Situacion De La Mujer
Uragihs26 de Marzo de 2015
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La situación de la mujer
en América Latina
A inicios de la década de los años 1990, la situación y los derechos de la mujer son temas de la discusión pública. Entre otros, son tópicos: la violencia y el abuso sexual así como los derechos reproductivos.
2 A título de ejemplo: en Costa Rica, el tema de la violencia doméstica cobró notoriedad, cuando dos mujeres jóvenes fueron muertas por sus compañeros, a principios de 1994. Durante 1993, una oficina del Ministerio de Justicia del país registró 5.500 pedidos de ayuda de mujeres, mientras la Defensoría de la Mujer atendió a 2.000 mujeres.
3 En Brasil, según informaciones de las 119 Oficinas de Defensa de la Mujer del Estado de São Paulo, en Brasil, el número de abusos sexuales contra mujeres en 1994 era 30% por encima del correspondiente a 1993. Alrededor de 35% de los abusos registrados fueron perpetrados por padres y otros parientes masculinos de la víctima.
4 A pesar de algunas medidas preventivas o punitivas que comienzan a adoptarse, una realidad socioeconómica con altos índices de desempleo, ocupación informal e inseguridad existencial a lo largo del continente, no facilita la tarea de enfrentar la situación.
5 La violencia contra la mujer es, sobre todo, expresión de una imposición masculina que la despoja de sus derechos más elementales y la deja con una situación de desvalorización y vergüenza que la lleva, en la mayoría de los casos, a no denunciar lo sufrido.
6 Pero el control sobre su vida y sus derechos se extiende, más allá del ámbito privado, al público. En él, las mujeres siguen siendo una pequeña minoría en los cargos políticos. Es a este nivel, que se toman las decisiones acerca de temáticas tan íntimamente ligadas con sus perspectivas de vida, como el derecho a prevenir o interrumpir un embarazo no deseado.
7 En abril, durante las deliberaciones del Tercer Comité Preparatorio de la ONU para la Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo, que se celebraría en El Cairo en setiembre de 1994, el aborto fue uno de los temas mas controvertidos. Mientras los gobiernos de Estados Unidos, India, China y Europa Occidental (en su mayoría) defendieron el derecho de la mujer, de acceder a instituciones donde se practican abortos en condiciones higiénicas, la abrumadora mayoría de los gobiernos de América Latina se opuso a cualquier interrupción.
8 Se estima en 500.000 el número anual de interrupciones clandestinas en Argentina; la cifra para Uruguay sería de 250.000 intervenciones.
9 La otra cara de la negación del derecho a decidir es la esterilización sin conocimiento ni consentimiento de la mujer. En 1994, Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) de México han denunciado la promoción, con prácticas de desinformación masiva, de ligaduras de trompas, por parte del gobierno mexicano. El objetivo sería reducir el crecimiento de la población de 1,8% a 1% anual. La medida afecta básicamente a la población indígena.
10 A principios de agosto, la Agencia Internacional para el Desarrollo (AID) de Estados Unidos desmintió estar involucrada en una campaña de esterilización masiva del gobierno de Honduras, a través de una minipíldora suministrada en forma gratuita por AID. Aparte de tener un efecto abortivo, esta píldora es señalada como causa de la esterilización de madres lactantes así como de problemas en el desarrollo hormonal sexual de niños y niñas.
Discriminación, violencia y subordinación: la situación de la mujer en el mundo
01/06/2014 - Raffaella M. Breeze, Madrid
• En cientos de países, el simple hecho de no haber nacido hombre supone una condena segura a una vida de subordinación, violencia y falta de derechos.
• En Arabia Saudí las ciudadanas no pueden conducir, tienen que llevar ħijāb, no pueden juntarse con los hombres y necesitan un guardián masculino.
Ser mujer es un riesgo. En cientos de países del mundo, el simple hecho de no haber nacido hombre supone una condena segura a una vida de subordinación, violencia y falta de derechos.
Afganistán, Albania, Arabia Saudí, Barhein, Bangladesh, Bosnia, Camboya, Egipto, Emiratos Árabes, Georgia, India, Indonesia, Irak, Irán, Israel, Jordania, Kuwait, Líbano, Libia, Marruecos, Nepal, Nigeria, Omán, Uzbekistán, Palestina, Pakistán, Qatar, Somalia, Sudán, Siria, Turquía y Yemen. Son los países en los que se producen anualmente miles de muertes por cuestiones de 'honor'.
Unos asesinatos que ocurren, principalmente, en países islámicos y que buscan justificar una violencia contra la mujer por religión, historia o costumbres sociales. Una lacra que empuja al género femenino a lo más bajo en la escala social: no tienen derechos por el simple hecho de no haber nacido hombres.
