Análisis Centro - Periferia del Estado de Hidalgo
Héctor Ruiz BañosEnsayo1 de Mayo de 2017
3.040 Palabras (13 Páginas)313 Visitas
INDICE
INTRODUCCIÓN………………………………………………………………………….3
DESARROLLO…………………………………………………………………………….4
CONCLUSIÓN……………………………………………………………………………
INTRODUCCION
El libro titulado “El círculo negro” es una obra propalada por Antonio Velasco Piña, la cual está basada en una serie de anécdotas y entrevistas en modo presencial con un ex dirigente y miembro del Partido Revolucionario Institucional. Este ejemplar ilustra la historia de México a través de las siete décadas del siglo XX en pleno esplendor priista haciendo valer su hegemonía. Atreviéndose el confesor en su carácter de miembro del “Círculo negro” a revelar las grandes maniobras de corrupción y ejercicio del poder para controlar a la población desde un rango proveniente de altos mandos. Con este libro es posible tener conocimiento de cualquier verdad oculta, exponiéndose a la luz todos los actos y manipulación tras bambalinas en una cronología de absoluta comprensión iniciando desde Plutarco Elías Calles hasta la presidencia perdida en el nuevo milenio. El verdadero mundo de la oscura política mexicana se muestra por completo.
En México siempre se ha vivido en el ejercicio de una entera represión, maltrato y escabechina para sus habitantes; este régimen o modo de vida da inicio desde las antiguas tribus prehispánicas quienes al tener una teocracia, solían realizar sacrificios y consecuentemente acostumbraban a practicar actividades de guerra, por último tenían un sistema de gobierno de nombre diferente al del México contemporáneo pero con el mismo índice de mandato, la monarquía. Posteriormente vinieron las épocas de la conquista y la encomienda, donde también se mantuvo a los antiguos mexicas bajo el yugo de los españoles, destacando en la parte de la Conquista la traición de la Malinche. Luego vinieron las épocas del México independiente y el Porfirismo. En la primera de estas hubo gran combate por el alcance de la dirigencia nacional, incluyendo las Guerras de Reforma entre liberales y conservadores. El Porfirismo es una etapa clave para el Partido Revolucionario Institucional, esta fase de la historia política y gubernamental del país se caracterizó por el mando dictatorial y preservación del poder a cargo del Gral. Porfirio Díaz Morí, con un periodo que rebasa los 30 años en el cual ejerció con mano dura su administración y no permitía intento de oposición a su gobierno.
La Revolución Mexicana fue un levantamiento en armas el 20 de noviembre de 1910 para derrumbar el imperio de don Porfirio, pero nuevamente la “libertad” del país únicamente despertó ataques y luchas por el puesto presidencial, cuando debió ser en teoría un periodo superado y mejorado. El PRI en sus documentos básicos y mercadotecnia intenta hacer creer que nació bajo las ideologías de la Revolución Mexicana, ya que suele decir es un partido nacionalista –era una corriente importante en las primeras décadas del siglo XX- y además un organismo interesado en tomar en cuenta la participación ciudadana a través del voto en procesos electorales del hoy “sistema democrático”. No es necesario fungir como analista político para darse cuenta que actualmente la democracia en México es un fracaso, solamente es producto de una invención de altos fueros mexicanos. La única democracia que ha existido en nuestra Nación y que fue el acabose del PRI –o así se pensaba- fue la alternancia de partido triunfador de elecciones presidenciales en 2000, ganando Vicente Fox Quezada y que culminó en una oportunidad desperdiciada.
El Partido Revolucionario Institucional en sus orígenes tiene como precedente al Partido Nacional Revolucionario, fundado el 04 de marzo de 1929 por el entonces Presidente, el Gral. Plutarco Elías Calles en aprovechamiento del reciente asesinato de Álvaro Obregón. Esta organización partidista nació con el lema “Instituciones y justicia social” porque al criterio de Calles, la creación de instituciones tendría gran función en el desarrollo del Estado Mexicano. El PNR desde sus inicios trató de buscar la manera de ir manteniendo masas unidas, por ello es que en 1938 nacen: la Confederación Nacional Campesina (CNC) que comprendía al sector agrario, la Confederación de Trabajadores de México (CTM) que tenía cierta preeminencia sobre las otras y que englobaba a los obreros; para 1943 surge la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP) que estaba con el sector popular o de comerciantes. Tenía también un sector de militares, pero la estrategia de Calles fue que para deslindarse de los centinelas, debía de unir fuerzas en mayoría a fin de conseguir su independencia y sin temor a represalias. Posteriormente llega la Presidencia de Lázaro Cárdenas del Río, siendo ésta la primera en durar seis años como titular del ejecutivo en el periodo 1934 – 1940. El Gral. Cárdenas por su parte el 30 de marzo de 1938 cambia el nombre de Partido Nacional Revolucionario a Partido de la Revolución Mexicana, con un slogan “Por una democracia de los trabajadores”, siendo el gancho o atracción para los sectores que hasta entonces se habían creado y tenían el poder de decisión, centrando en éstas el dominio a mala manera para obligar a ir en favor de su partido y candidato, por ende es que arrasaba las candidaturas con porcentajes de hasta 94%, pero es digno de señalar que con iniciativas revolucionarias logra grandes avances como la expropiación petrolera.
