Prejuicios

“Los Prejuicios”

Buenos días profesor Julio Troncoso, miembros de la directiva, amigos y compañeros presentes.

A diario suelo preguntarme ¿Por qué los prejuicios mueven nuestra vida? , ¿Para que? y ¿Con qué fin? , día a día podemos notar como los prejuicios son parte de nuestras vidas, pensamientos y actos, describiéndolo como opinión infundada, ya que se trata de una primera impresión muy insuficiente, por lo que consiste en establecer conclusiones antes de poseer un conocimiento fundado del asunto que se juzga.

Cuando caminas por las calles de tu ciudad o simplemente en tu barrio, podemos llegar a percibir lo inevitable del ambiente, algo que lo hace común en todos los lugares en que te sitúes, el mágico enigma de la sociedad, la imperfección perfecta, la diversidad. Sin darte cuenta navegas por rincones donde la diferencia es lo habitual, sin percatarnos, somos uno más dentro de esta continua armonía de la desigualdad y a pesar de eso buscamos de alguna forma encontrar su punto de convergencia, eso que nos hace únicos y nos permite distinguirnos unos de otros. A esto, la identidad, la imagen formada sobre una persona, es lo que llamamos estereotipos, los cuales son modelos que representan a los tipos de humanos, que estandarizamos por sus rasgos característicos originales de los diferentes grupos de personas. Lo que representa a un estereotipo es la visión reductora de la humanidad, dado que nace de una percepción vaga sin mayor profundización que la del prejuicio y que a su vez promueve la tolerancia y la discriminación.

En nuestra sociedad hay gran diversidad de estereotipos en los que encontramos a los sexistas en los que se les asignan roles sociales y pautas de belleza, sostienen ideas machistas o feministas, también están los étnicos que conceden mayor valor a un grupo determinado, promueven la xenofobia y el racismo, por otra parte encontramos a los sociales que presentan jerarquías con grupos de mayor prestigio que otros, asociados a virtudes morales, intelectuales y culturales. Al darnos cuenta la gran variedad de estereotipos que hay en la sociedad podemos notar con claridad a causa de que surgen nuestros prejuicios y es por esto que me pregunto ¿Como nacen nuestros prejuicios? Es simple, estos nacen porque tendemos a rechazar lo que no es semejante a nosotros, quizás porque nos cerramos a lo desconocido, descartando cualquier tipo de estereotipo que refute con nuestra postura. Estos sentimientos se van forjando desde la niñez por la educación que nos han dado, el ambiente y con el tiempo es confirmado con nuestras acciones, muchas veces el problema esta en que las personas suelen inhibir sus actitudes, quedándose con un pensamiento soberbio, sin poder ser suprimido y es por esta razón que surge la siguiente interrogante ¿Cómo romper con nuestros prejuicios? La mejor manera de modificarlo es teniendo tolerancia con lo que no toleramos y educando con el ejemplo a los niños, ya que muchas veces sin darnos cuenta avalamos actitudes discriminatorias, estos actos tienen consecuencias en si mismas permitiendo que los prejuicios sean una pauta habitual en nuestras vidas. Hay que educar a la gente permitiéndoles expresarse contra estos hábitos sutiles que alimentan al prejuicio y la intolerancia, criticándolos en el momento en que son expuestos.

Es por esto que como personas debemos reforzar nuestras virtudes y aprender de nuestros defectos, enfocándonos en que las diferencias que percibimos son solamente una representación innata de que cada individuo es un ser único y que merece respeto simplemente por lo que es. Es por esto que los invito a reflexionar y tener presente que lo más bello del hombre es que no es perfecto.

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