ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

La Edad De Plata: Mercados, Minería Y Agricultura En El Periodo Colonial Tardío.


Enviado por   •  20 de Septiembre de 2013  •  1.784 Palabras (8 Páginas)  •  1.174 Visitas

Página 1 de 8

El Crecimiento Económico Novohispano: Tendencias generales.

La economía novohispana creció a lo largo del siglo XVIII por encima de su población, dando cuenta de una prosperidad relativa en la que el sector agropecuario constituyó la base y la producción minera su cresta dinámica. La economía creció en términos reales hasta alcanzar un monto de alrededor de 225 millones de pesos a fines de la época colonial.

Los precios de los alimentos experimentaron súbitas alzas, la tendencia deflacionista de la primera mitad del siglo xviii atenuó el crecimiento nominal registrado en la segunda fase, que se caracterizó, en el último cuarto de siglo, por un incremento sostenido de los precios agrícolas.

El crecimiento de largo plazo acumulado en la producción agropecuaria creó condiciones favorables para el ulterior desempeño de la producción orientada a la demanda minera, especialmente de bienes-salario e insumos intermedios para la producción, una vez que el ciclo de explotación argentífera tuvo un alza sostenida.

El crecimiento económico y la dinámica del sector agropecuario no devinieron, sin embargo, en un proceso homogéneo, sino en uno marcado por una notable desigualdad regional, lo que habría de ser un rasgo característico de la prosperidad en el último periodo colonial novohispano.

La producción de plata y oro, como sabemos, estuvo orientada al mercado externo e influyó significativamente en las balanzas comerciales y de pagos, en tanto que la minería no monetaria hace referencia al proceso de producción de bienes intermedios, orientados al proceso interno de producción de plata.

La función de la plata en el sistema económico colonial.

La producción minera, dada la composición de su demanda y el alto grado de compensación de la oferta interna, produjo un ciclo de circulación del capital minero.

La minería que la economía novohispana mostró un dinamismo acusado en sus ciclos regionales de producción agropecuaria, en proporción con la capacidad de inserción en dicha demanda, así como de la posibilidad de participar en los amplios circuitos de circulación de las importaciones en los nudos del mercado interno.

El ciclo de productividad de la plata impulsado por nuevos descubrimientos de minas y el poblamiento del centro-norte del reino, está en el origen de dicha prosperidad secular que se tradujo en una onda larga de producción. La expansión del comercio interior y la creciente demanda de insumos mineros dieron un nuevo impulso a la producción interna asociada al proceso de extracción, refinación y producción de plata, lo que favoreció el gran empuje de la demanda interior y creó un sistema de encadenamientos productivos que extendió dicho aliento a la producción alimentaria, particularmente de bienes-salario, así como a la de insumos requeridos por el proceso industrial de la producción argentífera, como la sal, el Teques quite, el cobre, las corambres y el sebo, entre otros productos asociados a la demanda minera.

La conformación de un sistema económico productor de plata, sin embargo, sólo pudo realizarse gracias a la integración de un conjunto de medidas institucionales que se expresaron en decisiones de política económica, definición de derechos de propiedad y reducción de los costos de transacción y riesgo en la actividad empresarial de mineros y sus socios financieros.

La estrategia de cambio institucional que privilegió una doble política de fomento y rentabilización indirecta de los beneficios fiscales del crecimiento, mediante un conjunto de medidas legales, organizativas y fiscales que buscaban, sobre todo, bajar los costos unitarios de la producción minera, con una reducción del precio de los insumos mediante el mecanismo de subsidios directos al costo del mercurio, la disminución de los derechos patrimoniales e impuestos, así como con la promoción de una rebaja de los costos de transacción por medio de una nueva reglamentación que diera certidumbre a la posesión de las minas, a los contratos entre mineros y una autoridad corporativa que resolviese litigios y les otorgara el privilegio de la representación.

La política de utilidad económica de la Corona favoreció, en primera instancia, la recuperación de este sector, pero terminó imponiendo pesadas cargas fiscales a los consumidores que, en última instancia y mediante el mecanismo de transmisión de los precios por medio de las alcabalas, tuvieron que solventar dicha política de fomento y los costos de la declinación finisecular del producto minero.

Los ciclos de producción platera y la integración de su mercado.

La producción creció de manera significativa durante el siglo XVIII y muy especialmente en el último cuarto, en viejos y nuevos centros mineros. Un aspecto relevante del ciclo de productividad minera reside en la comparación entre las regiones prósperas que iniciaron el ciclo largo y las que lo consolidaron a finales del siglo. Se produjo, salvo en la continuidad de Real del Monte y Zacatecas, una relocalización productiva que expresa la primera expansión del norte minero y su peso en el producto total.

El Bajío, como espacio perimetral de la minería de Guanajuato, representaba este modelo de articulación espacial entre aquel sector, la ganadería y la agricultura comercial, y una especialización artesanal que habría de beneficiarse de la demanda minera, directa o indirectamente.

A principios del siglo XIX, la economía regional de Guadalajara se había constituido como un espacio urbano-regional de gran dinamismo económico: la concentración de la población en su capital,

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (11.2 Kb)  
Leer 7 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com