LA PROSTITUCION INFANTIL: REALIDAD SOCIAL QUE SE HA VUELTO UN MODO DE VIDA

LA PROSTITUCION INFANTIL: REALIDAD SOCIAL QUE SE HA VUELTO UN MODO DE VIDA

La prostitución es considerada como el oficio más antiguo del mundo, viene del latín “prostituere” que significa cambiar o traficar. Anteriormente, la mayoría de los casos presentados se daban de forma involuntaria, a la fuerza o por medio de engaños. En contraste, hoy se ha vuelto tan común que a pesar del desarrollo humano es vista de otro modo y considerada como una opción de vida.

Desde esta perspectiva los menores buscan obtener dinero rápido y fácil, cada año según datos de UNICEF, un millón de chicos en todo el mundo, fundamentalmente niñas ingresan en el mercado de la prostitución infantil. Los números y casos se multiplican apoyados en el eco de los medios de comunicación, la vanidad y una sociedad más abierta pues, en su mayoría los infantes se prostituyen no por ser miembros de la pobreza agobiante sino como miembros de clase media que desean aumentar sus ingresos a toda costa. Su salud mental es tan baja que solo busca comodidad y facilidad pero, en palabras de Ortega José (1929), sólo cabe progresar cuando se piensa en grande, sólo es posible avanzar cuando se mira lejos. Entonces, según nuestra cruda realidad ¿Vamos por camino correcto hacia en progreso?

El exhibicionismo por popularidad es otra causa principal de la prostitución voluntaria actual. La costumbre, ingenuidad e inocencia infantil se perdió con el paso del tiempo incluso, hoy en día ver a una niña con poca ropa en la calle es tan normal, que ya no sorprende. Otro ejemplo de corroboración son las redes sociales pues, es allí donde abundan infinidad de fotografías de menores que se exhiben y se promocionan libremente, con fines populares y sin ninguna vergüenza, en estos tiempos ya nada es alarmante.

Las ansias de colaboración económica familiar de los niños también forman parte de esta realidad social. Tras el afán, la necesidad económica y la falta de oportunidades sólo encuentran como opción este oficio pues, resulta bastante difícil conseguir un trabajo decente debido a su minoría de edad. En un informe del diario el Espectador, según un estudio del estatal Departamento Nacional de Estadística (DANE) la tasa de trabajo infantil pasó del 6,9% al 9,2%, lo que implicó que 263.847 menores de edad se incorporaran en condiciones irregulares al mundo laboral colombiano. Según este organismo los niños y niñas argumentan que trabajan porque deben aportar a la actividad económica de la familia y otros confirman hacerlo para tener su propio dinero.

En conclusión, la prostitución infantil voluntaria es catalogada con tanta naturalidad que ya no es alarmante, este fenómeno es una espina que golpea y degrada a la humanidad, sin embargo, es una realidad que no se quiere ver. Se debe actuar por una sociedad pacifica y con igualdad, por

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