La modernidad líquida de Bauman, a través de Javier Mateo Girón

La modernidad líquida de Bauman, a través de Javier Mateo Girón

Girón se cuestiona en qué implica la modernidad líquida en contraposición con la sólida. Citando a Bauman, Girón explica que la modernidad sólida tenía como prioridad preocuparse por mantener un orden, en donde existía un capitalismo pesado, de producción industrial y desarrollista que, en cierto modo, esclavizaba por medio de contratos y ya no por medio de cadenas. (Girón: 2008)

Frente a ello, el autor explica que en la actualidad existe una realidad distinta que requiere ser analizada y criticada bajo un nuevo sistema teórico del conocimiento. Girón explica cómo Bauman estructura la Modernidad Líquida en base a la “licuefacción” o “desolidificación” de la emancipación, la individualidad, el espacio/tiempo, el trabajo, la comunidad y el miedo. En otras palabras, su descripción de la modernidad líquida se basa en la desregulación y privatización de todo vínculo social, donde las clases sociales permanecen, pero que, a su vez, pueden tener acceso a distintos tipos de capitales. Con esto, el autor se refiere a un poder escapista, que se caracteriza por su constante cambio, pero que se rige por una jerarquía global encabezada o dirigida por una élite nómada, políglota, que tiene fácil acceso al “mundo globalizado”. Además, agrega el autor, que el trabajo se vuelve inestable y transitorio, donde cualquier valor pasa a ser producto de consumo con el fin de recibir un placer inmediato. Del mismo modo, esta modernidad vuelve liquida las relaciones o lazos más cercanos entre personas, las vuelve inconsecuentes y efímeras. Se rinde culto al cuerpo, al punto de priorizar la protección del mismo, protegiéndolo de enfermedades o cualquier peligro externo y, también la apariencia basada en el bienestar. (Girón: 2008)

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