Memorias De Mis Tiempos

Memorias de mis tiempos

Como lo llegamos a ver en el libro El gallo pitagórico de Juan Bautista Morales, el principal cargo en nuestro país, en ese periodo, lo tenía Santa Anna. Esta vez toca el turno a Guillermo Prieto; transcurría el siglo XIX, periodo en el que José Antonio López de Santa Anna era el actual presidente. El periodo que narra en Memorias de mis tiempos, Guillermo Prieto, no es muy lago, es de 1828 a 1840. Habiendo nacido en 1818, éste pasó su infancia en el Molino del Rey, con esa inocencia que lo caracterizaba, en donde había una panadería que dirigía su padre, que al morir en 1831, por consecuencia, su madre perdió el juicio y Prieto siendo un niño quedó indefenso y al servicio de una tienda de ropa, se puede decir entonces que en este tiempo estuvo presente la muerte, la locura y, por consiguiente, la mendicidad. Años después, bajo la protección y tutela de Andrés Quintana Roo, Prieto ingresó a la Academia de San Juan de Letrán auxiliado por Manuel Pedraza y años más tarde fue cuando publicó sus primeros poemas (dentro de los aspectos que considero de los más relevantes).

Guillermo Prieto, para comenzar con esta autobiografía, regresa a su infancia mostrándola de una manera en que te va atrapando con cada relato e incluso con las travesuras que va contando, realizaba, en su escuela. De igual forma el texto te invita a formar parte de sus vivencias cuando era un niño, un ejemplo es cuando escuchaba las lecciones de teología que le contaba su tía Juanita, a quien menciona en diversas partes del texto.

Es intrigante darse cuenta de lo difícil que le fue adaptarse al lugar donde vivía, con aquellas señoras, ya que menciona no era bueno para ninguna profesión porque se mostraba un tanto torpe para realizar diversas actividades y es de esta forma como va relatando sus primeros pasos junto con la poesía, esto por los senderos de la Alameda, del cómo practicaba sus versos por todas partes al mismo tiempo en que se iba convenciendo de lo difícil que le era realizar otra labor.

Cuenta además de la relación tan estrecha que mantuvo con su amigo el barbero Melesio quien además de darle diversos consejos, se vio realmente influenciado para tener ese encuentro con Quinta Roo que tuvo una importante relación y también influencia en su vida. Como también lo tuvo al encontrarse con diversos personajes en la Academia de Letrán porque continúo con sus estudios literarios, por lo tanto, esta academia se ocupaba de emancipar la literatura mexicana de cualquier otra con ese carácter peculiar que la caracterizaba.

El libro, a pesar de mencionar muchos datos, fechas, lugares y nombres de personajes relevantes en esa época, me pareció muy interesante y acertado por el hecho de hablar de la época en que estamos situados en la clase. Hubo una parte en especial, en el capítulo I, donde menciona al doctor Mora y su “Semanario Político” y va haciendo que recuerdes lo visto en clase y al mismo tiempo relacionarlo con lo vivido a través de los escritos de Guillermo Prieto. Es interesante darse cuenta de la cantidad de sucesos que vivió, uno de los que me pareció relevante, es cuando a pesar de ser un joven logró burlar a los militares que vigilaban el Palacio Nacional para poder llegar a la oficina de Quintana Roo quien lo tomó bajo su tutela y fue entonces cuando su historia comienza a dar un giro, y por supuesto a cambiar hacia un rumbo diferente.

La lectura en diversas partes es muy amena, porque sólo relata el cómo es que vivía este autor, lo que fue haciendo, con quienes se relacionaba, a quienes iba conociendo y cómo era entonces, en el periodo en que Santa Anna fue presidente. Otro de los aspectos que me parece importante rescatar del texto, es el hecho de darle peso a lo que fue la literatita mexicana en la academia de Letrán y de la importancia que tuvo y tiene la emancipación de ésta porque como lo menciona en

...