EL LENGUAJE HUMANO Y ANIMAL, MISMO O DIFERNCIA

EL LENGUAJE HUMANO Y ANIMAL, MISMO O DIFERNCIA.

El presente trabajo tiene como objetivo exponer las diferencias entre el lenguaje creado por los animales y el lenguaje creado por los humanos. Empezando con una breve presentación de las explicaciones que nos han dado de lo parecido que pueden llegar a ser ambos leguajes, dejando en evidencia el porqué de su confusión; secundado por la presentación de sus diferencias, a veces, retornando a las similitudes, para dejar más en claro las misma; y finalmente, hacer notar, por qué un chimpancé no puede ser un animal dotado de lenguaje.

     Podemos hacer evidente que las especies han creado y desarrollado maneras de comunicarse. Quién no ha escuchado a distintos animales generar aullidos frente a otro animal, y lo primero que pasa por nuestra mente, es el intento de decir: ‘aléjate’. Tampoco podemos refutar que los animales también tienen sentimientos por otro de su misma especie o incluso por los que no forman parte de la suya, así pues, vemos en las noticias, animales hembras que adoptan pequeñas crías para cuidarlos y protegerlos, caricias entre unos, jugueteo, etc.

     La creación del lenguaje humano y lenguaje animal, se sustenta en un principio, y fue la capacidad de juntarse con los propios de su especie para la supervivencia ante las adversidades de la naturaleza. Pero el hombre ha agregado características, no solo cuantitativas sino también cualitativas, que denotan un desarrollo superior al lenguaje animal.

“El Hombre, como si dijéramos, ha descubierto un nuevo método para adaptarse a su ambiente. Entre el sistema receptor y el efector, que se encuentran en todas las especies animales, hallamos en él como eslabón intermedio algo que podemos señalar como sistema ‘simbólico’”^[1]

     La carga simbólica que le agrega el hombre a su lenguaje, es lo que lo va a separar del lenguaje animal, pues éste (lo simbólico), le hace tener un pensamiento más estructurado, le da un tiempo para cuestionarlo. Entra en la capacidad de dialogar consigo mismo constantemente, mientras que en el lenguaje animal es una relación de estímulo-respuesta.

     No se duda de la capacidad de inteligencia de los animales, pues comprendemos que también llevan un procedimiento de aprendizaje, similar al de los bebes, un ‘aprendizaje de mimético’. Diferentes estudios nos demuestran este tipo de aprendizaje, donde a un animal se le pone enfrente un problema que debe resolver, si lo resuelve correctamente este obtiene un premio, pero si es negativa la respuesta, obtiene un castigo; esto no hace más que ilustrar que el animal genera una memoria respecto a su experiencia vivida y que va sabiendo entre la relación de goce-malestar.

     Ahora bien, es cierto que animal y humano generan memoria, pero ¿qué es lo que los diferencia? La memoria del humano radica en la capacidad de abstracción tiempo-espacio, pues con ayuda de la imaginación, puede evocar el pasado y crear un futuro (idealismo), así como la capacidad de demostrar lugares encontrados en su experiencia, esto también con ayuda de la geometría. Cassirer^[2] nos habla de un nativo que conoce en detalle todo un rio, el camino de subida para ir a pescar y el de regreso, pues lo ha recorrido toda su vida; pero no puede crear un mapa, pues no necesita de uno para su supervivencia, cosa similar con los animales y aunque quisieran no tienen esa capacidad de la imaginación y abstracción.

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