Una criatura Maravillosa

UNA CRIATURA MARAVILLOSA

Hace mucho tiempo atrás, en lo recóndito de la espesura de nuestra amazonia, se encontraba una comunidad nativa, en la cual, vivía una pequeña y humilde familia de 3 integrantes, la mamá, el papá, y una pequeña. Su nombre era, Nia, de aproximadamente 15 años, era una niña muy extrovertida y aventurera, le encantaba recorrer las maravillas que la naturaleza le brindaba.

En uno de sus recorridos que hacía por el bosque pudo conocer a un ave nunca antes vista. Esta era de inmenso de tamaño, con una envergadura de 3 metros de alto y alas de casi 10 metros; en el primer momento que la vio, Nia se llevó un gran susto, pensando que iba a ser atacado por tan majestuoso animal, que al parecer era de la época prehistórica. Dicha ave mitológica, le sorprendió aún más cuando le dijo:

• No te asustes Nia, mi nombre es Bakara, yo he estado en estos lugares escondidos de los hombres como tú incluso antes de la existencia de las civilizaciones más antiguas, protegiendo estas tierras de cualquiera que ose irrumpirlo; sin embargo, veo que tú eres de corazón noble y es por eso que he decidido perdonarte la vida. La única condición, es que no le cuentes a nadie de mi existencia; siempre y cuando no me delates, yo seré tu aliado y te ayudare a superar todas las adversidades que te sucedan.

• Está bien Bakara, así será – dijo Nia –.

La joven retorno a su hogar y no volvió a aquel lugar. Tras el pasar de los años Nia mantuvo en secreto este episodio de su vida. Ya siendo adulta, tuvo que migrar a otros lugares para trabajar y poder ayudar a su pueblo, alejándose de su familia durante mucho tiempo.

Durante todo este tiempo no habido vuelto a ver ni escuchar a Bakara, hasta que, en cierta ocasión, mientras dormía, en uno de sus sueños se le apareció el ave que hace treinta años atrás había conocido, quién le reveló que en su pueblo natal una gran tormenta había acaecido y que sus padres de avanzada edad corrían peligro de muerte.

Nia de un brinco despertó asustada y después de mucho tiempo, volvió a dicha ave majestuosa que le decía:

• Tienes que viajar a tu pueblo llevándoles víveres y medicina a tus padres y a tus amigos.

Pero Nia en esos momentos se encontraba muy distante y no contaba con los medios necesarios para comprarles las medicinas y víveres que requerían sus familiares y el ave le dijo:

• No te preocupes Nia – dijo Bakara - , te dije que siempre estaría allí para ayudarte, yo conseguiré lo que necesites y te llevare en mi dorso volando a tu hogar para que puedes socorrer a tu comunidad.

Bakara cumplió su promesa y tal y como dijo, Nia tomo las medicinas y los víveres, y viajando entre las altas de este bondadoso animal, sobre cumbres, nevados, cataratas, lagos y ríos, llego a su pueblo y rescató a sus familiares y amigos. La mítica criatura voló hacia el cielo deteniendo la tormenta para no volver a ser vista nunca más.

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