LAS GUERRAS RELIGIOSAS

Las Guerras Religiosas

Antes de entrar en materia, debemos conocer lo que es la "separación Estado-Iglesia, que es el concepto legal y político por el cual las instituciones del Estado y religiosas se mantienen separadas, y la Iglesia no interviene en asuntos, decisiones ni cuestiones de gobierno. Es una de las causas que causaron el surgimiento de un Estado laico.

La separación Estado-Iglesia está también entrelazada con la extensión de la libertad de elección de culto a todos los ciudadanos y ciudadanas, y se desarrolla, a partir de este derecho, una nueva y diferente relación entre el Estado y la Iglesia, pero hasta aquí desarrollamos este concepto.

Como es de esperar, este concepto tuvo orígenes y consecuencias. Podemos citar, por ejemplo, la llamada "Guerra de los campesinos alemanes", también conocida como "la revolución del hombre común". Esta guerra fue una revuelta popular en el Sacro Imperio Romano Germánico de los años 1524 y 1525. Consistió en una serie de revueltas tanto económicas como religiosas por parte de campesinos, ciudadanos y nobles. Si buscamos las causas económicas generadoras de este hecho, caeríamos, casi directamente, en las causas religiosas. Por ejemplo: en los años anteriores a este hecho, el sistema gubernamental requería el pago de un impuesto llamado "diezmo" por parte de sus ciudadanos. Este diezmo era utilizado (en principio) para cumplir con los pedidos que la Iglesia imponía a las coronas que formaban parte de ella en toda Europa, alegando que era necesario para mantener sus pilares lo suficientemente fuertes y estables, y con el fin de que "aguantara los tiempos venideros".

Este conflicto, que fue más impactante en el centro, el sur y el oeste de Alemania (pero que no dejó marginadas a Austria y a Suiza, pues también les afectó en algunas zonas) tuvo, entre el verano de 1524 y la primavera de 1525, un total estimado de trescientos mil campesinos insurgentes, y dejó un saldo de ciento treinta mil víctimas entre los rebelados. La revuelta popular fue la más masiva y generalizada en Europa hasta la Revolución francesa de 1789, y fue movida por el descontento de los campesinos frente a los impuestos propuestos por el Imperio, entre los cuales se encontraba el que requería la Iglesia, el diezmo.

Lo que se intenta dejar claro con este ejemplo es que no solo se dan las Guerras Religiosas entre dos o más naciones, sino que también hubo otras que se generaron dentro de los mismos reinos e imperios.

Otro claro ejemplo de enfrentamiento religioso en Europa es la matanza o masacre de San Bartolomé, que fue el asesinato masivo de hugonotes (nombre dado a los protestantes franceses que formaban parte de la doctrina calvinista) entre el 23 y el 24 de agosto del año 1572, en París, Francia. Este acto de violencia se extendió por todo el territorio francés durante meses. Una de las razones del desencadenamiento de esta matanza fue

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