Aristóteles concibe la teoría ética como un campo distinto de las ciencias teóricas

Aristóteles concibe la teoría ética como un campo distinto de las ciencias teóricas.  Su metodología debe coincidir con su materia, bien sujeto a la acción y deben respetar el hecho de que en este campo muchas generalizaciones sólo tienen en su mayor parte.  Se estudia la ética con el fin de mejorar nuestras vidas, por lo que su principal preocupación es la naturaleza del bienestar humano.  Aristóteles sigue Sócrates y Platón en la toma de las virtudes a ser esenciales para una vida bien vivida.  Al igual que Platón, se refiere a las virtudes éticas (justicia, fortaleza, templanza, etc) como complejas habilidades racionales, emocionales y sociales.  Pero él rechaza la idea de Platón de que una formación en las ciencias y la metafísica es una condición necesaria para la plena comprensión de nuestro bien.  Lo que necesitamos, para vivir bien, es una apreciación adecuada de la forma en que los bienes como forma de amistad, el placer, la virtud, el honor y la riqueza como un todo.  Con el fin de aplicar ese conocimiento general a casos particulares, hay que adquirir, a través de la educación y los hábitos apropiados, la capacidad de ver, en cada ocasión, qué curso de acción es la mejor motivada.  Por lo tanto, la sabiduría práctica, como él lo concibe, no puede ser adquiridos únicamente en aprender las reglas generales.  También hay que adquirir, a través de la práctica, las habilidades de deliberación, emocionales y sociales que nos permitan poner nuestra comprensión general de bienestar en práctica de manera que sean adecuados para cada ocasión.

•  1.  Preliminares 
•  2.  El bien humano y el argumento de la función 
•  3.  Metodología 

•  3.1 virtudes tradicionales y el escéptico 
•  3.2 Las diferencias y afinidades de Platón 

•  4.  Virtudes y deficiencias, continencia y la incontinencia 
•  5.  La Doctrina del Medio 

•  5.1 La virtud ética como disposición 
•  5.2 La teoría ética no ofrece un procedimiento de decisión 
•  5.3 El punto de partida para la Razón Práctica 

•  6.  Las virtudes intelectuales 
•  7. Akrasía 

•  Documento complementario: lecturas alternativas de Aristóteles en akrasía 

•  8.  Placer 
•  9.  Amistad 
•  10.  Tres vidas, en comparación 
•  Glosario 
•  Bibliografía 

•  A. Traducciones 
•  B. un solo autor Visión general 
•  C. Antologías 
•  D. Estudios de temas específicos 
•  Otras bibliografías 

•  Otros recursos de Internet 
•  Entradas relacionadas 

 1.  Preliminares

 Aristóteles escribió dos tratados de ética: la Ética a Nicómaco y la Ética a Eudemo.  Él no se usa cualquiera de estos títulos, aunque en la Política (1295a36) que remite a una de ellas, probablemente la Ética a Eudemo, como "ta êthika", sus escritos sobre el personaje.  Las palabras "Eudemo" y "a Nicómaco", se añadieron más tarde, tal vez porque la primera fue editada por su amigo, Eudemo, y el segundo por su hijo, Nicómaco.  En cualquier caso, estas dos obras cubren más o menos el mismo terreno: comienzan con un análisis de la eudaimonía ("felicidad", "floreciente"), y a su vez a un examen de la naturaleza de la areté (la "virtud", "excelencia" ) y los rasgos de carácter que los seres humanos necesitan para vivir la vida en su mejor momento.  Tanto los tratados de examinar las condiciones en las que la alabanza o la culpa son apropiados, y la naturaleza del placer y la amistad, casi al final de cada obra, nos encontramos con un breve análisis de la relación adecuada entre los seres humanos y lo divino.

 Aunque el punto de vista general se expresa en cada obra es el mismo, hay muchas diferencias sutiles en la organización y contenido.  Claramente, se trata de una reelaboración de la otra, y aunque no de una sola pieza de evidencia muestra de manera concluyente lo que su orden es, en general se asume que la Ética a Nicómaco es una versión más reciente y mejorada de la Ética a Eudemo.  (No todos los de la Ética a Eudemo fue revisado:. Sus libros IV, V, VI y volver a aparecer como V, VI, VII de la Ética a Nicómaco) Tal vez la indicación más evidente de este orden es que en varios casos, la Ética a Nicómaco se desarrolla un tema sobre el que su primo Eudemo está en silencio.  Sólo la Ética a Nicómaco se analiza la relación estrecha entre la investigación ética y la política, sólo la Ética a Nicómaco examina máxima de Solón que ningún hombre debe ser contado feliz hasta que está muerto, y sólo la Ética a Nicómaco da una serie de argumentos a favor de la superioridad de la vida filosófica a la vida política.  El resto de este artículo se centrará en este trabajo.  [Nota:. Los números de página y la línea de ahora en adelante se referirá a este tratado]

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