Este documental nos remonta a un México a finales de los setentas y principios de los años ochenta

ANÁLISIS

Este documental nos remonta a un México a finales de los setentas y principios de los años ochenta, un periodo de la historia en el que la Policía mexicana sufrió un enorme desprestigio debido a las malas acciones y proceder que tuvo. El documental gira en torno al mal uso del poder que ejerció el jefe policiaco Arturo Durazo Moreno apodado “el negro”. Las injusticias de las que este hombre fue autor provocaron un enorme decremento a la Policía en las épocas que continuaron a los cuerpos de seguridad pública de aquel entonces.

Durante este documental se hace referencia a la tiranía que ejerció como jefe de la Dirección General de Policía y Tránsito este personaje, su influencia para el bloqueo de avenidas por las cuales circulaba, afectando a miles de personas en forma indirecta. Pasando por la construcción de una enorme casa en el Ajusco con acabados y réplicas de otras construcciones exactas y millonarias, la impresionante construcción llamada “el Partenón” en una playa, así como el mal empleo de la fuerzas policiacas para uso personal, el despilfarro millonario de dinero, la caída en todos los excesos, la contratación de bailarinas exóticas, prostitutas, modelos, drogas, alcohol fiestas exclusivas, pasando por el tráfico de influencias, desvió de recursos de gobierno, hasta llegar a homicidios, tortura, toda clase de violación de derechos humanos y garantías individuales. El mal trato a los subordinados, la impunidad total. En otras palabras este personaje es un clásico ejemplo de lo que significa ejercer poder con incompetencia y falta de ética.

También en esta película se muestra el acoso sexual que las esposas, hermanas o amantes de los elementos sufrían, y en contraste nos brinda una breve enseñanza de que el dinero y el prestigio finalmente terminan corrompiendo a muchas personas ya que así como hubo acoso algunas otras se prestaron para la corrupción con favores sexuales.

El mal uso de las facultades que los policías tenían como servidores públicos ya que, como elementos de seguridad pública, hacían mal uso de sus facultades, la ciudadanía era quien sufría. La película finalmente termina con la detención de el negro Durazo en un aeropuerto, pero deja un hueco en la historia posterior a la liberación de este mismo por la falta de pruebas. Ya que este personaje finalmente termina impune y esto deja ver el porqué del odio que muchas veces la sociedad tiene hacia la Policía, pero que, en lo personal siempre puede haber un cambio en la forma de pensar de las personas, a través de acciones de cambio empezando por uno mismo, mediante valores y ética que se vean reflejados en una procuración de justicia.

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