Emile Durkheim

Emile Durkheim, reconocido sociólogo francés del siglo XIX, es considerado uno de los fundadores de la sociología moderna. Sus contribuciones teóricas y metodológicas han tenido un impacto duradero en el campo de las ciencias sociales.

Durkheim tenía dos grandes preocupaciones, la primera, era diferenciar la sociología de la filosofía y la psicología. Para esto, Durkheim afirmaba que la sociología debía ser el estudio de hechos sociales, las cuales tenían que tratarse como `cosas, ya que, de esa manera los hechos sociales podrían estudiarse de manera empírica; y para distinguir específicamente la sociología de la psicología, Durkheim afirmó que los hechos sociales eran externos y coercitivos para el actor, al contrario de la psicología que eran hechos internos.

Desde el funcionalismo y la solidaridad social, Durkheim propuso que la sociedad es un organismo compuesto por diferentes partes interdependientes que cumplen funciones especificas para el bienestar social. En su obra “la división del trabajo” (1893) argumentó que la solidaridad social se basa en dos tipos: Solidaridad mecánica y solidaridad orgánica.

La división del trabajo era un hecho social material. Durkheim postulaba que existían dos tipos de sociedades, una de ellas del tipo más primitivo de sociedad, caracterizado por la solidaridad mecánica, la cual, no presenta ninguna división del trabajo, se mantiene unida por el hecho de que todos los miembros poseen funciones y conocimientos muy similares, además de que la caracteriza su derecho represivo, se entiende que como las personas son muy similares, tienen una moral también muy similar, por lo tanto, cuando alguien quebranta esa moralidad, es duramente castigado. En cambio, las sociedades más modernas se caracterizan por la solidaridad orgánica la cual posee una mayor división del trabajo, lo que la mantiene unificada por la necesidad de servicios de otros miembros. También la caracteriza su derecho restitutivo, lo que significa que cuando un miembro de la sociedad quebranta la moral, se le pide que cumpla con la ley, lo que representa una sanción, pero no severa. Otro hecho social material es la densidad mecánica, definida como la transición de la solidaridad mecánica a la solidaridad orgánica.

Un ejemplo de hecho social inmaterial son las corrientes sociales, Durkheim las utilizó como una variable explicativa de un estudio empírico, el suicidio. Eligió este tema ya que, si su estudio de este fenómeno convencía a la comunidad intelectual, lograría que la sociología fuese reconocida en el mundo académico. Su principal propósito era explicar las diferentes tasas de suicidio, descartó muchas posibles causas, como la raza, la teoría de la imitación, etc. Finalmente llegó a la conclusión de que estas diferencias se debían a los cambios en los hechos sociales, principalmente las corrientes sociales. Para Durkheim existían 4 tipos de suicidios:

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