ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

BIOGRAFÍA NO AUTORIZADA DEL CID


Enviado por   •  23 de Agosto de 2015  •  Ensayos  •  723 Palabras (3 Páginas)  •  77 Visitas

Página 1 de 3

                                             BIOGRAFÍA NO AUTORIZADA DEL CID

    En realidad, todo empezó cuando el Rey de Granada Almudafar, quería atacar al Rey de Sevilla, Almutamiz, (estos dos se odiaban a muerte), Almudafar, tenía contactos muy poderosos, Ordoñez, Sánchez - yerno del Rey don García de Navarra - y Lope Sánchez. Todos estos personajes querían enojar al Rey de Sevilla. Como no me gustó mucho lo que iban a hacer les mandé unas cartas suplicándoles que no atacaran al Rey de Sevilla. El Rey de granada y su tropa  no escucharon mis súplicas, y atacaron sin piedad a Almutamiz. Entonces reuní fuerzas y me enfrenté al Rey de Granada, derrotándole. Todo lo que conseguí en esa batalla, se lo llevé al Rey de Sevilla. Éste me dio el sobrenombre de “cid campeador”, entonces le agradecí, y mi Rey Alfonso VI, se sintió orgulloso de mí, es decir, su vasallo. La gente se sentía envidiosa, y empezaron a hablar mal de mí. El Rey, como tenía algo de rencor por algo que le había hecho en el pasado, no tardo mucho en escucharlos. De repente, me llegó una carta diciendo que me fuera del reino en un plazo de unos nueve días debido a las falsas acusaciones que la gente tenía contra mí. Me despedí de mi mujer y de mis hijas y le dejé al abad don Sancho unos 150 marcos para que cuide a mi familia. Acto seguido, me fui.

         Caminé toda la noche hasta llegar a Castejón. Acampé sobre Alcocer, y me enfrenté a los moros aunque ellos me ganaban en cantidad. Sin embargo los derroté, y cuando me fui de allí decidí vender el castillo de Alcocer a los moros. Luego, me dirijo a Valencia y le mandé unos regalos al Rey Alfonso. Afortunadamente el rey me los aceptó y me permitió a mis hijas y a mi mujer, en Valencia.

         Más tarde, durante ese tiempo los infantes de Carrión tenían el deseo de casarse con mis hijas, entonces hablaron con el rey Alfonso y lograron acordar una cita conmigo para hablar del tema. Finalmente los terminé aceptando como futuros yernos.

     Pero un día, mientras yo dormía, un león que tenía que representaba el símbolo de la fuerza se había escapado de su lugar. Los infantes se acobardaron y no enfrentaron al león como debían haberlo hecho, por ello decidieron esconderse. Yo mismo tuve que enfrentar al animal para que volviese. Debido a este suceso los Infantes fueron objeto de risas y de bromas.

     Un buen día los infantes propusieron llevar a mis hijas a Carrión, donde ellos vivían. Por las dudas mandé a mi sobrino para que cumpla el rol de un espía y ver que todo esté en orden. Quería quedarme seguro que mis hijas estén en buenas manos. Pero no fue lo que reamente sucedió. Unos días después mi sobrino vino al reino con mis dos hijas que habían sido maltratadas por los infantes. Estaba muy angustiado. Apenas me enteré le avisé al rey Alfonso lo sucedido y le propuse concertar una corte en Toledo donde pudiera tanto retar como castigar a los infantes de Carrión y así poder vengar el mal que le habían hecho a mis hijas. El rey aceptó la realización de la corte y acordamos un día para que se llevara a cabo. En ese día, les pedí a los Infantes que me devolvieran las espadas que les regalé como muestra de confianza y les reclamé los tres mil marcos que les había dado. Pero estos ya se los habían gastado y decidieron pagármelos con especies o tierras de Carrión.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (3.8 Kb)   pdf (77.7 Kb)   docx (11.1 Kb)  
Leer 2 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com