la educación, o el sistema de pensiones, sufre como en otros países Latinoamericanos las consecuencias de las políticas de ajuste macroeconómico preconizadas por el Fondo Monetario Internacional (FMI). Estas políticas se caracterizan por la implantación del Modelo económico neoliberal a escala mundial: apertura sin limitaciones de los mercados nacionales a las importaciones; privatización de las empresas estatales; subida de impuestos; recorte del gasto público con eliminación de las coberturas sociales y despidos masivos de personal. Estas políticas provocan que los sistemas

de salud, educación, pensiones o desempleo sufran en el mejor de los casos una considerable reducción en sus prestaciones, y en muchos casos simplemente el desmantelamiento del sistema .’ Y esto fue exactamente lo que paso, debido a los robos por parte de las EPS, a las tutelas, a la inclaridad de la ley 100, y la falta de supervisión por parte del Estado.

El régimen contributivo, el cual consiste en los estratos 3, 4, 5 y 6, es mucho más pequeños que el régimen subsidiado, el que consiste de estratos 1 y 2. El problema es que debido a que es más pequeño el régimen contributivo al subsidiado, el sistema de salud que propone la ley 100 dice que el contributivo debe sostener el subsidiado, y esto no es viable financieramente. Los pocos colombianos que pertenecemos al régimen contributivo no podemos sostener la salud de los 40 millones de Colombianos que residimos en este país. Esto es un problema y hasta que se revise esta ley y se cambien estos parámetros, no vamos a tener un buen sistema de salud para todos los Colombianos. ‘Afirmar que la participación del sector privado en los servicios siempre resulta en una mala gestión o en la exclusión social es, por cierto, una exageración. Pero no lo es el argumento de que este enfoque no suele cumplir con los beneficios prometidos y perjudica a los pobres. No obstante, a pesar de resultados inquietantes en los servicios que más importan en la vida de la gente, las políticas que fomentan la prestación privada están adquiriendo impulso, en lugar de generar circunspección. (…)Pero al exigir la privatización y la comercialización de estos servicios, países poderosos e instituciones internacionales facilitan que los gobiernos descuiden sus obligaciones más básicas y eviten difíciles opciones políticas necesarias para cumplirlas. Si los ciudadanos deben hurgar más profundamente en sus bolsillos para pagar el agua y los servicios médicos, el gobierno puede gastar los recursos públicos en otros ámbitos, aunque los pobres no salgan beneficiados. Asimismo, cuando los servicios sólo están disponibles a cambio de “dinero en efectivo”, los dirigentes políticos no sienten la necesidad de imponer un régimen impositivo progresista ni medidas de subsidios cruzados que podrían irritar a grupos influyentes. 

Otra razón para la generalización de la privatización de los servicios es que, en muchos casos, los servicios públicos tienen pésimos resultados o excluyen a los pobres. ’

Aparte de todos los problemas financieros que tiene el sistema de salud, está la problemática del POS y de los parámetros sobre que cubre cada plan de salud. Esto no está claro, y por ende lleva a las millones de tutelas que ha recibido el estado colombiano ya que

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