ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

La momificación


Enviado por   •  2 de Febrero de 2014  •  Tesis  •  2.006 Palabras (9 Páginas)  •  240 Visitas

Página 1 de 9

En los tiempos del Reino Antiguo, los sacerdotes de Heliópolis habían plasmado en los "Textos de las Pirámides" unas fórmulas funerarias que solamente se aplicaban cuando fallecía el rey. Con ellas se pretendía facilitar su resurrección, de modo que envuelto en el incienso quemado en los funerales el Ba[1]del monarca fallecido habría de iniciar un proceso ascensional cuya culminación sería su transfiguración en una divinidad estrella situada en lo que nosotros conocemos como Estrellas Circumpolares, que por no desaparecer nunca de la visión del hombre los egipcios consideraban como Estrellas Imperecederas.

Con estos textos se trataba de conseguir que el rey fallecido, glorificado en una estrella inmortal, brillase en el cielo durante "Millones de Años", toda la eternidad, junto a Atum-Re, la divinidad primordial de la que había surgido la Creación.

Tras los acontecimientos del Primer Periodo Intermedio, de los que surgirá lo que se conoce como "democratización" de las creencias funerarias, todos los muertos habrán de tener ahora la posibilidad –y no solo el rey- de ser glorificados y transformados en divinidad, asimilados a Osiris. Es así como el texto funerario más destacado del Reino Nuevo, el denominado "Libro de los Muertos", se distinguirá por tener un contenido que sirve no solo para el monarca fallecido, como sucedía con los "Textos de las Pirámides", sino para todos los hombres, que ansían conseguir igualmente la eternidad.

La momificación

Entre los ritos funerarios egipcios, los más conocidos son los propios de la momificación, los de la Apertura de la Boca y los que intentaban insuflar la vida en las estatuas que representaban al difunto (ritos de animación). Hablaremos brevemente de estos rituales, para situarnos en el contexto funerario del antiguo Egipto, e inmediatamente pasaremos a comentar un rito menos conocido, a pesar de que se expone con ciertos detalles en el "Libro de los Muertos"; nos referimos al denominado ritual de las Cuatro Antorchas de Glorificación.

Con el proceso de momificación de los cuerpos de los difuntos los antiguos egipcios no pretendían sino que se mantuviera la vinculación del Ka[2]del fallecido con su cuerpo incorrupto. Cuando se estudian las creencias de estos hombres en relación con las esperanzas que tenían de mantener la vida tras la muerte, las ideas que se nos brindan acerca de la necesidad de conservar incorrupto el cuerpo sobresalen, sin duda, por su pobreza. Cuando al hombre le espera una vida eterna, espiritual, asimilado a la divinidad, no parece tener mucho sentido esa necesidad de conservar el cuerpo, que es el componente más material del hombre. Si el destino final de los difuntos, al menos de los que en vida habían sido iniciados en los Misterios, era conseguir la Glorificación y verse transformados en espíritus Aj[3]es decir en seres de luz (luminosos o brillantes, dicen las fuentes) asimilados a la divinidad no podemos sino interrogarnos por la obsesión mostrada por esa necesidad de momificar los cuerpos. Quizás con ello pretendían evitar que algo que temían, y que nosotros desconocemos, se produjera. Posiblemente se trataba de evitar la dispersión de los diversos componentes que se integran en el hombre, intentando así que no se diluyeran y que el fallecido no perdiera su personalidad.

Los egipcios, en todo caso, estaban convencidos de que el cuerpo momificado seguía siendo el soporte del Ka del difunto, de modo que era una imperiosa necesidad conseguir su conservación. Estos hombres parece que no eran capaces de entender una vida eterna si esta no estaba de algún modo vinculada a un cuerpo, o en su defecto a una estatua que representase al difunto y que hubiese cobrado vida a través de los ritos mágicos de la animación.

El proceso de momificación duraba setenta días y todo parece sugerir que ese periodo de tiempo se relacionaba con cuestiones de tipo religioso y astronómico vinculadas con la estrella Sothis. En efecto, tras brillar en el cielo nocturno, esta estrella, cuando desaparece de la visión, lo hace también durante setenta días. Todo parece indicar que ese periodo de tiempo que mediaba entre la muerte y la resurrección de la estrella, fue asimilado al plazo en que habría de producirse la vuelta a la vida de los fallecidos. Si Sothis y las decanes del cielo nocturno egipcio resucitaban a los setenta dias –argumenta Lara Peinado- es razonable pensar que lo mismo sucediera con los hombres.

La Apertura de la Boca

Se trata de un rito que era practicado por el sacerdote Sen junto a la entrada de la tumba, a veces ya dentro, con el que se pretendía que la vida retornara al cuerpo muerto. Con la momificación se conservaba el cuerpo incorrupto. Con la Apertura de la Boca, la vida volvía a ese cuerpo.

Las inscripciones y los grabados de las paredes de las tumbas nos dicen que se trataba de un rito complejo, que se celebraba de día y cuyo acto central consistía en abrir simbólicamente la boca del difunto utilizando para ello un objeto parecido a un cuchillo o azuela. Tras el ritual, el difunto era vestido con ropas sagradas y adornado con diversos ornamentos y luego se llevaba a cabo el banquete funerario, en el que –de algún modo- lo que se estaba celebrando era esa vuelta a la vida del fallecido. Tras reiteradas oraciones y letanías la momia, tras haber sido abrazada antes por los familiares, era finalmente depositada en la tumba. En el capítulo 23 del "Libro de los Muertos" se nos brinda la fórmula que se debía pronunciar en ese momento de la Apertura de la Boca.

Una vez en el interior de la tumba, ya en la noche, era cuando se realizaba el ritual de las Cuatro Antorchas de Glorificación.

Las cuatro antorchas

Con el rito de las antorchas, del que se ocupa el capítulo 137A del "Libro de los Muertos" no se buscaba que la vida retornara al cadáver, algo que ya se había conseguido previamente, sino que se pretendía que el calor vital y la luz de la divinidad afluyesen al difunto. El rito se llevaba a cabo en el interior de la cámara funeraria, tras la Apertura

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (12 Kb)  
Leer 8 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com