ENSAYO CFG “HISTORIA DE LA CIENCIA :IMPRESIONES E INFLEXIONES”

Ensayo: El caso galileo.

“Hay una diferencia fundamental entre la religión, que se basa en la autoridad, y la ciencia, que se basa en la observación y la razón. La ciencia vencerá porque funciona” (Stephen Hawking, Entrevista en la televisión estadounidense ABC, junio de 2010). La religión ha incidido fuertemente en el pensar de algunos, llevando como estilo de vida sus creencias y aferrándose a ellas, mientras que para otros se ha vuelto insignificante y confirman que no incide en su día a día. El sistema cultural, ha dado hincapié a grandes discusiones distanciando países, comunidades e incluso familias, al igual se ha involucrado en temas polémicos de diversas índoles y la ciencia tampoco se queda fuera. Nos han hecho pensar que ambas comunidades son antónimas y que es imposible ser religioso y creer en las leyes científicas, lo que a mi parecer es erróneo porque se dedican a responder interrogantes diferentes, la ciencia se centra de responder al cómo y la religión, por otra parte, en el significado y motivo de lo que existe, respondiendo al por qué y para qué. Y si bien es una decisión netamente personal pertenecer a una a ambas comunidades, no hay razón para entren en una colisión. Ambas comunidades han empatizado la una con la otra, hay notorias diferencias, pero no todo es tal como se pinta y es importante señalar que muchos científicos fueron fervientes creyentes.

En la historia de la humanidad, diferentes concepciones se han propuesto para comprender nuestro universo de una mejor forma. Una visión que fue predominante entre la comunidad científica y religiosa fue el geocentrismo, introducida por Ptolomeo y siglos después, esta teoría fue reemplazada por la heliocéntrica de Copérnico, quien fue el primero en atreverse a desafiar esta idea imperante y considerada verdad absoluta en el siglo XVI. Tiempo después, este conjunto de reglas y principios fue comprobado por Galileo, quien sufrió las mismas repercusiones por parte de la Iglesia Católica. Varias personas han identificado y señalado a Galileo Galilei como un emblema de revolución frente a la Inquisición, puesto que el personaje ilustre y la entidad mencionada poseen un largo historial de hitos controversiales para el contexto de la época, pero la imagen de un heroico astrónomo que se ha intentado perpetuar hasta hoy, no es tan del todo cierta y esconde una errada interpretación de los hechos. A través de una reciente carta descubierta en el año 2018, el susodicho le confidenció a su pupilo que las Sagradas Escrituras no pueden errar, pero sí sus exégetas, quienes se apoyan en el significado literal del texto para fundamentar. Actualmente, analizar las Sagradas Escrituras para desarrollar una opinión es totalmente válido, pero en el periodo de Galileo era bastante polémico, debido a que se condenaban a los herejes, quienes cuestionaban las prácticas y dichos que la Inquisición dictaban. Si bien estuvo rodeado de polémicas y hay una notoria fisura entre la ciencia y religión, existen diversas opiniones dentro de ambas comunidades, lo cual el heroísmo del astrónomo se puede cuestionar con fundamentos. También, en su carta menciona que no hay razón para que la religión y la ciencia se enfrentasen, pues el destino de la Biblia no era ser un libro acerca de filosofía natural que explicase cómo funciona el mundo y también explicó que tanto la ciencia como las Sagradas Escrituras son verdades y no pueden contradecirse.

La Inquisición inicia un proceso contra Galileo en el año 1616, lo que da origen a un enfrentamiento, pero no hizo acto de presencia en los tribunales y a través de terceros, se informa que se le culpaba de sostener la doctrina heliocéntrica. Fue un proceso largo que aún da para comentar, pero su mítica frase jamás fue pronunciada, se han desmantelado varios hechos y se le reconoce su aporte a la comunidad científica, gracias a su desarrollo en las bases de la mecánica lo que le valió un puesto destacable en la ciencia, pero no hay constancia histórica de su famoso experimento en la Torre de Pisa lo cual es complicado pedir que se le reconozca tal heroísmo. No hay que desprestigiar su aporte, sino más bien hay que ser cuidadosos con los hechos históricos y no distorsionarlos, ya que se les quita mérito a otros científicos atribuyéndole logros que no corresponden a Galileo, por ejemplo, la invención del telescopio. El mejoró bastante el artefacto, pero no lo inventó como tal, es un error que comenten las personas reconociéndole como inventor del tal objeto.

Cabe aclarar que el confrontamiento de la Iglesia y Galileo no fue un debate científico como tal, sino más bien que él cuestionó las prácticas de ésta, como cuando estipuló de cómo se debían interpretar las escrituras y esto ocasionó enfado entre los teólogos de la época, puesto a que sugiere como explanar sus creencias. Hay varios puntos que desfavorecieron a Galileo en su sentencia, uno de ellos fue que la evidencia que tenía en su posesión para defender el heliocentrismo no era suficiente para aceptarla como cosmovisión general, a diferencia del geocentrismo y a la Iglesia le resultaba difícil aceptar una cosmovisión que fuese diferente a la que se había asumido como verdadera y, es más, llegaba a ser un poco absurda. También, el temperamento del científico no le contribuía de forma positiva, pues era arrogante e impulsivo y esto fue un factor importante en su juicio, ya que, si hubiese adoptado el caso con otra disposición, lo más probable es que hubiese podido realizar una cruzada significativa en nombre del heliocentrismo sin condena. Un factor importante, es que el astrónomo era un fervor creyente y no estaba en sus planes socavar con la jerarquía católica. La Iglesia Católica, siglos después, declaró que cometió un error con Galileo. Y en el año 2009, el Papa Benedicto XVI y el Vaticano elaboraron conferencias sobre la astronomía, en donde inauguraron un observatorio junto con una estatua del astrónomo con el propósito de reconciliar ambas comunidades por los conflictos ocurridos. Sin embargo, en el pasado, el mismo Papa declaró que la Iglesia fue mucho más fiel a la razón que el mismo Galileo y su condena fue razonable y justa, lo cual nos deja en evidencia que la polémica aún perdura. Es importante que el Vaticano adopte una postura más clara del caso, puesto a que la institución no está exenta de críticas, en especial de casos como éste que aún son comentados en la actualidad y es bastante confuso que la Iglesia adopte y cambie su discurso según el contexto histórico, considerando que sus opiniones y declaraciones son bastante influyentes en la comunidad de los creyentes, también, son acogidas por los gobiernos que rigen y justifican sus políticas en alianza al Vaticano.

...