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Ensayo Crisis Y Salida De Crisis


Enviado por   •  26 de Octubre de 2014  •  790 Palabras (4 Páginas)  •  198 Visitas

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Crisis y salida de la crisis

Este libro nos ayuda a entender lo que ocurrió en el pasado con la crisis económica y así mismo nos ayuda a darnos cuenta de cómo se encuentra la crisis financiera actual.

Gérard Duménil y Lévil Dominique analizan la situación económica del mundo con el propósito de identificar las causas y consecuencias que provocaron la crisis de los años 70.

El libro está estructurado en diversas partes en las que nos habla de la introducción del análisis que se realizará y se comparará la crisis que ocurrió en los años 70 con crisis anteriores, así mismo se hablará sobre las diferencias que se produjeron en la recuperación económica en la crisis de los 70 en Europa y Estados Unidos, en la tercera parte del libro se menciona la ley de las finanzas y el núcleo fundamental de la disertación y en parte final nos relatan la comparación ente la crisis de los años 70 y la de finales del siglo XIX.

Crisis y neoliberalismo nos menciona el avance y así mismo la retracción que ocurre en los países. Los autores tienes cuestionamientos principales que son: ¿Qué problemas originaron el cambio en la década de los 70? ¿La respuesta fue una caída en los ingresos de los poseedores del capital ubicados principalmente en los países capitalistas más avanzados? Y por último pero no menos importante ¿ Cuál es las naturaleza de ese centro?. Los componentes principales son la liberalización de los intercambios y movimientos de capital.

La conclusión más general tiene mucho que ver con el problema de la pobreza y de las desigualdades. Se trata de algo trivial: si la amplitud de la miseria no provocó ninguna de las reacciones que ingenuamente se habrían podido esperar, es porque las transformaciones económicas y sociales de las últimas décadas no fueron motivadas y dirigidas por los intereses de las grandes masas sino por los de minorías privilegiadas que, en efecto, mejoraron su situación.

Sería errado, quedarse ante la complejidad de los determinantes del cambio. La economía no está gobernada por fatalidades comparables a la acción de los elementos naturales: está hecha por los hombres. Sería erróneo subestimar el conjunto de constricciones en cuyo seno maniobran y que en cierta medida escapan a su poder de decisión, pero las acciones colectivas responden, a su manera, a motivaciones.

En la segunda parte del libro los autores revisan la crisis que se presentó en los años setenta y ochenta, en las cuales se pudo reflejar que la característica más importante fue el incremento del desempleo, así mismo se vincula la crisis y el desempleo. Relación causa-efecto que existía era precisa ya que la ola de desocupación que existía era la causa principal ente 1975 y 1985 fue la debilidad de inversión y la insuficiencia de la acumulación de capital.

Una idea central de este libro es que esa dinámica histórica sigue permaneciendo en marcha. Los mecanismos que presidieron la transformación del capitalismo desde su nacimiento; siempre activos a fines del siglo XIX y en el curso de la primera mitad del XX, gobernaron igualmente la dinámica del capitalismo durante las últimas décadas del siglo pasado. La problemática general, el marco analítico, deben seguir siendo iguales: la crisis que inició en los años 1970 estableció, una vez más, las condiciones para grandes transformaciones; nos introdujo gradualmente en un nuevo orden social; relaciones de producción y estructuras de clase estaban en juego.

El razonamiento que convierte a la aceleración del progreso técnico en responsable del desempleo es simple: la mecanización torna superflua la mano de obra y entonces se prescinde de los trabajadores. Este análisis, que se une a otras preocupaciones, sobre todo ambientales, se integra bien en un cuestionamiento general del progreso: sería una de sus consecuencias dañosas.

Las empresas no financieras son deudoras y acreedoras. Ellas pueden solicitar préstamo a sus bancos y en ese mismo tiempo, éstas pueden dan créditos a sus clientes, obtener bonos del Tesoro, en conclusión prestarle al Estado., por ende se pagará interés por lo solicitado pero también se recibirá por lo entregado a sus clientes.

La crisis actual es una crisis financiera del sistema capitalista, por ello el sistema y sus amenazas no están en desequilibrios macroeconómicos, sino en que intrínsecamente promueve la libre movilidad de capitales.

Aunque para los autores no hay capitalismo sin movibilidad del capital, ya que ésta maximiza las ganancias que es el objetivo primordial del sistema capitalista, es decir que el capitalismo ésta engendrando su propia destrucción.

Finalmente los autores reflexionan y contestan acerca de otras crisis que pueden llegar y si éstas ocurrirán frecuentemente, han llegado a la conclusión de las condiciones que podrían provocar una nueva gran crisis, pero hay que distinguir la necesidad de un ajuste, de su carácter catastrófico.

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