Por último Manuel Ávila Camacho llega al poder en 1940 y hace de las suyas con los sectores tras manipularlos y olvidarse de ellos, como hoy en día es una estrategia política por herencia de ellos. El 18 de enero de 1946 tras una reformación al PRM, nace el Partido Revolucionario Institucional con un lema a la letra: “Democracia y justicia social”. El Gral. Ávila Camacho se reúne con otros 5 individuos que se dedicaron a redactar en una Constitución la verdadera forma de mover los hilos en el gobierno por parte del PRI, esta forma de gobierno consistía en una emulación al gobierno de don Porfirio Díaz, debido a que aspiraban a poseer poder absoluto y tenían con ese paradigma la oportunidad de revestir inciertamente color de rosa todas sus tretas, en vista de realmente ser una monarquía con disfraz de republicano; aprovechando además el mecanismo aplicado de control a la gente fingiendo darles intervención mediante el sufragio y bajo la circunstancia de tener un Estado benefactor. Con todas estas celadas la población jamás iba a quejarse del partido que más bien era una institución gubernamental dependiente de la Secretaría de Gobernación.
El Gral. Ávila Camacho junto a los 5 integrantes del grupo “El Círculo negro” compagina para que entrara en vigor la “Real Constitución Política del Estado Mexicano”, la cual se integra por 11 artículos y señala con claridad que el Estado Mexicano es una monarquía absoluta compuesta por tres instituciones reales: El monarca, el Círculo negro y el partido; disposición total del monarca sobre la vida y propiedad de los habitantes, permanencia de los miembros del círculo negro, control del partido para con la sociedad, etc. Esta Constitución la promulgaron el 1 de enero de 1946 y que sellaron con su propia sangre los seis intervinientes. Bajo la condición que el Monarca no pueda extender más allá de seis años su cargo o será acreedor a un decreto de pena de muerte, por parte del círculo negro. Ahora bien, una vez que el monarca elige libremente a su sucesor, los miembros del círculo eligen sus puestos a ocupar en la Administración Pública. Por último el sexto ejemplar de la Constitución debía ser transferido de Monarca a Monarca, empero el confesor arguye que algún presidente lo extravió o lo hizo perdedizo. Los otros cinco fueron sepultados con sus amos.
Reincidiendo y/o retomando en que la democracia no existe o por lo menos esos años hubo mayor farsa, ya que era más fácil oprimir a la población o llevar a cabo injusticias electorales y sociales, vienen a la mente ejemplos del cinismo e insensibilidad cometidos por ejemplo las matanzas: Tanto la del 7 de julio de 1952 al hacer trampa para ganar la elección Adolfo Ruiz Cortinez, como la del 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco con Gustavo Díaz Ordaz y la del jueves de corpus con el Secretario de Gobernación de Díaz Ordaz, Luis Echeverría Álvarez quien era un demente y prominente asesino. En cuanto a inexistencia democrática el anciano confesor aduce por ejemplo, que semanas previas a la elección de Ruiz Cortínez, se designaron los porcentajes de las elecciones, o cuando el Círculo Negro hegemonizó varios partidos en coalición al PRI y a sus oposiciones les prohibió contender en la elección de José López Portillo y Pacheco, ante esta elección dicen los priistas: “Competimos contra nuestra propia sombra” y enseguida ríen.
Cuando sale López Portillo la crisis económica se detonó, si bien ya había iniciado el declive del PRI con la matanza de 1968 y de la cual asegura el vetusto confesor, Díaz Ordaz había sido un gran monarca, un monarca absoluto. Echeverría echo al hoyo a su partido, López Portillo y Pacheco hizo caer en crisis al país tras en un principio haber conmovido a la nación cuando llorase en la tribuna de la Cámara de Diputados. Llega entonces Miguel de la Madrid Hurtado “El sepultero del pri”, un magnífico economista que tenía como encomienda dar finiquito a las malas y anteriores consecuencias económicas; cabe señalar que para entonces el Círculo negro había reducido su número de integrantes puesto que habían perecido dos de sus pertenecientes, lógicamente no se informó a ningún ente público sobre estos hechos. Como se vio durante las sesiones de clase, un hecho es distinto a un acto.
...