Fando Y Lis

Fando y Lis es una película mexicana dirigida por Alejandro Jodorowsky, la cual fue estrenada en 1968 y significó su debut como director cinematográfico.

El filme fue realizado en blanco y negro entre julio y septiembre de 1967, durante los fines de semana, y con un presupuesto modesto.

Por otra parte esta cinta también es conocida por el hecho de que causó gran polémica al momento de su estreno ya que, además de que el público reaccionó violentamente a la misma por su contenido virulento, su exhibición ocurrió poco después de los sucesos del Movimiento de 1968 en México, por lo que dicha película fue prohibida.

La cinta está basada en la célebre pieza de teatro homónima de Fernando Arrabal, escrita en 1955, de quién se inspiraba Jodorowsky en obras de tipo performance de arte vanguardista realizadas durante esa época en el marco del llamado Movimiento Pánico, el cual fue fundado por Arrabal y Jodorowsky junto con Roland Topor en París, que consistía en mezclar diferentes géneros como el surrealismo, el terror, la fantasía, el humor, el drama y la ciencia ficción y no darle un orden concreto a una historia, sino entremezclarlo sin aparente sentido, como un caos; pero que el espectador pudiera ordenarlos en su subconsciente.

La película, con sus códigos surrealistas, narra el viaje que emprenden Fando y Lis -una disfuncional pareja de novios- en busca de la ciudad simbólica de Tar, donde todos encontrarán la paz y la alegría. Sin embargo deben enfrentar ciertas pruebas que se les atraviesan en el camino, en clara alegoría al mito de la caverna platónica.

[editar]Argumento

La película comienza mostrándonos a Lis comiéndose los pétalos de una rosa mientras escuchamos una explosión y, posteriormente (mientras observamos los créditos de la cinta), se explica qué es la ciudad de Tar y las cosas que ocurren en ella.

Súbitamente aparecen algunos recuerdos de Fando, los cuales muestran la tristeza que él sufrió tras la muerte de su padre y, volviendo a la actualidad, vemos que Fando y Lis transitan sobre un ambiente rocoso y abandonado. Lis, quien es parapléjica, viaja sobre un carrito empujado por Fando, en el cual también llevan un tambor perteneciente al joven, un fonógrafo y una muñeca, hasta que aparece el primer obstáculo en la felicidad de la pareja cuando un grupo de mujeres tratan de seducir a Fando y éste abandona a Lis. Por su parte ella, entristecida, empieza a recordar varios momentos en su infancia, donde se muestra que fue violada y agredida a esa edad.

Inmediatamente observamos a Fando con los ojos vendados mientras que las mujeres se divierten a costillas de él. Arrepentido de su acto, Fando regresa donde Lis y se disculpa. La joven, aún deprimida, empieza a cantar canciones tristes mientras que él la consuela diciéndole que cuando fallezca irá a verla con una flor y un perro. La pareja sigue su camino y, cuando Fando se da cuenta que no hay una salida, se les aparece un anciano vestido de cura quien trata de convencerlos de que ese sí es el camino a Tar, pero Fando y Lis descubren el engaño y se devuelven.

Fando pronto se desespera por tratar de ver cosas buenas donde no las hay y lastima a Lis tirándola y arrastrándola por el terreno empedrado. Él continua agrediéndola, diciéndole que es una carga, y vuelve a dejarla abandonada a su suerte. Fando se encuentra ahora a un grupo de ancianas, quienes están apostando a un hombre en un juego de azar y usan duraznos en almíbar como fichas, mientras escuchamos un ruido de moscas volando.

Mientras tanto vemos a una mujer con un látigo de cuero, quien sería la conciencia de Fando, castigándole a latigazos en la espalda y, simultáneamente, vuelven el recuerdo del padre, quien ataca a todas esas gentes (incluida la conciencia) y el recuerdo de la violación de Lis por lo que, entre sollozos, decide ir a pedirle perdón de rodillas a Lis mientras le lame los pies en signo de arrepentimiento.

Ella le reprocha todos los males que Fando le ha hecho y éste le jura que no lo volverá a hacer. Es en ese instante que aparece ante la pareja un grupo de travestis, quienes empiezan a hacer un espectáculo enfrente de ellos y, de pronto, los dos protagonistas también aparecen travestidos y, en la siguiente escena, se observa como ambos dibujan sobre sus cuerpos los nombres de sus respectivas parejas.

Después de eso Fando decide ir a dar una vuelta con su tambor mientras que, en ese preciso instante, viene a su mente el recuerdo de su madre, la cual fue una mujer muy famosa, quien nunca le prestó alguna atención en su hijo y mucho menos amor y cariño, por lo que se deja notar que ella también fue la responsable de la muerte del padre de Fando, ya que lo humilló ante todos hasta más no poder.

Posteriormente se muestra un momento de intimidad entre Fando y Lis, pero la misma es interrumpida por el recuerdo de la violación. Fando se enfada de tal manera que encadena a Lis al carrito y la desnuda totalmente llamando a otras personas para que la admiren, sometiéndola a la humillación pública. Él trata de alejarse de ella para no sentirse culpable, pero es inútil, pues el camino no conduce a ninguna parte. Lis comenta que no han avanzado en nada en su recorrido a Tar y que se han quedado en el mismo sitio pero, sin embargo, Fando continúa intentando ser bueno con Lis, aunque los traumas no lo dejan, y posteriormente encadena y esposa a Lis.

Fando, en su desesperación por querer avanzar, vuelve a lastimar a Lis y ésta ahora reacciona botándole su tambor (se podría interpretar que dicho tambor era el único recuerdo de su difunto padre) por lo que Fando, lleno de odio y rabia, termina pateándola y cayéndole a pedradas hasta matarla. En ese instante, se les aparece un hombre con un caballo, el cual la lleva directamente al cementerio, ya en su tumba muchas personas se les acercan y cortan un pedazo de sus ropas para comérselas. Fando aparece y, al ver la tumba de Lis, se llena de dolor, extiende las manos hacia la tumba y se la lleva cargando (lo que pudiera ser, probablemente, el peso de la conciencia de Fando por la muerte de Lis por el resto de su vida).

La película termina en el cementerio cuando Fando acompaña la tumba de Lis durante varias horas -tal como lo prometió al comienzo, con una flor y un perro- y Fando, ya cubierto de hojas caídas, se queda inmóvil hasta que cierra los ojos, y muy triste por su muerte.

[editar]Elenco

Sergio Kleiner ... Fando

Diana Mariscal ... Lis

María Teresa Rivas ... Madre de Fando

Tamara Garina ... Papisa

Juan

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