¿Cómo se ve reflejado el pensamiento de los antiguos griegos en la realidad actual?

¿Cómo se ve reflejado el pensamiento de los antiguos griegos en la realidad actual?

El conocimiento de los primeros hombres desde la prehistoria hasta las nuevas ciudades de la Antigua Grecia fue absorbido por el mundo de la magia, misterio y superstición durante siglos, creían que las enfermedades eran obra de espíritus, brujería o que se encontraban en una lucha contra fuerzas que habitaban dentro la propia naturaleza, dando origen también a leyendas de la selva y de las tribus, toda su vida fue presa de los temores y creencias, relacionándolo asimismo con ideas acerca de los problemas de la salud y la enfermedad, la vida o la muerte, aquellos accidentes como la herida que dejó un animal salvaje, la caída de un árbol o la agresión de un hombre a otro le atribuían la presencia de un elemento causal, a un  efecto lleno de maldad o espíritu de venganza, buscando respuestas en sueños, es decir, recreaba las experiencias relacionadas con la muerte, lugares o animales concluyendo así que tenían un espíritu que podía viajar y estar presente aún, esto es, todo aquello que se movía como el río, agua, la Luna, estrellas y el viento estaban vivas y debían de poseer un espíritu. Hoy en día podemos encontrar ciertas similitudes que enfrentan una crítica social, el ser supersticiosos, el hacer rituales, conjuros con propósitos de autocuidado y bienestar en nuestra persona, en nuestra economía y en nuestras relaciones. Sin embargo, la utilidad que le damos a la magia y a los hechizos se canaliza hacia el mal buscando como consecuencia el daño hacia otra persona. Posteriormente encontramos una estrecha conexión con la filosofía griega influenciada por la literatura y metodología del antiguo oriente para saber la realidad y movimiento del mundo, designando entonces una materia para el principio de todas las cosas, representaciones simbólicas como el agua, aire, fuego y tierra como elementos racionales y cosmogónicos que dan lugar al hombre teórico que vive de la curiosidad y del saber, al presente, concebimos que el principio de todo son partículas, que los humanos se componen  de sus pensamientos y experiencias, o visto de una manera superficial que somos números o las fotos que publicamos, que somos nuestras acciones, pues, como

mencionaban Platón y Sócrates, la virtud como sabiduría y conocimiento, reflejando que estamos en armonía con nuestra moral y que actuamos por voluntad, porque el mal es producto de la ignorancia desconociendo lo que es bueno y justo, en otras palabras, desde hogaño, buscamos guiar la conducta humana por la distinción de la ética y la moral, porque formamos parte de una sociedad con normas y leyes, porque poseemos una conciencia autónoma, un juicio y un razonamiento.

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