Arabia Saudí
Arabia Saudí es, probablemente, el país más conocido por su sistemática y legislada discriminación contra el género femenino. Las ciudadanas del país no pueden conducir, tienen que llevar ħijāb, no pueden juntarse con los hombres, necesitan un guardián masculino para viajar, hacer negocios o ir al médico o abrir una cuenta bancaria.
Si se les ve con hombres que no sean parte de su familia, pueden ser acusadas de adulterio o prostitución. Algunas de estas leyes no están escritas, y están impuestas en base a costumbres tribales del Islam, procedentes de las tribus nómadas en las que una estricta separación por géneros es la base de la sociedad.
Pese al panorama, hay espacio para algunos avances: hasta ahora no podían votar, pero el Rey Abdullah ha anunciado que podrán hacerlo (y podrán ser elegidas) para las próximas elecciones locales de 2015.
Pakistán
De acuerdo a la ley pakistaní, las mujeres son iguales a los hombres, tanto en la ley civil como en la sharia (islámica). No están obligadas a llevar ħijāb, pueden votar, conducir e ir a la universidad.
Pero aún así, el género femenino sufre de una gran discriminación en el país, por razones principalmente sociales: la violencia contra las mujeres va en aumento, el intercambio de mujeres para solucionar conflictos y matrimonios forzados de niñas son algunos de los ejemplos que sitúan al país como uno de los peores para nacer niña.
La violencia no es el único ejemplo de la discriminación contra las mujeres. Pakistán es una sociedad patriarcal, por lo que ellas, están subordinadas a los deseos del padre de familia. No tienen ni estatus, ni valor. La discriminación contra el género femenino surge a menudo dentro de la propia familia: la mejor educación, atención sanitaria y recursos van para los hijos, ya que ellas son educadas sólo para ser buenas madres y esposas.
Irán
Tienen que llevar hijab, aunque no de cara completa. Hay segregación en lugares como colegios o autobuses públicos. Tienen acceso a la educación, y en las universidades, el número de estudiantes femeninas es más alto que el de hombres.
Aún así, tienen más discriminación para acceder a trabajos, y el estado ha impuesto dificultades para que se puedan convertir en pediatras, ginecóloas o ingenieras. Es imposible que puedan acceder a puestos presidenciales, aunque sí que pueden llegar a cargos jurídicos, por ejemplo.
Yemen
Aunque la constitución yemení establece la igualdad de géneros, la realidad, impuesta por la ley sharía, es otra. Tienen derecho a voto, pero pocas tienen acceso a puestos políticos.
No pueden casarse con un ciudadano no yemení sin permiso de familia y estado, pueden divorciarse, pero deben enfrentarse a un largo proceso, mientras que si fueran hombres, podrían divorciarse casi instantáneamente.
En un juicio, la declaración de una mujer se considera como la de "media persona", es decir, que para equiparar una declaración de un hombre, hacen falta las de dos mujeres.
Sudán
Según un informe de Thomson Reuters Foundation, Sudán es uno de los peores países para ser mujer. De acuerdo al análisis, la ley del país, basada en el Islam, permite la violencia doméstica, matrimonios infantiles y violaciones.
En Sudán, más de 12 millones de mujeres son víctimas de la mutilación genital. Pueden casarse a partir de los 10 años y, según el código penal, pueden ser detenidas y flageladas por su vestimenta.
La situación de las mujeres y las niñas: hechos y cifras
El género y el VIH/SIDA
Cerca de un tercio de todos los adultos que viven con el VIH/SIDA tienen menos de 25 años y dos terceras partes son mujeres.
En el África subsahariana las niñas se contagian antes y más rápidamente que los muchachos. En el grupo de edad de entre 15 y 24 años, hay dos niñas infectadas por cada muchacho.
Los estudios indican que, en comparación con las mujeres que tienen algún tipo de estudios posteriores a la primaria, las mujeres sin educación son cinco veces más propensas a carecer de información básica sobre el VIH/SIDA.
Se estima que, en 2002, unos 800.000 niños y niñas de menos de 15 años se han infectado con el VIH, en una gran mayoría (90 %) como consecuencia de una transmisión de la madre al hijo.
En 2001, el UNICEF y sus organismos aliados en las Naciones Unidas apoyaban 80 programas en 16 países para ayudar a las madres a evitar transmitir el virus a sus hijos. Entre 1999-2001 estos programas alcanzaron 300.000 nuevos usuarios.
Para más información, vea el módulo VIH/SIDA
Género y educación de las niñas
Más de 110 millones de niños en el mundo, dos terceras partes de los cuales son niñas, no van a la escuela.
De
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