Golpes de estado y la crisis actual de Argentina

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En agradecimiento a nuestros docentes Néstor Egea y Lucía Torres por su ayuda y colaboración en nuestro trabajo de investigación.

Sin libertad, la democracia es despotismo, sin democracia la libertad es una quimera.

• Octavio Paz

INTRODUCCION

Actualmente los argentinos estamos transcurriendo por un momento histórico muy complejo desde lo político, económico y social. Malas decisiones de las autoridades del gobierno actual, combinado con hechos de corrupción en el pasado, llevaron a que hoy las personas debamos atravesar una profunda crisis a la cual no se encuentra una solución viable. Ésta situación, junto a  diversos comentarios de los mismos argentinos, nos despierta intriga a cerca del manejo y los fundamentos que en diversos momentos de nuestra historia las fuerzas militares aplicaron para interrumpir momentos difíciles de la democracia.

Luego de realizar una revisión de la historia política de nuestro país y de realizar comparaciones con la actualidad, nuestro objetivo es analizar a la afirmación que en estos momentos de inestabilidad se encuentra oscilando en el día a día: “que vuelvan los militares”.  

Con este fin, la pregunta de nuestra investigación es la siguiente: ¿Hasta qué punto es preferible aquel momento de nuestra historia con respecto a la crisis actual? O si simplemente ésta afirmación es consecuencia de un impulso desesperante de los argentinos al ver que ningún gobierno democrático encuentra soluciones y la única manera de sobrepasar esta etapa es empezar nuevamente de cero.

Con éste planteo, nosotros pretendemos investigar y nutrirnos no tan solo desde la historia argentina en sí, sino también de información sobre los métodos políticos de los gobiernos militares y de opiniones con diferentes miradas a cerca de ésta pregunta para luego tener las herramientas necesarias para establecer una mirada propia y subjetiva que pueda aportar a la causa.

INDICE

Capítulo I………………………………… Página 5

Capítulo II………………………………… Página 8

Capítulo III………………………………… Página 11

Conclusiones……………………………… Página 15

Bibliografía………………………………… Página 18

Capítulo I Crisis Actual

El desmoronamiento de la economía y su impacto social

Hoy, en la Argentina nos encontramos ante una gran crisis económica con gran impacto social y financiero, afectando tanto el rumbo de las empresas como la calidad de vida de los ciudadanos.

 Esta crisis se desencadeno principalmente ante las malas políticas aplicadas por un gobierno que en el inicio de su mandato garantizó un cambio y prosperidad en la región, pero al asumir se encontró ante un panorama completamente diferente y ante resultados para nada satisfactorios.

Ante este complicado período financiero que tiene como consecuencia la fuerte devaluación del peso y en efecto el incremento de la inflación y el dólar, la pobreza llega a amplios sectores de la sociedad, generando gran descontento en la población que se moviliza en protestas en las calles con una alta carga de conflictividad social contra los despidos masivos, la pérdida del poder adquisitivo y el desfinanciamiento de sectores estratégicos como la ciencia y la educación. Es así como el ajuste y el déficit cero son dos conceptos que generan escalofríos a los argentinos. Recuerdan a grandes crisis económicas, como la que en 2001 que generó grandes revuelos tanto económicos como sociales. En aquella crisis, la economía estaba ajustada por un tipo de cambio fijo, la convertibilidad ideada por el ministro Domingo Cavallo en los años 90. Ahora, la dificultad para ajustar es política; con movilizaciones multitudinarias y graves disturbios en rechazo a la rebaja de las pensiones y del gasto público.

A su vez, una inflación que no logra ser dominada por el Gobierno, condiciones laborales frágiles y niveles de endeudamiento familiar elevados dan lugar a un agravamiento de la grieta social que presenta la Argentina desde hace ya muchísimos años. Adherido a esto, durante los dos últimos años y medio de gobierno, esta brecha se intensificó de manera escalofriante, siendo los pobres más pobres aún, la clase media prácticamente desapareciendo y los ricos ganando cada vez más dinero. Esto claramente fue producto de políticas de gobierno dirigidas para el beneficio de la clase más adinerada

“En lo que va de su mandato, el gobierno de la alianza Cambiemos desfinanció al Estado para debilitarlo y ahora reformarlo, lo sobreendeudó para encubrir nuevas fugas de divisas millonarias,  produjo desocupación para disciplinar a los trabajadores agremiados y propició una crisis generalizada de consumo que lleva a gobernadores e intendentes a solicitar, sin éxito,  la declaración de la emergencia alimentaria en todo el país”. Explica Adriana Clemente - Directora del CEC Sociales, UBA.

Esto lleva consigo una pérdida de legitimidad hacia un gobierno que muchos votaron con la esperanza de terminar con la corrupción y con la malversación de fondos, llevando a los ciudadanos a pensar que la solución a las numerosas crisis por las cuales el país ha atravesado está todavía muy lejos de nuestro alcance.

Y si bien todavía no podemos hablar definitivamente de una crisis social, el estallido está muy cerca, el fastidio de la población se acrecienta cada vez más a medida que el Gobierno sigue realizando cambios para reducir los gastos públicos. Pero esto forma parte una vez más de las numerosas crisis cíclicas características del país, en donde a pesar de los numerosos gobiernos que han pasado y de los numerosos cambios que propusieron, la estructura productiva no ha cambiado en las últimas décadas e incluso se ha profundizado, generando una necesidad continua y perpetua de dólares que cuando no pueden ser obtenidos por exportaciones, inversión extranjera directa o deuda, se vuelve a entrar en crisis.

Este ciclo tan agobiante que atormenta a Argentina desde hace varias década solo podrá ser superado con mayor participación política de los ciudadanos, con políticos aptos para la tarea de cambiar a un país completamente desde la raíz e interponer las necesidades del pueblo ante las propias; erradicando el terror que la población ha adquirido a consecuencia de los numerosos gobiernos y dictaduras nefastas que atravesaron a lo largo de la historia argentina.

Este, sin embargo, no es un proceso que se puede dar de un día a otro, es una transformación que llevara mucho tiempo y trabajo. Pero estemos seguros que el camino de la democracia es el correcto, un pueblo unido jamás puede ser vencido; no cometamos los mismos errores del pasado y no dejemos que nuestra libertad sea arrebatada de nuestras manos habiendo sido tan difícil conseguirla. Esperemos que estas nuevas generaciones que se aproximan tengan en sus manos las soluciones para volver a ser el país al que toda Latinoamérica aspiraba ser y volvamos a estar en lo más alto junto a las grandes potencias.

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