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Cultura Del Agua


Enviado por   •  27 de Mayo de 2014  •  5.627 Palabras (23 Páginas)  •  211 Visitas

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Cultura del Agua

El término cultura alude al patrimonio común de un pueblo, con características únicas en su manifestación. Ese patrimonio común, estable en algunos tiempos y lugares, es a la vez permanentemente dinámico. Condiciona la vida particular, pero en la medida que cada uno aporta o puede aportar a partir de su esencial libertad, la cultura es condicionada por los miembros de la comunidad. Esto es esencial: la cultura es organizadora de hábitos, pautas, habilidades de los individuos pero es al mismo tiempo, organizada y reorganizada por los individuos. Llamamos cultura, entonces, a los modos o formas de ser (pensar - sentir - decir - obrar), de hacer, de vivir de los pueblos.

Hemos definido la cultura de agua (o cultura hídrica, indistintamente), como el conjunto de creencias, conductas y estrategias comunitarias para el uso del agua que puede ??ser leída?? en las normas, formas organizativas, conocimientos, prácticas y objetos materiales que la comunidad se da o acepta tener; en el tipo de relación entre las organizaciones sociales que tienen el poder y en los procesos políticos que se concretan en relación con el aprovechamiento, uso y protección del agua. La matriz cultural (que no es una sola sino que se diversifica por las características de cada grupo humano) predispone al sujeto para percibir-clasificar el mundo de una determinada manera.

Destacamos que la cultura hídrica es siempre un concepto de grupo, resultado de las percepciones socioculturales y los valores que circulan entre y atraviesan a los sujetos. La cultura hídrica es la acumulación de experiencias en una memoria social poseída por todos. Avanza en niveles concretos de comprensión de la realidad y de elaboración conceptual que permite el refuerzo de actitudes individuales y colectivas para enfrentar los desafíos de la realidad.

Dado que el agua es vida (podemos decir, "no hay vida sin agua") la existencia de todo grupo humano o sociedad está hablando de la existencia de una cultura hídrica determinada. Al ser un elemento vital, involucra a todos los miembros del grupo o sociedad, y su uso es el resultado de experiencias seleccionadas social e históricamente, lo que implica, además, la transmisión de conocimientos. No hay sociedad ni grupo social sin un nivel o grado de cultura hídrica. Decir que se necesita enseñar una cultura hídrica equivale a ignorar que cada comunidad tiene una, más o menos perfectible. Es más, si se desea cambiar una cultura hídrica por otra, es necesario reestructurar los modos de percibir, de creer, de conocer, de organizarse, de vivir y de proyectar un futuro común. Esta idea implica un impacto que va mucho más allá del manejo del agua en una comunidad: impacta en toda la cultura, implica transformar los modos de pensar, sentir, actuar y desarrollarse.

Cada sociedad y cada grupo social tienen su propia y única cultura hídrica. En América Latina, aquella que fuera producida por nuestros pueblos autóctonos pre y post-colombinos y la producida en la actualidad por las comunidades campesinas se mezclan con otras formas de usos del agua. Todas tienen idéntica capacidad para aportar al conjunto, algún conocimiento sobre su manejo.

Programa Regional "Agua y Cultura"

Definir y valorizar nuestras Culturas Hídricas de América Latina, forma parte de los nuevos desafíos para enfrentar la crisis del agua. En la cultura está el fermento de los procesos de cambio y de la posibilidad real del desarrollo sustentable. En este sentido el Programa Hidrológico Internacional para América Latina y el Caribe (PHI-LAC) ha promovido el Programa Regional ??Agua y Cultura?, que intenta responder a la urgente necesidad en el campo del agua de reconocer las dimensiones culturales de la misma con el fin de encontrar soluciones sustentables.

Sus objetivos inmediatos son promover, reconocer y comprender los vínculos entre el agua y la diversidad cultural. Proporcionar una clara definición de la Cultura Hídrica y la importancia de su valoración al conjunto de los gestores del agua, académicos, estudiosos de las ciencias de sociales, naturales y ciencias del agua que permita orientar su labor en un marco teórico conceptual desde una perspectiva latinoamericana compleja e integradora; Generar un proceso de interacción entre las ciencias sociales, las ciencias naturales y las ciencias del agua para la producción y reelaboración de conocimientos que superen las propias disciplinas intervinientes; Desarrollar una visión de las Culturas Hídricas de América Latina desde las culturas más antiguas hasta los grupos étnicos actuales; Fomentar la divulgación de las Culturas Hídricas de América Latina y de todas las expresiones que las sustentan: mitos, refranero, obras hidráulicas, formas de organización, tipos de producción, etc. Hacer explícito el variado repertorio de pautas sobre el uso, aprovechamiento y preservación del agua propio de nuestros pueblos, producto del desarrollo milenario de su diversidad cultural.

La Fundación Nueva Cultura del Agua (FNCA) está formada por un grupo de personas de España y Portugal que promovemos un cambio en la política de gestión de aguas para conseguir actuaciones más racionales y sostenibles. Somos profesionales procedentes de diferentes ámbitos (académico, empresarial, cultural, social…) que, a través del conocimiento científico y con sensibilidad social, defendemos una Nueva Cultura del Agua.

En la Fundación Nueva Cultura del Agua trabajamos para recuperar los ecosistemas acuáticos (fuentes, ríos, riberas, lagos, humedales…) que son la máxima expresión de la vida en nuestro planeta. Defendemos la recuperación del valor patrimonial, cultural, emocional, estético y lúdico de nuestros ríos en una sociedad que ha confundido progreso con negocio.

Creemos necesaria una Nueva Cultura del Agua dirigida hacia la sostenibilidad ambiental y, para ello, vemos preciso introducir cambios profundos en nuestras escalas de valores y en nuestro modelo de vida. Necesitamos una ética que reoriente nuestras relaciones sociales en torno a los usos y la percepción del agua y de la naturaleza en general.

El origen de la Fundación Nueva Cultura del Agua (FNCA) está ligado a la publicación del anteproyecto del Plan Hidrológico Nacional a mediados de los años noventa. Tres lustros después, todavía queda mucho por hacer en la gestión de nuestros ríos y acuíferos. Y, por ello, desde la FNCA impulsamos un debate más racional y sostenible

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