Genero Fantastico

El cuento tiene un significado susceptible de interpretar, la traducción arrojara un sentimiento al niño, lo ideal es que el niño lo traduzca en un sentimiento de alivio. La importancia del cuento dependerá del estadio de desarrollo del niño y de los problemas más acusantes de ese momento. En los cuentos de hadas los procesos internos se externalizan y se hacen comprensibles al ser representados por personajes de una historia y sus hazañas, no se pretende describir el mundo ni mucho menos aconsejar, el niño encuentra sus propias soluciones. Los protagonistas y los acontecimientos del cuento personifican e ilustran conflictos internos, el cuento sugiere como resolverlos.

La finalidad del cuento es insinuarle al niño que existe una vida buena y gratificadora al alcance, a pesar de las adversidades, crear la sensación de alivio, un final feliz. Se debe tomar en cuenta que ningún cuento de hadas tiene la capacidad de resolver todos los conflictos internos de un niño, y que cada niño reaccionara de manera distinta a cada cuento, por medio de asociaciones libres, solo sugiere algunas soluciones a ciertos conflictos, muestra un camino. El cuento representa luchas internas y externas.

En forma simbólica indica al niño cual es la batalla que debe librar.

El niño ira vislumbrando las soluciones a sus conflictos de manera inconsciente, sus pulsiones se iran apaciguando (no reprimiendo), sublimando con la fantasía y externalizando por medio de los personajes sus sentimientos.

En el cuento es importante que los personajes tengan nombres corrientes (Juan, Pedro, etc.), algunos personajes no tienen nombre para facilitar la externalizacion y proyección al niño.

En realidad en el cuento no vences a nadie, vencer a uno mismo es la finalidad, el premio de la batalla es la felicidad tras el alivio.

Freud llego a la conclusión de que la mejor manera de contribuir a poner orden en el caos increíble de las contradicciones que coexisten en nuestra mente; vida interna, es mediante la creación de símbolos.

Entre las riquezas del cuento podemos encontrar que el niño desarrollara su capacidad de abstracción. Sabemos que las palabras que articulan el lenguaje humano son símbolos que evocan también representaciones y, por tanto, llevan a la mente figuras, imágenes. El cuento puede ser hoy en día una herramienta, en días en los cuales la comunicación tiene como medio principal, la imagen, se producen imágenes pero se anulan los conceptos, se atrofia nuestra capacidad de abstracción, de simbolización y por ende de entender.

Las imágenes acústicas que el niño crea en su mente mientras se le narra un cuento, lo ayudan, más que nada, a lograr una simbolización de los conflictos psíquicos por los que este pasando, al mismo tiempo la externalizacion del conflicto apacigua las caóticas pulsiones de su inconsciente.

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