La Geofísica, más Que Una Ciencia.

La geofísica. Para muchos, un término desconocido; para otros, mucho más que una ciencia. Y es que, poder estudiar la configuración subterránea de las rocas desde la superficie con gran exactitud parecería algo casi imposible si no fuera por la existencia de los diferentes métodos de prospección geofísica. Cada uno de estos métodos estudia características del subsuelo basándose en variaciones de parámetros físicos de la corteza terrestre, como la gravedad, el magnetismo, la electricidad, la sísmica y la radiación. Y es gracias a esto que la sociedad actual subsiste, pues las aplicaciones que tiene esta ciencia hacen que la economía y el desarrollo permanezcan en movimiento.

A primera vista, la prospección geofísica es un conjunto de técnicas físicas aplicadas a la exploración geológica del subsuelo para la búsqueda y estudio de yacimientos de materiales útiles por medio de observaciones realizadas en la superficie de la tierra. Para esto, se han desarrollado diferentes métodos, los cuales miden variaciones en algunos fenómenos físicos. El método gravitacional detecta variaciones laterales de densidad, la cual puede cambiar en presencia de grandes cuerpos mineralizados; el magnético identifica cambios horizontales de susceptibilidad magnética, lo que es útil para encontrar grandes depósitos de minerales magnéticos; el eléctrico detecta variaciones de resistividad y de polarización inducida en un área; el electromagnético, cambios en la reflexión y transmisión de radiación infrarroja, ondas de radio y radar; y finalmente, el sísmico estudia la velocidad a la que el sonido o las ondas sísmicas se propagan en la roca.

Es importante tener en cuenta que los métodos más inexactos y con mayor probabilidad de presentar ambigüedades son el gravitacional y el magnético, pues no son tan detallados en comparación con el sísmico, el cual arroja datos que al interpretarse permiten crear una clara imagen del subsuelo.

Teniendo claro qué es la geofísica y cuáles son sus métodos de prospección, ahora hay que entender cuál es su importancia.

Desde el punto de vista económico, esta es un gran aporte, pues al encontrar una anomalía geofísica se pueden descubrir yacimientos de petróleo, gas, minerales rentables, carbón y aguas subterráneas. Lo que también contribuye con el desarrollo social y tecnológico, pues los minerales son materia prima en grandes industrias que producen elementos de consumo diario en todas las ciudades del mundo; de igual manera, la explotación de hidrocarburos mueve la economía de muchos países, aparte de ser fundamental para el funcionamiento de miles de máquinas. Además, esta es útil para detectar estructuras recientes y superficiales que afectan la construcción de obras de ingeniería civil como las condiciones de cimentación de una nueva carretera. Otros usos, menos relacionados con la

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