Agua Y Economia Verde

Agua y Economía Verde

El modelo económico dominante ha llevado a que la población mundial consuma de forma continua más biomasa de la que la tierra produce, esto significa que la huella ecológica colectiva supera el planeta tierra. El agotamiento del capital natural cuyos servicios de los ecosistemas son una parte esencial del bienestar de los pobres, agrava la pobreza persistente. El riesgo global que el modelo dominante genera - tanto de los riesgos sociales de disparidades persistentes como de las disparidades de amplia distribución y los riesgos ambientales de emisiones de GEI (gas de efecto invernadero) que sobrepasan la capacidad de absorción de la tierra - son graves amenazas para las presentes y futuras generaciones (PNUMA, 2010).

Existe un impulso significativo para fomentar la transición hacia una economía verde; desarrollándose un número muy importante de eventos internacionales en los cuales los Gobiernos confirman su apoyo a la transición hacia la economía verde (PNUMA, 2010).

¿Que es la economía verde?

La economía verde consiste en un conjunto de modelos de producción integral e incluyente que toma consideración variables ambientales y sociales. Produce bajas emisiones de carbono, utiliza los recursos de forma eficiente y socialmente incluyente (CEGESTI, 2010). Surge de la necesidad de mejorar y alcanzar el bienestar de las personas y la equidad social por medio de la reducción de los riesgos medioambientales y las escaseces ecológicas (ONU-DAES, 2012). En base a esto, es que la economía verde intenta otorgarle solución a los ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio (ver tabla n°1) planteados por los 191 Estados Miembros de la ONU y que intentan alcanzar para el año 2015 a través de PNUMA (Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente). (OMS, 2013).

Relación entre los servicios de los ecosistemas y los Objetivos de Desarrollo del Milenio

Servicios de los ecosistemas ODM relacionados Relación con las metas

Suministro y regulación de los servicios • ODM1: Erradicar la pobreza extrema y el hambre Puede mejorarse el abastecimiento diario y seguro de agua, combustible y alimentos con inversiones que garanticen y mantengan los ecosistemas naturales y cultivados.

Servicios de los humedales y los bosques • ODM3: Promover la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer Combustible y agua: una disponibilidad mejorada contribuiría a la igualdad de género dado que la carga de la provisión recae principalmente sobre las mujeres

Suministro (plantas medicinales) y regulación de los servicios (agua) • ODM4: Reducir la mortalidad infantil

• ODM5: Mejorar la salud materna

• ODM6: Combatir el VIH/SIDA, la malaria y otras enfermedades Una mejor disponibilidad de agua limpia y de servicios médicos puede dar lugar a mejores condiciones para la salud.

Tabla 1: La economía Verde y los ODM. Fuente: ONU-DAES, 2011.

La economía verde presta atención a la sociedad y al medioambiente. Desde el primero, se hace necesario lograr: igualdad de género, equidad y justicia social, solidaridad intergeneracional y redistribución de los recursos entre países ricos y pobre. Por otro lado, la búsqueda de mitigar la extinción de los recursos y de especies así como también los daños medioambientales irreversibles (Green Economics Institute Oxford, 2009).

Una de las variables a considerar dentro de la Economía Verde y que por lo demás, juega un rol fundamental tanto en el manejo medioambiental como social, corresponde al recurso hídrico. Muchas áreas del planeta se ven afectadas debido a la creciente demanda de este recurso al no contar con el acceso mínimo para satisfacer las necesidades básicas de la población, debido a condiciones de sobreexplotación de acuíferos provocados por una demanda excesiva del consumo de Agua y mal manejo de esta por sectores industriales y ciudades.

La transición hacia una economía verde requiere un giro en cuanto a las prácticas actuales. En este sentido, la conferencia de ONU-Agua “El agua y la economía verde en la práctica: hacia Río+20” identificó cuatro temas prioritarios relativos al agua en los que es necesario el cambio hacia una economía verde: la agricultura, la industria, las ciudades y las cuencas. En ellos se presentan los principales retos, oportunidades y datos más relevantes relacionados con cada uno de los temas identificados. También plantean una serie de prácticas y propuestas para la transición hacia la economía verde, en línea con lo señalado por las organizaciones presentes en la conferencia, se relaciona el uso del agua con la agricultura, ciudades, e industrias (entre otros), para alcanzar una economía verde. (IAGUA, 2011).

La economía verde y el agua

En este contexto, la economía verde se enlaza al recurso hídrico y trata de hacer negocios de forma alternativa y sostenible. Para mejorar el bienestar humano reduciendo significativamente los riesgos ambientales.

El agua contribuye a una economía verde, ello porque junto al saneamiento están estrechamente relacionados con la pobreza, la seguridad alimentaria, la salud y otros muchos aspectos del desarrollo sostenible. Los expertos coinciden ampliamente en la rentabilidad de invertir en los servicios del agua, mientras que la comunidad internacional todavía no lo percibe con carácter de urgencia (CINU, 2011).

Los principales ámbitos de acción, para alcanzar una economía verde:

● La agricultura. La economía verde busca alcanzar la seguridad alimentaria utilizando menos recursos naturales, debido a que la población está en continuo crecimiento. Esta seguridad alimentaria podría lograrse mejorando la gestión del agua y realizando inversiones e innovaciones sustanciales, aumentando los cultivos que garanticen una mayor eficiencia en términos de nutrición por gota de agua (ONU-DAES, 2011).

● Las ciudades. Juegan un rol central en la economía verde dado que la mayor parte de la actividad económica mundial se concentra en estas, (el 50% de la población del planeta se concentran hoy en día en áreas urbanas). El enorme desarrollo de las ciudades tiene efectos de gran alcance sobre las economías mundiales, los usos energéticos y el cambio climático. Como núcleos de interacción social y de actividad económica, las ciudades constituyen una plataforma física fundamental para la formulación e implementación

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