Nada Carmen Laforet

Nada. Carmen Laforet

Nada se trata de una novela que envuelve al lector desde el primer momento, porque empieza como en una historia cortada “Por dificultades en el último momento para adquirir billetes, llegué a Barcelona a medianoche, en un tren distinto del que había anunciado y no me esperaba nadie” (Pág. 11) Es llamativo porque nos dice que viene de algún lugar, que llego a Barcelona, pero que nadie la esperaba, desde la primera línea hay una desatención de sus familiares, pero sin embargo es la parte más alegre de Andrea, la protagonista “…las luces siempre tristes, tenían para mí un gran encanto, ya que envolvía todas mis impresiones en la maravilla de haber llegado por fin a una ciudad grande, adorada en mis ensueños por desconocida.”(Pág. 11) Ella ve todo con buenos ojos, nos habla de la estación, de las calles, de la gente, que aunque se ve triste y las calles solas ella lo ve como una aventura, lo ve como una oportunidad, porque eso es lo que fue a buscar a Barcelona, una oportunidad de estudiar la Universidad pero no tenia idea de como era su familia.

En Nada, los personajes están muy apartados por la misma Andrea, que no quiere mezclar sus amistades con tu familia, intenta de mantener una distancia entre ambos, los describe desde un punto de vista muy personal y no se mete en asuntos de política, no va en contra del franquismo, pero algunas veces se advierte algún tema pero lo lleva a los personal.

La autora nos cuenta en primera persona, “…Al menos, así creía yo entonces…” (Pág.200) pero desde una primera persona madura, recapacitando los hechos y contándolos, lo que en primera instancia nos haría pensar que se trata de una autobiografía, ya que buscando un poco acerca de la obra nos encontramos en la introducción a la compilación titulada Novelas (Primera edición de 1957, Barcelona, Editorial Planeta) lo siguiente: "No es, como ninguna de mis novelas, autobiográfica, aunque el relato de una chica estudiante, como yo fui en Barcelona, e incluso la circunstancia de haberla colocado viviendo en una calle de esta ciudad donde yo misma he vivido, haya planteado esta cuestión más de una vez".

La obra es una crítica a la parte más sagrada del núcleo de la sociedad, la familia, porque desde la primera impresión ella queda asqueada acerca de las personas con las que tendrá que convivir, y además se siente que Andrea está muy incómoda y ella lo describe “…Vacilaba. Hacía esfuerzos por recordar. Aquello era lastimoso” y eso apenas en el primer encuentro con su abuela, con la mas educada al parecer, la que menos crea conflictos porque de inmediato cuando se presenta con Angustias, Juan, Gloria y Román, ellos si que son un caos, además de que son un caos que se sale de la casa, porque Román, es un hombre sin escrúpulos, y con actitudes don juanescas.

Una comparación muy espectacular es la que encontramos

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